Película más que olvidable de Netflix, como tantas otras que se estrenan en la plataforma. Comienza como un drama exponiendo al espectador la cotidianidad de una familia pobre de color, excepto la abuela, donde no sentirás empatía por ninguno de los personajes debido, principalmente, al nefasto desarrollo argumental, lineal y plano y, por supuesto, a la falta de expresividad del elenco protagonista que ni discutiendo a gritos se despeina.

Más de tres cuartas partes de la película te la pasarás preguntándote dónde están los monstruos y quizá, sea lo mejor, porque cuando aparecen, te das cuenta que estaban mejor los soporíferos minutos de drama familiar.

Los efectos especiales son realmente cutres hasta el punto de ver pintados con rotulador negro los dientes de la criatura. Tras esto, cerca del final, se muestra un paradigma religioso, que no es más que un refrito de las peores películas de terror la historia del cine, acompañados con el mismo rotulador, pero esta vez para pintar la cara, con el único propósito de buscar adeptos y seguidores para no se sabe qué credo pseudo-cristiano.

Película simplona, sin gracia, grabada durante la pandemia con 7 actores en total, filmada en Almendralejo (Badajoz) con muy poco atino en la fotografía, en el casting, en el guión, malísimo hasta decir basta, y una dirección que deja mucho que desear.

Aburrida de principio a fin, con diálogos sin gracia, tampoco tiene nada interesante que contar. Ninguno de los actores destaca y la química entre ellos es nula. Además, no hay ningún momento de tensión, ni duelo actoral o climax, sencillamente no hay nada por ninguna parte, solo aburrimiento.

No sé que clase de producto querían obtener, pero estoy seguro que éste, no era el que esperaban los productores.

Sin argumento y mal escrita de principio a fin, era imposible poder visionar en su totalidad esta película horrorosamente dirigida con unas actuaciones mediocres tirando a flojas.

Podría hacer una crítica sobre esto y aquello, pero al final, lo único que querría decir realmente es que no pierdas el tiempo y "No la veas".

La verdad es que, despues de las otras dos series del Universo de secundarios de Marvel, no esperaba nada especial. La serie es extremadamente plana y simple y eso que el argumento principal es el multiverso. Lo peor es el desarrollo tan desigual de los episodios, en algunos no pasa nada y en otros absolutamente de todo.

Plantear la idea antropocentrista y ridícula de que, un simple mortal, con una única y simple decisión, puede hacer que se destruya el universo al completo y eso que en Marvel necesitaron más de una docena de películas para que Thanos terminase solo con la mitad del universo, es absurdo y contradice todo el universo Marvel.

Partiendo de ahí, todo lo que se desarrolle con esta premisa no puede ir más allá de un producto infantil y aburrido, carente de interés y plagado de diálogos insulsos por doquier donde no paran de hablar y hablar y no dicen nada.

El pobre de Tom Hiddleston está toda la serie encorsetado en un personaje del que no le permiten desarrollar ningún aspecto que se salga de lo políticamente correcto, quedando una interpretación infantiloide y vacía. Por su bien, espero que no vuelva a interpretar al personaje nunca más y se inventen alguna absurdez para que aparezca otro actor en los futuros episodios de la temporada 2. Por su parte, Owen Wilson no destaca en absolutamente nada, si hubieran utilizado una fotografía de cartón a tamaño real nadie se habría dado cuenta. Una pena.

Disney, de nuevo, para que sus productos sean visionados por la máxima audiencia posible, quiere que la serie sea para espectadores de 0 a 99 años.

No me ha decepcionado porque sencillamente no esperaba nada. Creo que con el tiempo Marvel irá perdiendo calidad, y no es que andase sobrada, e identidad dentro Disney y terminará por hacerse una serie con Mickey y los Vengadores en la nueva casa de Vampirina.

Seamos serios, ni crítica social ni distopía ni nada de nada. Un tostón sin sentido aburrida desde el minuto 3. Es imposible visionar semejante bodrio con más fantasía que Narnia.

El que diga que en esta película hay un mensaje con trasfondo social o político tiene que ir al médico a que se lo miren. Encumbrar la basura a las más altas cimas solo por ser diferente no cambia lo que realmente es: Basura.

Una cosa es el cine independiente y otra esta porquería, cualquier película de serie Z la supera con creces.