Mi película favorita es Alien, eso para empezar. Y segundo, ya sabía que Prometheus no iba a ser nada prometedora.
Sobran personajes, la mayoría sin interés y con ese gracejo norteamericano que te saca de quicio y que a los 15 minutos de la película tienes ganas de que surja "algo" que se los cargue a casi todos. Durante toda la película tienes la sensación de no saber exactamente qué cojones es lo que pretende cada uno ni sus reacciones (algunas veces totalmente ilógicas para un equipo de élite enviado a los confines del universo), qué ocultan cada uno y porqué. Los misterios personales de algunos acaban siendo revelados de una forma forzadísima y quedando en agua de borrajas.
El mejor, el androide retratado por Michael Fassbender, que junto con Noomi Rapace salvan más o menos la película. Charlize Theron, aunque con un personaje de gran presencia, es completamente prescindible.
Demasiados los contínuos auto-homenajes, guiños y referencias a la película original, en los que los fans de "Alien" nos pasamos toda la película pensando, "¡anda, mira, una escena con lanzallamas, como en la primera peli!" en lugar de estar atentos a la trama.
Alguno ha calificado esta peli como un cruce entre "Alien", "Starship Troopers" e "Independence Day". Totalmente de acuerdo.
Y con todo lo malo, creo que para un fan de Alien como yo, uno acaba disfrutando de ese forzadísimo intento de conectar con la primera película, sea como sea, aunque no hayamos entendido nada y estemos pensando "umm, en casa me pongo a resolver la trama porque ahora, con tanta explosión y tanto FX no me entero de nada".

Deja los prejuicios y los convencionalismos aparte. Uzumaki es rara, rarísima, sí. Pero no deja indiferente. Una mezcla de terror, humor, ñoñería japonesa en una película delirante con una edición/montaje muy particular. ¿Puede alguien imaginarse que un concepto tan abstracto como una espiral pueda dar para tanto?
Lamentablemente no es una adaptación completa del manga original, pero si bastante digna pues conserva ese desasosiego próximo al delirio de aquél.
Por cierto, los subtítulos al inglés desde el japonés no son demasiado precisos y se pierden más detalles de los que sería deseable.

La verdad es que me cuesta creer que haya tantas críticas que ensalcen esta peliculilla a la categoría de "obra maestra" supuestamente porque anima al espectador a reflexionar sobre su "contenido político". Por favor, para exponer valores como la libertad, la justicia, la democracia etc... no hace falta ponerse tan pedantes, son valores bastante obvios y más aún en la situación que se describe en la película: un país dominado por un régimen fascista, parecido a cualquier dictadura conocida en nuestra historia. Para discurrir sobre política no va uno a ver una película de los Wachowsky sino a leer periódicos o libros sobre política, que dan mucha más pereza y necesitan de cierta cantidad superior de neuronas que para una película de acción.

¿Pueden los gays reirse de ellos mismos y los heteros CON ellos?
Las malas críticas de esta película que aquí he visto y el debate sobre "gay o no gay" en lugar de comentar si la película es buena o no (igual que la presente crítica), es la prueba de que NO.
Una película guarrindonga, zafia y absolutamente irreverente al más puro estilo teen-sex-comedy de "American Pie", o yéndonos muchos años atras, "Porky's", pero esta vez jugando con todos los topicazos gays y a lo bestia además.
La diferencia es que, mientras esos mismos tópicos gays ya han aparecido en numerosas comedias "no gays" y la gente los toma con mucho humor, parece que se nos arruga el esfínter cuando "lo gay" ocupa toda la película, tanto a heteros incapaces de reírse CON los gays como a los gays incapaces de reírse DE ellos mismos.
La película merece un aprobado ya sólo por el coraje de no cortarse ni un pelo con los chistes. Tampoco se queda corta al mostrar escenas bastante explícitas, aunque que no se me escandalicen los más estrechos, no más que en cualquiera de las comedias del mismo estilo.

¡Bravo por la gente sin complejos!

Ya sabía, por los trailers, que era una película dramática y que su estética tenía mucho de onírico. Pero, sinceramente, no sé que es exactamente lo que he visto ni cuál es el mensaje que debería haberme transmitido: ¿Qué efectivamente hay vida después de la muerte y luego nos vamos al cielo y es chipendi-lerendi? ¿Que los muertos nos dan el chivatazo en forma de corazonada y hay que fiarse de ellas, por muy irracionales que sean? ¿Que hay que ver lo bonita que es la vida y hay que aprovecharla, en plan "American Beauty"?
...o quizá simplemente habría que acomodarse en la butaca y deleitarnos con los bellos paisajes divinos generados por ordenador, la música chill-trance de la banda sonora, y "deleitarnos" con los momentos sentimentales de la película. Pero 2 horas y cuarto de lo mismo, cansa. Sólo hay ciertos momentos de suspense que me salvaron de sucumbir al sueño (muy dulce, eso sí, acompañado por toda esta imaginería).
En fin, un rollo.