Mi título es una forma de decir que me parece ofensiva la forma en la que en la serie se utilizan las creencias de las personas, y se trivializan los sentimientos religiosos poniéndolos al mismo nivel que la mitología. Como siempre se trata con ligereza a Jesucristo. Para muchos será saludable la irreverencia, para mi desde luego no. Para otros será una forma magnífica de libertad creativa y de expresión. Pero yo creo que se puede hacer mucho cine sin ofender a los demás.

Yo he llegado hasta el capítulo 6 con mucho esfuerzo. Ojalá no hubiera perdido el tiempo con esta serie. Me he cansado incluso de los comentarios racistas que sueltan algunos de sus protagonistas. Además salvo unas poquísimas situaciones curiosas, tiene un pobre guion. Y gore del malo. Que se alabe este producto por la crítica especializada me parece una pena.

En cuanto a las interpretaciones nada reseñable. Ian McShane hace como siempre, de él mismo. Las mismas caras y los mismos gestos. Prefiero mil veces el papel de Peter Stormare que hace también de Peter Stormare.

No le pongo el uno por esas poquísimas situaciones curiosas que se dan.