Dejate el móvil al lado o el mando para ir avanzando, porque a pesar de que dura 83 minutos, son 83 minutos aburridos. Si lees la crítica antes de verla, prueba cualquier otra al azar; si ya la has visto, pues a aguantarse como yo.
La cosa ya pinta mal cuando a alguien se le ocurre que una autocaravana grande, se meta por un caminucho. A un continuo de sinsentidos, se le une la tontería tantas veces utilizada, de que la familia no se lleva muy bien.
No sé si trataba de ser de terror, de suspense, o una más de sobremesa; sea cual fuere, disparo fallado y de mucho.

Tres miembros, de tres generaciones distintas ,de una familia paran la autocaravana en un bosque para pasar unos días. Un desafortunado accidente hace que uno de ellos sufra una herida importante y una de las otras dos personas tiene que ir a buscar ayuda. Llega a una casa aislada, en la que parecería querer ser una casa de los horrores, en la que los habitantes de esa casa tienen algún secreto que esconder. La interacción entre las familias provoca una serie de desafortunados encuentros con consecuencias para ambas familias.

Una hora de película para la preparación de un ritual, en el cuál se atisba que los protagonistas no están bien de la azotea. Pero nada más, paranoias del santero o el trauma que sufre Sophie por la perdida de su hijo.
Luego 15 minutos en los que casi pasa algo, y el desenlace final.
Hala venga, que no se donde está la tensión durante la primera hora.
No le pongo una nota más baja porque lo que sí logra crear es un clima raro, tiene una buena ambientación.

Cuando vi que dirección,guion, fotografía, montaje era de la misma persona, pensé: “vaya currada, trabajo minucioso”, cuando acabo de verla descubro el pastel. Eso se lo das al mejor experto para que lo monte, y no sabe donde tiene que poner cada escena.

Luego estaba la otra opción, a ver si tira un poco por lo erótico y se ve algo medianamente fumable, pues tampoco. Cuando quieren meter algo de erotismo es hacia el desenlace, y a esas alturas estas hasta la seta de tanto metraje sin sentido.

Iba a decir vaya petardazo de película, pero como me gusta el arte del cine no lo termino de decir, pero es que el que ha hecho la peli, no ha tratado muy bien lo que es el cine y desde luego esto no es arte,así que tampoco me resigno a no decirlo.

Al estar basada en hechos reales he picado. Puede ser un hecho que haya dejado huella en la comunidad en la que sucedieron los hechos, y un hecho digno de leer lo que ocurrió, pero la puesta en pantalla es un tostón. Los primeros 30 tirados, no hay nada.
Durante los primeros 45 minutos, un accidente; por otro lado una pareja va a pasar un fin de semana en el campo y oyen ruidos dentro de su casa. El resto, huida-correr, y desenlace.

Luego sirva para manual de lo que no habría que hacer si alguien se cuela en tu casa (pongo ejemplos que no pasan en la película para no hacer spoilers): Si está tocando el CD, vas y lo apagas; si se está llenando la bañera vas y la cierras; ¿andar sigilosamente?, ¿para qué?; ¿susurrar?, ¿eso qué es?.

Si trabajas en la enseñanza te va a gustar, no vas a poder dejar de relacionar alguno de los personajes que aparecen, con algunos miembros de la AMYPA del colegio o centro en que estés.
Lo mismo sucederá si perteneces a alguna asociación de padres y madres, vas a ver reflejado a algún padre o madre de la película en alguna de esas reuniones que se alargan innecesariamente.

Es una comedia en la que quedan caricaturizados los integrantes de una asociación de padres y madres de una pequeña escuela polaca, pero que bien se podría trasladar a muchos AMYPAS de los colegios de nuestras ciudades.
Está la pija, que va siempre vestida que podría ir a una boda, luego los hippies (que él no para de hacer referencias a la dieta y otras excentricidades), el padre autónomo y con negocio propio, el que parece un ejecutivo de una gran empresa, el fumeta, la que parece que está en otro planeta…
Sirve igualmente de exponente al poder que estas asociaciones han llegado a tener, una cosa es preparar festivales navideños y otro es creerse con potestad para poder decidir que es lo que se tiene que hacer con un niño que parece que ha tenido actitudes disruptivas.

Igualmente deja entrever que ningún padre o madre va a reconocer públicamente de primeras que su hijo ha hecho algo mal, pero sí que le resulta fácil ver que los hijos/as de los demás hacen cosas mal y en algún caso considerar al niño un especie de pequeño diablillo.

Eric es de esas personas que no aguantan a los niños, pero la chica con que mantiene una relación tiene uno, y no tiene pinta de que sea un angelito precisamente. Ella tiene un trabajo y le resulta difícil compaginar trabajo y cuidar a su hijo en los días en los que no tiene colegio, por lo que Eric le viene muy bien para que se haga cargo de su hijo Titus.
Titus es de esos chicos que parecen querer llevar la contraria al sentimiento extendido de que todos los niños y niñas son buenos.
Eric para demostrar a Sandra que puede ser un referente para su hijo, decide ir una tarde noche al colegio para asistir a una reunión de padres y madres. Allí ve la animadversión que tienen todos contra Titus y se queda para rebatirles sus opiniones, y la decisión que están apunto de tomar.
Pero todo se complica, y la noche se hace larga, muy larga y divertida, muy divertida.

Entretiene y se pasa un buen rato.