Estamos ante una película graciosa, entretenida, pero que, a día de hoy, no sería bien recibida ante la sociedad debido a sus comentarios machistas, racistas y tránsfobos a la vez que una trama centrada en la sexualización de la protagonista femenina y cómo los hombres de la película pelean por ella como si un trofeo fuera.

Por otro lado, también hemos de comentar que no es el único foco, sino que también nos muestra las diferencias culturales de aquella época, en los años 80, donde la falta de desarrollo tecnológico no te permitía conocer otros países a menos que viajaras exclusivamente a esa localización, algo que, los jóvenes de los 2000 nunca podremos, por suerte o por desgracia, disfrutar.

Al fin y al cabo, me parece una película para pasar el rato, que te sacará unas risas y te dará una perspectiva a la que tenemos de la culturización actualmente.

Como estudiante de psicología, esta película me llamó la atención con el nombre en cabecera de Freud, asumiendo que íbamos a embarcarnos en un viaje de sueños, psicoanálisis y mentes perversas, pero que, sin embargo, una ola nos arrastra nada más desembarcar.

Freud aporta más que un par de consejos, siendo muchísimo más interesante nuestro amigo Otto que, por lo que sea, el protagonista le tiene miedo a abrir su corazón como si de su padre fuera y se avergonzase, algo que no entiendo.

Se queda finalmente como un entretenimiento adolescente interesante para pasar el rato y reflexionar lo más mínimo a pesar de que el protagonista podría ser perfectamente yo.

Un saludo.

Nunca he visto la serie de Hannah Montana, eso quiero dejarlo claro. Ahora, empecemos con la reseña:

Esta película me parece la típica que ve mi madre los sábados después de comer y con la que se queda durmiendo en el sofá a los 5 minutos de lo aburrida y predecible que es lo que está viendo a diferencia de que en esta la protagonista es Miley Cyrus.

Encontramos muchísima falta de continuidad, coherencia, explicaciones y sentido en todo lo que dura, aunque, sinceramente, tiene un punto de profundidad y humanidad muy interesante:

Me gusta bastante cómo el alter ego de Miley, Hannah, es todo lo contrario a ella: triunfa con su mera presencia (mientras que ella, aunque hagas las cosas bien, pasa desapercibida y, cuando realmente actúa como una persona "normal", egoísta, con falta de humanidad... mientras que cuando es ella misma es capaz de ser consciente de sus actos y corregirlos, es decir, recupera su humanidad. La película también nos enseña esto de forma visual cuando, en mi opinión, Oswald Granger habla con su jefa y él se encuentra en un pantano lleno de barro y ella dentro de una bañera, de igual manera, cubierta de barro. Es un claro ejemplo de cómo dos posiciones iguales, por así decirlo, son completamente distintas que, al fin y al cabo, no va tanto en relación con la protagonista, sino con la evolución de este personaje, pero se me hizo curioso al igual que la escena de las pelucas en la cena de langosta... siento que hay guiños de profundidad, pero que al ser una película enfocada en niñas pues el valor se prefiere diluir a enrevesar.

Vaya chapa he dado para hablar de una película que me ha parecido muy mala, pero que realmente supongo que si os gusta Hannah Montana o veíais la serie de pequeñas o pequeños, pues te gustará, por eso aquí mi opinión está muy pasada

Que una película te deje loco y consiga agradarte es algo que no todas pueden hacer y eso es un mérito.
Me gustaría agregarle más nota y acompañar a la crítica común, pero no puedo, lo siento. No entiendo por qué no, porque la fotografía me encanta (me parece sublime, sin comparación alguna), las actuaciones saben transmitir mucho, pero creo que realmente se me queda vacía el alma al terminarla. ¿Qué ocurre realmente? ¿Quiénes son ellas dos? ¿Es una realidad o va más allá de lo humano? Necesito muchas respuestas que ni sé darme y creo que nunca sabré. Si eres experto, ayúdame de forma humilde

Esperaba bastante de esta película de humor de negros con humor negro y, sinceramente, empieza muy muy fuerte, pero se derrite fácilmente centrándose en chistes sobre la obesidad sin cesar y un pésimo interés por mi parte del observador para quedarse 104 minutos. Se hace muy pesada y avanza lentamente, sintiendo que has estado 3 años encerrado en una prisión de máxima seguridad.

Si la ves, no olvides el idioma original (inglés) porque el doblaje y traducción son mejorables