Y eso es lo peor que se puede decir de una película: aburrida, falta de pulso y de interés. Más de hora y media perdida para aguantar el lloriqueo de unos protagonistas desgraciados, tal vez trasunto de las frutraciones del director y guionista, con el agravante de que no consiguen en ningún momento interesar lo más mínimo. Si el protagonista tomara la decisión de suicidarse, nos evitaría el aburrimiento de aguantar sus patéticas reflexiones que tienen tanto de rimbombantes como de fatas de contenidos.
En resumen, un latazo sólo apto para incondicionales de Almodóvar, de Banderas, de Penélope Cruz, del cine intelectualoide, de las subvenciones y de quienes confunden la profundidad psicológica con el lloriqueo.

Una de tantas películas bobas con las que las múltiples cadenas de televisión llenan su tiempo y que me he visto obligado a soportar (al menos parcialmente) por culpa de la compañía. Sólo apta para niñas o quiene tengan una mentalidad similar (y ni aún así).
No merece la pena perder el tiempo; mejor dormitar en el sofa o mirar el techo.

Entonces ¿qué es esto? Pues, en realidad nada, un intento fallido de mezclar géneros, desperdiciando buenos actores en un argumento sin fundamento, sin interés, maniqueo y tontorrón como la mayor parte de los que se hacen últimamente en torno a la segunda guerra mundial.
La película intenta copiar y recrear grandes películas clásicas y falla estrepitosamente. La abundancia de medios, incluidos los digitales, no suplen la falta de ideas ni de talento. Comparada con "Casablanca" (ambientada en la misma época y en la misma región geográfica), ésta es directamente un bodrio. Si la comparamos con otras obras menores o más recientes, "Aliados" ni siquiera sirve para echar una siesta un domingo por la tarde. Mejor buscar algo que sea cine de verdad (y cuyos personajes e historia resulten mínimamente creíbles).

Una seríe basura, una serie del montón, un despilifarro de dinero, una sarta de tópicos mezclados sin ton ni son. Desde la "paridad" de personajes masculinos y femeninos, vengan o no a cuento, hasta lo niños sabihondos, pasando por el buenismo de todos (que parecen sacados de la más ñoña de las series infantiles) y sobre todo, las subtramas tontorronas del argumento, inventadas sobre la marcha sólo para alargar la duración de la serie y meter cualquier asunto de moda (inmigración, drogas, delincuencia juvenil, problemas con menores de edad...). Eso sí, desde esa pespectiva absolutamente imbécil que los analfabetos llaman "lo políticamente correcto".
Esto es un pastiche, un batiburrillo de idioteces. Ni drama, ni serie policíaca, ni intriga, ni nada de nada. ¡Qué lástima de actores desperdiciados como José Coronado! (vean por ejemplo "La Caja 507", una verdadera película policíaca donde borda su papel). Ésta es una de tantas series con las que la televisión idiotiza a quienes pierden el tiempo dormitando frente a ella.

Una película lamentable, innecesaria, con un argumento absurdo y tontorrón que apenas se sostiene gracias al esfuerzo de los actores... y Robert Redford queda lejos de "Dos hombres y un destino"...
(sigue en "spoiler)