El último samurai

Todavía no se ha hecho una película que haga justicia a los samurais. Siempre nos los han pintado como honorables señores que siguen un código de honor altruista; nada más lejos de la realidad. Es más, las ideas totalitarias y fascistas de los samurais siguen azotando Japón después de más de 100 años de la abolición de las clases sociales (el que no sepa de que hablo que se pase unos años viviendo en Japón). Si sabes eso, te dará ganas de vomitar cada escena de esta película, donde se nos pinta a los samurais japoneses como seres espirituales y bondadosos. Posiblemente más de uno se entristeció con la escena donde el chavalote samurai es humillado, sin saber que la clase samurai ya de por sí representa una humillación y hace apología de la discriminación y desigualdad. Vamos, que cuentan la historia desde el año en que les interesa para tener a sus samurais como víctimas santas. Otro gallo cantaría si se contara la historia desde 3 o 4 siglos atrás, donde los samurais hacían lo que les daba la gana con el pueblo.

En definitiva, película que sólo gustará a occidentales orientalistas hartos de manga, anime y pseudo-cultura japonesa, y a algunos japoneses de mente obtusa que no conocen la verdad sobre la historia de su propio pais. Si lo que buscas es un relato creíble, realista y que salga de los tópicos de siempre, esta no es tu película. Siempre sacarás más en claro viendo "Bailando con lobos", obra maestra a la que esta porquería orientalista y comercial debe gran parte de su guión.

Ahora tu, orientalista fan del manga, el anime, el cine japonés y demás, puedes tildar mi crítica de "mala" y cascarle un "no". Si te sirve de algo, yo te digo que pensaba muy parecido a ti hasta que conocí Japón en profundidad, y me di cuenta de toda la basura hipócrita y falsa que nos venden a través de su multi-media. Japón no es lo que se ve en la pantalla, tampoco lo son los samurais. Hizo falta mucho tiempo para que directores como Kevin Costner rompieran con los tópicos de los "indios malos" que nos habían vendido con el cine durante años. Me pregunto cuando surgirá algún director que igualmente rompa con los tópicos de "samurais buenos" en el cine, y nos los pinte de una manera más acorde con la realidad: Unos bárbaros racistas (cosa que por cierto, convierte el hecho de que acepten a un blanco en esta película como a uno de ellos en algo totalmente increíble), fascistas y asesinos que valoraban la fuerza bruta por encima de todo, y que al igual que hicieron los colonos en América, invadieron Japón engañando y matando a los ainu, las tribus de las islas Ryuu-Kyuu, y demás nativos que estaban allí antes que ellos. ¿Qué? Que esta parte de la historia no la conocías? Lógico, los japoneses se cuidan mucho de no contarla nunca, y por eso surgen películas como esta, hechas por occidentales confundidos y engañados.

A mi no me venden "la moto". Tu eliges si te la venden a ti o no.