Poco convincente experimento de crear una especie de intriga con una galería de jóvenes con problemas personales, algunos de ellos demasiado escabrosos, como únicas pistas para intentar averiguar el desenlace.
En el prólogo se nos sugiere que alguien se ha suicidado (el título de la película ya lo desvela) en un cuarto trastero de un instituto.
A partir de aquí el único propósito de la película es incidir y resaltar cada uno de los puntos débiles de una serie de jóvenes que van al mismo instituto, mostrar y exagerar cada miedo, cada secreto y deseo inconfesable, y todo para que intentemos averiguar quien es de todos esos "desgraciados" el que acaba tomando tan terrible decisión.
Le falta la naturalidad y credibilidad de la espléndida "elephant", ésta va directa a crear morbo de una manera demasiado forzada, se olvida de darle un margen para "respirar", para que sean más creíbles los personajes y no parezcan caricaturas enfermas que no tienen remedio.

Terrorífico relato que explora los instintos más primitivos y básicos del ser humano mostrando los diferentes comportamientos y reacciones de unas personas frente a una situación límite provocada por una amenaza desconocida y letal que les obliga a refugiarse en un pequeño supermercado de una pequeña localidad costera. Constante e incierta la presencia invisible(está dentro de una espesa niebla que no deja ver nada), a sabiendas de que existe porque alguien ha visto "algo" con ansias de destrucción y muerte. Narrado con acertado pulso tanto en los momentos de incertidumbre y suspense como en los de tensión y acción, con unos personajes creíbles aunque algunos pequen en exceso de histrionismo y falta de naturalidad.
Aunque inferior a las tres últimas películas de este director nos encontramos ante una agradable sorpresa dentro de un género en el que se abusa del efectismo barato y en el que se olvida que el suspense es lo más importante.

Videoclip sin pies ni cabeza con unas marionetas de cartón-piedra como supuestos personajes que pululan sin rumbo fijo en medio de un desaguisado considerablemente absurdo y demencial.
No me extraña que no se estrenara en cines ya que ALGO así es para prohibirse en lugares públicos, donde gente mal informada pueda gastarse un dinero en semejante engaño.
La historia llamaba considerablemente la curiosidad al tratarse de una fantasía de bajo presupuesto, esperando encontrarse uno con buenas ideas de un equipo de talentosos cineastas intentando demostrar su ingenio desaprovechado.
No hay nada, todo es un vacío, inoperancia, las escenas van trascurriendo una tras otra sin formar ni un ápice de una historia que por pobre que sea se pueda seguir con un mínimo de dignidad, no es mucho pedir.

Si lo que quería era impresionar decepciona, si lo que quería era entretener lo consigue en cierta manera,si lo que quería era contar una historia naufraga con todo el equipo ya que lo mejor que genera es desconcierto con una narración absurda, torpe, vulgar y ridícula. Patético todo lo que ocurre, si alguien se lo cree se conforma con poco ya que lo único que busca es conmover y sorprender a toda costa, con lo que sea, en este caso metido con un calzador. Lo mejor es la actuación del protagonista que genera cierto interés en este juego malévolo y que parece sacado de un video-juego. Aunque no negaré que se deja ver gracias al ritmo que imprime y a la acertada ambientación. Sólo para adictos a emociones fuertes pero sosas.

Alguien confunde hacer reir con hacer sentir vergüenza ajena, esta por todo el equipo encargado de hacer la película y el que la distribuye, y también sus vecinos y amigos y los que pasen por el lado. Dedíquense a otra labor, cualquiera que sea, siempre será menos vergonzante que hacer este bodrio de proporciones bïblicas.
Mi calificación: -1.000.000.000.000