No me gustó. Es un triller común y corriente contado a la manera de un rompecabezas: coges uno, lo armas, luego lo deshaces y vuelves a armar otro con las mismas piezas pero en distinto orden. En cualquier orden. Ésta sí que me parece una peli pretenciosa. Lo único que tiene de original es la sintaxis, porque la semántica es tópica. Decepcionante.

Como veis, los valores ancestrales de la época de Ricardo Corazón de León (que era gay, dicen, con lo cual yo creo que un hooligan le hubiera partido un ladrillo en la cabeza) siguen vigentes en la Inglaterra neo-medieval de las hinchadas de fútbol. Y se supone que debemos llorar por ellos, gente con honor y de valores muy viriles que dan su vida para defender al hermanito. No sé muy bien qué pensar respecto de esta película. Pero tengo dos hipótesis:
1) Si el director (y roguemos que sea así) pretendía mostrar la ideología de un colectivo desde el punto de vista de éste, no consigue ser imparcial.
2) Si pretende hallar algún rasgo de humanidad en esta gente cabezadeladrillo, o es un fascista o es un ex-hooligan un poco más leído e iniciado (y mal) en el cine de palomitas.
En cualquier caso, creo que NO lo consigue ni de una manera ni de otra. Seguro que es géminis. ¿Lo mejor de la película? La espalda del cabecilla y su aire a Steve McQueen.

Me encantó esta peli, lo bueno que tiene es que el final no pude predecirse. Sorprende.

Los equis no somos tan tontos y tan banales. Una visión pija e insulsa del movimiento X, si es que lo fue(?). Lo único bueno, Evan Dando en una escenita que le dan cuando están en el club. Guapísmo.

Un buen entretenimiento para los que creen en los biopics almibarados yanquis con tías que lloran a sus sobrinitos famosos.