Dune, sinceramente, me parece un peliculón. Empecemos por el principio, he de reconocer que soy un nazi para las adaptaciones de libros que me gustan a la pantalla, si no son fieles salgo enfadado, y Dune lo es en todo lo que importa. Hay algún cambio o cosa menor que modificaría? Sí, pero la realidad es que son cosas muy menores que no cambian el hecho de que la experiencia de Dune realmente es la de la primera mitad de la novela (para los que no lo sepan, tened en cuenta que esta película solo llega a la mitad del primer libro, el corte final por tanto es un tanto... abrupto). Visualmente me parece un portento, en la estética, en el encuadre, etc. Si bien habrá gente que se le haga lenta con las tomas amplias y demás, a mi para nada, porque me mete muchísimo en cómo es Arrakis y el resto de lugares, y es muy como recuerdo Dune (que es cierto que me leí hace muchísimos años). Las interpretaciones en general muy bien (quizás Paul es un poco más flojo, pero nada ni de lejos malo), el vestuario, la música, etc. todo a un altísimo nivel. Y, al menos en inglés (nosotros la vimos en VOSE) las voces les encajan muchísimo a los personajes.

A falta de que salgan las demás, si finalmente salen, es probable que esta primera vaya a ser mi favorita de la saga, por el simple hecho de que Dune para mi gusto empieza en el mejor momento y con la mejor trama y luego va perdiendo fuelle. Pero el modo en que esta película captura el ambiente, el misticismo de las Bene Gesserit, las conspiraciones de la nobleza, el funcionamiento de los escudos, la potencia de los láseres, la brutalidad del desierto, el poder de los gusanos... realmente, te hace sentir como el libro.

Y vale la pena, creo, verla en el cine.

Lucy pretende ser una película de ciencia ficción profunda, y tiene algunas ideas que le permitirían llegar a serlo... si no fracasase en la parte de argumento de entretenimiento. Porque con una protagonista como Lucy y sus poderes, realmente no tiene sentido un argumento con villano y esas cosas porque no juegan en el mismo nivel ni de lejos; este y otros errores de guión (unos graves, otros no tanto) que la alejan de la película de ciencia-ficción que podría haber sido y la convierten en una película de super-héroes que no funciona realmente son las que hacen que, en realidad, se quede a medio camino de ningún sitio: sin la profundidad bien desarrollada que haga a uno pensar, sin la ligereza y acción con villanos y poderes de una peli de acción. A ratos consigue entretener, es espectacular la mayor parte del tiempo (aunque muchas de estas escenas dan la sensación de estar metidas sólo porque había que hacer algo espectacular en ese trozo), pero aún así suspende por poco.

The Crown es la serie que narra como la reina Isabel de Inglaterra llega a su puesto y cómo es reinar a partir de entonces durante la época de mediados del siglo XX. En línea con el cine más intimista, es una serie lenta, muy pausada, sin grandes momentos de tensión o de drama, que se toma su tiempo para ir desarrollando el ambiente y los personajes con cuidado. Los actores cumplen muy bien, el guión está bien llevado en su estilo, la fotografía, ropajes y dirección están muy bien y las localizaciones igual. El resultado con ello es una serie que es como una biografía, lenta y bien llevada, que vale la pena.

Todo esto hace que The Crown, aunque no sea una serie que probablemente enganche a nadie durante horas y horas sin poder despegar los ojos de la pantalla, si es una serie que vale la pena ver y digerir con la tranquilidad que ella misma tiene. De ese modo pausado, da tiempo a reflexionar sobre algo tan importante como es el cambio social en el mundo en el que vivimos.

Para el comentario en sus aspectos más sociológicos: http://tribulaciones.es/critica-de-serie-the-crown/

La puesta en escena de The Man in the High Castle, la estética, las interpretaciones, la música, todo eso está muy bien, es innegable. Sin embargo, le falla de lejos lo más importante: el corazón. Como suele ocurrir casi todas las veces que se adapta una obra de K. Dick a la pantalla, por cómo son y cómo las construye, los guionistas y demás se sienten impulsados a realizar una enorme cantidad de cambios en las mismas, hasta dejarlas básicamente irreconocibles. Y en buena medida eso es lo que pasa aquí. Lo malo es que, cuando pretendes corregir y cambiar buena parte de una de las obras cumbres de uno de los mejores escritores de ciencia-ficción de la historia, el resultado es inevitablemente peor que el original en todos los sentidos y momentos. Y este caso no es una excepción.

Jessica Jones vista y Netflix ha hecho otra gran serie con ella. Dura, bastante más que Daredevil y eso que la otra no es precisamente suave, con grandes personajes y momentos. No es una historia para todos los estómagos pero, sin duda, es una historia excelente, muy bien llevada e interpretada.