Guerra Mundial Z

No soy aficionado al género de zombies, de hecho las películas y series de zombies y su cansina moda me han acabado tocando bastante las narices, pero cuando empecé a leer que muchos aficionados a la casquería no-muerta hacían malas críticas de esta película, supe que podría interesarme verla.
Y no me equivoqué. Me ha parecido una peli bastante apañada, muy entretenida y probablemente la que más me ha gustado de las 5 o 6 que he visto del género, incluyendo algunas del Romero (oh sacrilegio!).

Tampoco he leído el libro ni pienso hacerlo. Esta no es mi guerra, aunque sea mundial. Yo simplemente he visto una película que me ha hecho pasar un rato muy entretenido y en varios momentos divertido, lo demás me da igual. No me parece mal que haya fallos, ni que sea un film políticamente correctísimo para George Bush (especialmente para él), ni que no le dé miedo ni a los niños de 5 años, etc, etc, porque precisamente lo que a mí me atraía era la posibilidad de presenciar todo eso y fui al cine con la esperanza de ver una peli de zombies diferente a las habituales, pues las habituales son las que no me gustan.

Por eso cuando vi este Disneyworld Zombie con Brad Pitt de maestro de ceremonias me sentí reconfortado y me divertí, porque como digo en el título de la reseña, para ver todo tipo de abominaciones y maldades de ultratumba basta con poner la tele todos los días entre las 2 y las 4 de la tarde.

La película esta bastante bien, salvo que el inicio no tiene mucho sentido y el objetivo de la misión no se llega a conseguir, pero la película es bastante entretenida y amena. Mi voto - 7 - Buena.

Opinión basada en la versión sin censura disponible en Bluray.

Una vez fuera de la sala del cine me quede con la sensación de haber visto una película emocionante, tensa y bien actuada. Sabia que no se podía seguir al pie de la letra el libro por su estructura particular, pero la película cumplía en darle un aspecto global a la epidemia y sobretodo contaba con algunas set pieces poderosísimas y difíciles de olvidar, aun así algo le faltaba, era esa sensación de que todo estuviera muy limpiecito, pues bien en la edición en Bluray esto se a corregido.

La historia es la misma y las escenas añadidas, salvo en una ocasión en particular donde vemos una extracción de dientes, no ofrecen nada argumentalmente, pero si la acercan mas al genero zombi y de terror, varias escenas extendidas donde vemos mas de cerca los zombis y sus mortales castañeadas de dientes, la amputación del brazo del soldado ahora si es explicita, así como unas cuantas escenas donde al asestar golpes a los zombis se ven sus resultados.

Estas escenas son el empujoncito que la película necesitaba para volver más realista aun todo el asunto.

Es bastante curiosa la variedad de géneros (que no estilos) que presenta la carrera del correcto, pero anodino, director Marc Foster. Desgraciadamente para él sus mayores logros siguen siendo los de su segunda película, la ya lejana, Monsters Ball. Desde entonces ha probado, con escaso riesgo, el melodrama con aspiraciones, el thriller, la acción con la más discreta de las películas sobre James Bond de esta última etapa, y la comedia excéntrica con la más que curiosa Más extraño que la ficción, posiblemente su siguiente película en mis preferencias. Con Guerra Mundial Z (GMZ) se acerca al blockbuster veraniego con resultados bastante aceptables, pese a que la película tuvo muchos problemas en la fase final de su rodaje y postproducción, algo que siempre suele generar dudas sobre el resultado final.
La premisa argumental de GMZ es la misma que la otras muchas producciones del género. Una epidemia de origen desconocido esta transformando en zombie a toda la población mundial a un ritmo imparable. Si no se encuentra una solución al problema, cosa que parece imposible, en pocos días los pocos seres humanos que se mantienen vivos acabarán sucumbiendo ante unos zombies tan muertos como rápidos y agresivos. Así el ejército americano decide confiar todas sus posibilidades a un investigador, Brad Pitt of course, que viaja por medio mundo tratando de buscar una solución al problema. Así el protagonista deja a su familia para embarcarse en un viaje peligroso y con pocas posibilidades de éxito.
A la película se le puede achacar una falta de cohesión notable, ya que la historia casi nunca funciona como un bloque sólido y consistente. La película está compuesta por diferentes partes que por separado funcionan con bastante fuerza pero que en conjunto no engranan con la suficiente soltura, desperdiciando la posibilidad de crear un relato perdurable y definitivo.
El primer encuentro del protagonista y su familia con los zombis, el bloque de apartamentos, Corea, Israel, el avión y finalmente el laboratorio en Irlanda son los seis grandes momentos que componen GMZ. Y hay que reconocer que todos ellos resultan notables. Están rodados con mucha fuerza, pese a esa cámara que no para quieta ni un momento, y llegan a conseguir imágenes inesperadas y sorprendentes, algo muy de agradecer a estas alturas, cuando hay veces que es difícil distinguir este tipo de películas entre sí. Lo más impactante es la velocidad a la que se mueven los zombis, acostumbrados como estábamos a que los zombis fueran unos seres letales pero muy lentos y torpes.
Por lo demás la presencia de Brad Pitt como estrella absoluta siempre es una garantía. Y es que aunque no pueda aprovechar las posibilidades de un personaje para lucirse como actor, como es el caso, nunca pierde ese magnetismo y carisma que le han convertido en una de las grandes estrellas de estos últimos veinte años.

"Es la mejor novela que me he leído jamás. Es la leche, es original y divertida...Está de puta madre".

El comentario, de unos amigos con los quedé a almorzar, fue el primero que oí de la novela de Max Brooks (sí, el hijo de Mel Brooks el director de cine), y esto fue hace años, mucho antes de que se estrenara la peli. Más tarde me pillé el libro, me lo leí, y si bien no es la obra maestra que pretendían mis amigos, lo cierto es que es original y entretiene lo suyo.

La novela se estructura en forma de cortas entrevistas realizadas a los supervivientes después de la guerra, y tiene la originalidad de tratar el tema zombie como una guerra total entre las naciones humanas y la plaga.

Ahora, con la temática zombie en auge ("The Walking Dead" y productos similares), estrena el efectivo Marc Forster su peli de muertos vivientes con la garantía de trabajar sobre un guión, por lo menos, diferente a la clásica historia de supervivientes que se refugian en un edificio y escapan de la plaga en el típico camión. Aquí, el hilo conductor entre las historias es el personaje de Brad Pitt, encargado de la ONU para buscar un remedio a la enfermedad.