Denzel Washington ha echo grandes películas y normalmente escoge bastante bien sus proyectos, no es el caso de 2 guns, película fallida con un guión horroroso, sin química entre la pareja protagonista (Washington y Wahlberg) y con un final de risa. Mark Wahlberg demuestra una vez mas que es un actor insípido y sobrevalorado.
Poco mas se puede decir de esta película, si quieres ver buenas películas con parejas de policías revisa "Arma letal" o incluso "Tango y Cash" mucho mejores que este despropósito, no la salva ni el gran Denzel.

Esta película es un buen ejemplo de que un guión vulgar interpretado por grandes actores puede convertirse en una muy buena película. Negociador nos muestra la historia mil veces vista de un policía víctima de una conspiración que es capaz de cualquier cosa para demostrar su inocencia.
La película merece ser vista por Samuel L.Jackson, uno de los mejores secundarios del Hollywood de los 90 que aquí lleva todo el peso de la historia, su actuación es memorable y es muy recomendable escucharle en V.O, el tono que utiliza en muchas de sus frases es difícil conseguirlo en un doblaje.
Merece ser vista también por el genial Kevin Spacey, protagonista de grandes clásicos de los 90 como "Seven" o "American beuty", su actuación está a la altura de la de Jackson protagonizando un gran duelo interpretativo.
Finalmente merece ser vista también por un espectacular grupo de secundarios pocas veces visto en películas de este tipo, destacando entre otros David Morse, Ron Rifkin, John Spencer y un Paul Giamatti que por momentos consigue ponerse a la altura de los dos protagonistas.
En resumen merece ser vista.......y recordada.

Una rica viuda (K. Hepburn) intenta mediante sobornos practicarle una lobotomía a su sobrina (E. Taylor) a la que culpa que culpa de la muerte de su hijo el último verano, el medico que tiene que llevar a cabo la operación (M. Clift) es el único que quiere saber realmente lo que ocurrió.
Es una película basada en una obra de Tennesse Williams y como tal tenemos todos sus temas preferidos, drama familiar, almas atormentadas y una homosexualidad mal explicada. El intento de sorprender al espectador con un final un tanto extraño y morboso muy diferente a lo que estaban acostumbrados los espectadores de la época puede ser uno de los motivos del poco reconocimiento de esta película, reconocimiento que si merecen por otra parte su trio protagonista. E. Taylor y K. Hepburn están increíbles como siempre y M. Clift consigue estar a la altura de las dos divas.
Recomendable si quieres ver una película muy diferente a las que se hacían por entonces.

Teníamos ganas de volver a la tierra media, de ver a Frodo, a Gandalf, a Gollum incluso a Orcos y Elfos pero no a cualquier precio. Peter Jackson nos introduce en un nuevo viaje con un grupo de enanos que le falta el carisma que si tenían los integrantes de la comunidad del anillo, la historia es demasiado larga con algunas escenas indignas y otras alargadas sin sentido. Aunque es muy difícil rodar algo a la altura del señor de los anillos está claro que el Hobbit no merecía una trilogía, esperemos que las dos siguientes mejoren el inicio fallido.

Película de Richard Brooks que le sirvió a Burt Lancaster para ganar su único Oscar, merecía alguno más seguro.
Elmer Gantry (Burt Lancaster) es un buscavidas oportunista que después de asistir por casualidad a una reunión religiosa decide seguir a la hermana Falconer (Jean Simmons) predicando el evangelio por todo el país consiguiendo fama y dinero. Un periodista (Arthur Kennedy) y una prostituta (Shirley Jones) enamorada de el desenmascararán su turbio pasado. Burt Lancaster es el alma de esta película con una brillante actuación un poco sobreactuado en alguna escena, pero se le perdona no obstante es uno de los grandes del Hollywood dorado. Shirley Jones ganó el Oscar a la mejor actriz secundaria por una breve pero intensa actuación, Jean Simmons y Arthur Kennedy están correctos sin más. La película ambientada en los años 20 recrea con bastante fidelidad la manera en que estos falsos predicadores engañaban y estafaban a las pobres gentes incultas temerosas de dios. Ganó también el Oscar al mejor guión adaptado, aunque la duración de la película es un poco excesiva gracias a unos excelentes diálogos no consigue aburrir en ningún momento.
Otro tema a comentar es la mania que se tiene en este país de cambiar el nombre de las películas, aquí pasamos del original Elmer Gantry al pretencioso El fuego y la palabra, sin comentarios.
En resumen película diferente con un gran Lancaster que merece ser vista aunque no creas en dios.