Haz click aquí para copiar la URL
Estados Unidos Estados Unidos · Bon Temps (Louisiana)
Críticas de RandolphCarter
<< 1 9 10 11 20 45 >>
Críticas 225
Críticas ordenadas por utilidad
10
5 de enero de 2010
34 de 39 usuarios han encontrado esta crítica útil
Lo digo bien claro: esta es mi película favorita de terror de todos los tiempos. ¿Por qué?
Ninguna otra me ha dado tal grado de acojone en la vida; desde que la vi siendo renacuajo, no he vuelto a mirar al mar de la misma manera. Esto en cuanto al efecto subjetivo que causó en mí, pero no es el único valor que le otorgo, pues considero este film como una obra maestra de la intriga y el terror por sus virtudes inherentes. Debo haberla visionado más de 30 veces y sigo sin encontrarle defecto alguno, al contrario, le soy más devoto por su inteligentísima puesta en escena, perfección expositiva y encomiable desarrollo dramático.

Sobra decir de que va "Tiburón", a todo el que le guste el séptimo arte debería conocerla, pues es una clase magistral. Una lección de cómo dosificar y deshilvanar una intriga, cómo dominar el ritmo y tempo de un metraje, y cómo unir el cine de calidad con el cine popular sin perjuicio de ninguna de las partes. Lo que sí cabe resaltar es que la cinta tiene dos episodios bien diferenciados en forma y contenido; en el primero, en el que no vemos claramente al culpable, domina el suspense con los múltiples ataques a la población costera de Amity, doblemente castigada por el escualo y la ineptitud de un alcalde avaricioso; y en el segundo, el terror y la aventura con la caza del susodicho animal ya revelado, gentileza de los excelentes Scheider, Dreyfuss y sobretodo un inmenso Robert Shaw, que se casca uno de los monólogos más antológicos que se hayan dado en alta mar. Ambos casan indefectiblemente, resultando en la rara conjugación del éxito de público (nace el blockbuster) y crítica.

Como hemos señalado, no tan solo fueron sus acertadas decisiones narrativas, sino que también, entre otras cosas, brilla un trío de ases actorales que le dan la necesaria enjundia dramática al asunto, puesto que aquí sí nos importa qué ocurrirá a los protagonistas a diferencia de la gran mayoría de films del género. Destacar también una banda sonora inolvidable del casi siempre magnífico John Williams, el montaje de Verna Fields, ambos ganadores del oscar en 1975, y como no, la dirección magistral de un Spielberg en estado de gracia.

Así que si no la habéis visto, ya tardáis, y en caso contrario, únicamente cabe decir que los clásicos lo son porque permanecen imperecederos al paso del tiempo y uno siempre puede volver a disfrutar de ellos con la garantía de que el viaje vale la pena. ¿Apetece un bañito?
RandolphCarter
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
8
3 de septiembre de 2010
33 de 37 usuarios han encontrado esta crítica útil
Decía Abraham Maslow en “Una teoría sobre la motivación humana” (1943), que tenemos por orden de prioridad cinco tipos de necesidades: básicas (comer, respirar), de seguridad (física y psicológica), de afecto (pertenecer a un grupo), de estima (respeto propio y reconocido por los demás) y de autorrealización (llegar a la cima de las propias expectativas).

Imagínate que comienzas tu andadura con unas bambas podridas en las que escondes un triste billete como única propiedad y encajando palizas de cualquiera por el hecho de parecer el más débil del presidio. Te llamas Malik El Djebena, tienes 19 tacos, has pasado tu infancia saltando de un centro de menores a otro, acabas de ingresar por 6 años en prisión, no sabes leer ni escribir, y un grupo de corsos, los más chungos del lugar, te dices que te cargues a alguien o tú ocuparás su lugar. ¿Pinta mal, eh? Puedes hacer dos cosas. Una es dejarte matar, rendirte a la evidencia de que no eres nada para nadie, sólo un marroquí analfabeto más, o puedes luchar. Puedes pelear por sobrevivir, por escalar poco a poco, hacer caso a lo que te manden agachando la cabeza ante cada golpe que recibes, pero con la vista fijada en el futuro, en el plan. El plan.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
RandolphCarter
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
8
17 de mayo de 2010
33 de 38 usuarios han encontrado esta crítica útil
Echando la vista atrás, si nos ponemos a revisitar el cine de acción que mamamos en los ochenta, uno no puede evitar la nostalgia por una forma de realizar celuloide que parece casi extinta. Con cojones.

Una historia dura, nada complaciente, cruel y emocionante, enmarcada en un futuro devastador de lucha por el escaso recurso que separa la vida de la muerte: la gasolina. Ahí está Max, antaño responsable policía y padre de familia reconvertido en guerrero de la carretera tras perderlo todo. Ya conocemos su historia y no se reitera en ella, así que Miller nos embarca en una secuela diferente, que se puede disfrutar independientemente de su precedente, en la que el caos reina y ya no queda residuo alguno de civilización u orden.

La batalla entre los supervivientes que poseen la gasofa contra los punkarros expoliadores, capitaneados por el inmenso y desfigurado Humungus, uno de mis malvados preferidos sobre todo cuando coge el micro, se decide a través de las acciones del loco Max en una pugna constante que desemboca en un tramo final de persecución por el desierto antológico. Estéticamente influyó más que su primera parte en casi todo el cine postapocalíptico de serie B desde entonces para adelante, dando lugar a múltiples explotaitions e imitaciones siempre con menor fortuna.

La cuestión es que uno se vuelve a mirar este pedazo de secuela, mi preferida de la trilogía, y se da cuenta de que se conserva magníficamente bien. Esto es debido a la efectiva y artesanal dirección de George Miller, que a base de realismo y especialistas jugándose la vida en las secuencias de acción nos ofreció una de las sagas más míticas, trepidantes y acojonantemente devastadoras de los ochenta.

Como bien apunta LordLeal en su crítica de Mad Max 3, que es la que me ha inspirado, deberían aprender tanto directorcillo de acción actual que a base de saturarnos con efectos digitales parece que hagan dibujos animados ¡Que vuelvan los cojones al cine de acción, ya!
RandolphCarter
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
10
8 de febrero de 2010
32 de 36 usuarios han encontrado esta crítica útil
La intención de Kubrik al realizar “2001”, fue la de asemejarse a los Beatles. Esto es, una expresión artística igualmente disfrutable para un catedrático como para un camionero, puesto que apelaba a la experiencia sensorial y no al intelecto que, sin desdeñarlo, quedaba en segundo plano.

Dicha intención se cristalizó en la obra monumental de la ciencia ficción de los 60, que fue este film extraño, psicodélico, bizarro y genial que casi nadie logra entender, dando múltiples interpretaciones a las imágenes. El monolito es Dios, son los marcianos, bla bla bla. Si bien es la adaptación del relato “El Centinela” del imprescindible Arthur C. Clarke, tras el film él mismo novelizó la obra, dando explicación a todo lo visto.

En un esqueleto básico, digamos que hemos sido vigilados por civilizaciones notablemente superiores, que han dejado varios dispositivos -los monolitos- distribuidos y ocultos de manera que solo se puede llegar a ellos una vez desarrollado cierto nivel de tecnología, es decir, cierto nivel de evolución (en el libro, enterrados en la luna, y más tarde se hayan también en Júpiter con la misión de HAL 9000). Al alcanzarlos, como si el poder hacerlo fuera el indicador de que ya estamos preparados para el siguiente salto evolutivo, se activan como alarmas precipitando protocolos o puertas interdimensionales, que derivarán en la ¿ayuda? final al humano que llega a ellas, transmutándole en una suerte de ideal de superhombre nietzcheano, más allá del espacio y el tiempo, más allá del bien y el mal.

No se emplea el “Así habló Zaratustra” porque sí, Kubrik no filmaba nada porque sí, tal era su grado de perfeccionismo en el detalle: nunca verás un fragmento al azar en ninguno de sus films ¿Un ejemplo? Las medidas del monolito son en proporción 1, 4, 9, es decir: 1, 2 y 3, los primeros tres números al cuadrado; estas medidas aparecen reproducidas milimétricamente y el centro de dichas figuras geométricas coincide exactamente con el centro del encuadre del plano, sin un ápice de error ¿Acojona lo suyo, eh?

Es “2001” una obra de arte sublime y subliminar, y como tal, no apta para todos los paladares, sobretodo hoy día, ya que se la puede tildar de lenta e inexplicable; aunque yo creo que todo depende de tu atención y que te importe lo que estés viendo. Estamos demasiado acostumbrados a un cine que no exige esfuerzo ni participación alguna del espectador. Yo creo que no debemos conformarnos con ser meros recipientes vacuos, sino receptores proactivos y analíticos con lo que nos ofrecen; si no, estamos abocados a la apatía y la pasividad gregaria.

(Acaba en Spoiler)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
RandolphCarter
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
9
24 de diciembre de 2010
30 de 32 usuarios han encontrado esta crítica útil
Vuelve a la carga HBO con otra de sus cuidadas y lujosas apuestas: “Boardwalk Empire”. Ambientada en los turbulentos años 20 en Atlantic City, comienza el mismo día en que se dio el escopetazo de salida a la famosa “ley seca”, desarrollando principalmente cuatro líneas argumentales.

Por una parte, los contubernios del protagonista “Nucky” Thompson (Steve Buscemi), el tesorero de la ciudad que manipula como demiurgo en la sombra a mafiosos, políticos, jueces y policías a merced de sus intereses en el tráfico del alcohol ilegal y las elecciones municipales. Su mano derecha Jimmy Darmody (Michael Pitt) es un ambicioso e insatisfecho sicario cojo, recién llegado de las trincheras francesas de la 1ª Guerra Mundial, que pretende jugar con sus propias reglas; mientras que la señora Margaret Schroeder (Kelly McDonald), una irlandesa embarazada y maltratada por su marido, se verá accidentalmente envuelta en esta telaraña de corrupción. A su vez, el puritano agente del FBI Nelson Van Alden (Michael Shannon), fanático religioso, se propone desbaratar el reinado del alcohol ilegal de Mr. Thompson por todos los medios.

Desde su anuncio, hubo grandes expectativas debido a los nombres que figuran entre sus creadores: Martin Scorsese, Terence Winter, Timothy Van Patten, etc. Mucha gente lo concibió como un sustitutivo de “Los Soprano”, por lo que algunos hayan podido quedar, en cierta medida, decepcionados. A pesar de compartir con ésta temática mafiosa y equipo creativo, se trata de un tipo de enfoque muy diferente, muy clásico, bastante centrado en las altas esferas y las cuestiones políticas, pero también muy cruda, de una violencia y sexo explícitos y realistas. La trama es fascinante y se desenvuelve sin prisas pero sin pausas, gracias a la labor de sus guionistas, que manejan con incuestionable destreza los diferentes ángulos desde los que se va desgranando la historia.

Un fresco de un lugar y una época en que la impunidad y la corrupción campaban a sus anchas de una manera mucho más explícita, si cabe, de lo que lo hace hoy día. Repleta de apuntes geniales, diálogos mordaces, personajes carismáticos defendidos por unos actores acertadísimos (atención sobre todo a la inmensa lección interpretativa de Michael Shannon) y con un cuidado en la puesta en escena realmente meritorio. Quizás le falte algo más de intensidad en ciertos episodios para alcanzar la excelencia, pero aún así, se trata de una muy buena serie, con un espléndido tono de cine negro que la sitúa por encima de la mayoría de producciones actuales, tanto de la pequeña como de la gran pantalla.
RandolphCarter
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 9 10 11 20 45 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow