Guardianes de la galaxia

Casi es la mejor película de Marvel hasta la fecha. Su único pecado capital es sucumbir a un clímax explosivo e impersonal marca de la casa (salvo por un par de decisiones argumentales muy acertadas). Fiel a sus raíces y a sus personajes, los cuales dotan de frescura al empaque del género. Con un ritmo trepidante y un sentido de humor ácido y muy bueno.

Nos adentramos en nuevos escenarios, al mismo tiempo que nos descubren nuevos personajes, planetas, aventuras, etc. Si lo pensamos bien, se nos plantea una película totalmente nueva, donde las aventuras ocurren en el espacio y en planetas diferentes a la Tierra. Esta es una gran ocasión de expandir el MCU más allá de nuestro planeta y descubrirnos nuevos escenarios, pero al mismo tiempo, realizar esta arriesgada apuesta puede llevar a un fracaso.
Ante esta situación arriesgada, James Gunn ha sido capaz de presentarnos una película totalmente diferente a las demás, tanto de escenarios y localizaciones, como de género de la película y personajes. En las anteriores películas del MCU, la seriedad de los personajes era una de las características principales, pero en “Guardianes de la Galaxia” es un estado pasajero en un par de personajes.
Desde la primera escena después de los créditos iniciales, podemos intuir por qué camino va a ir la película. En esta escena, vemos a Peter Quill buscando un objeto de valor inmenso. Al principio de la escena todo es oscuro, silencio y serio. Pero diez segundos después, empieza a sonar “Come and Get Your Love” y todos a bailar al ritmo de Peter Quill. A partir de aquí, la banda sonora y las fantásticas canciones te van llevando al ritmo que quiere el director.
Sin embargo, que la película se haya realizado con el humor como característica principal no significa que la película se vuelva aburrida y lo chistes no tengan gracia. Ni que en toda la película se estén haciendo chistes. Sino todo lo contrario, se sabe alternar humor/seriedad de manera excelente, sabiendo en qué momentos introducir cada uno. Y esta acertada decisión es lo que consigue que la película se distinga a las demás.
Otro aspecto característico de la película es la diversidad de colores que vamos viendo, ya que gracias a la amplia paleta de colores que utiliza, dependiendo del momento de la película, podemos ir viendo diferentes colores, los cuales están elaborados correctamente y suman calidad al apartado visual. En comparación con el resto de películas de este universo, esta es la primera que apuesta por una paleta de colores diversa, y que servirá como base para futuras películas dentro del MCU.
Por primera vez (dentro de la película) hemos podido ver en pantalla y hablando, ¡a Thanos! Nada más ni nada menos que al gran villano de MCU. Hay que afirmar que esta corta aparición demuestra el gran poder que tiene y que con solo su presencia impone mucho. Será de las pocas veces que aparezca hasta la esperadísima “Avengers: Infinity War”, pero como primer contacto, ha valido la pena.
De esta forma, “Guardianes de la Galaxia” nos presenta un nuevo escenario dentro del MCU, el cual es muy importante de cara a las futuras entregas del MCU, tanto por la amplitud del universo como por las nuevas propuestas mencionadas en líneas anteriores.

Pros de la película: James Gunn hace que un elenco muy variopinto funcione y acaba creando un conjunto que roza lo entretenido y casi lo divertido.
Contras: todo lo demás. La historia. El villano. Lo anodino de la película, para variar, hace que si bien la película funcione acabe siendo un globo que se hincha de forma desproporcionada para lo que realmente podemos ver.

Recomendada para aquellos que estén completando el universo cinematográfico (sic) Marvel.

Los guardianes de la galaxia es una entretenida película lanzada en 2014 y dirigida por James Gunn. Esta maravillosa película tiene varios protagonistas, entre ellos se encuentran Groot, Thanos,Rocket Gamora y sobre todo Peter Quill 'Starlord'.Esta película es de aventuras y ciencia ficción ya que trata de un grupo de criminales que son reunidos por las personas que tienen el poder como último recurso para protegerlos de las amenazas de la galaxia.

Esta película tiene muchas aspectos que mencionar, las cuales la diferencian del resto.
Los personajes están bien caracterizados, es decir, los actores lo hacen bien, sus personajes son bastante creíbles y algunos parecen reales. Rocket está conseguido con sus chistes graciosos sin llegar a ser infantiles, Gamora lo hace muy bien siendo una asesina bastante eficaz.Groot transmite mucha ternura e inocencia pero a la vez siendo un guerrero. Los efectos visuales, como eran de esperar,son originales y muy buenos,Rocket y Groot parecen reales.La musica son temas muy conocidos de los 70 y 80 además de ser muy buenos y capaces de gustarle a niños pequeños.Y para terminar la ambientación,el vestuario est,a bastante bien, ayudaba a los personajes a estar caracterizados correctamente,el decorado también,al ser buenos los efectos especiales hacen que parezca de verdad el lugar que están intentando representar.

En conclusión pensamos que no es una mala película sino que es bastante entretenida y es muy recomendable para todos los públicos.Lo que más la diferencia del resto es su emocionante argumento. Está asegurado disfrutar mucho viéndola en familia, ya que trata temas fácilmente entendibles para todas las edades, se puede prender de los gustos musicales del protagonista y enseña valores morales.

Y de repente, el superhéroe entendió su misión en el mundo. Sin oscuridad, sin debates filosóficos, sin cargas de profundidad con las que hacer emerger el duelo interno que subyuga su carácter... No. Por fin comprendió que eso provoca que las palomitas se enquisten en la garganta, algo imperdonable en las salas de cine de hoy en día. James Gunn había llegado para hacer saltar por los aires el universo serio y trascendente que Marvel y compañía habían colocado tras los antifaces de seres demasiado complejos para una tarde de verano. Recordó aquellas películas de aventura y ciencia ficción de los ochenta que apostaban por la ligereza como pieza angular de un entretenimiento formado por acción y chistes fáciles. Y vio que era bueno. Y presionó la tecla para poner todo en marcha. Así surgieron los Guardianes de la Galaxia, destinados a eliminar el tedio de aquellos que van al cine con pozales de palomitas.
La nueva franquicia de Marvel añade más protagonistas a su universo de filmes entrelazados, con un grupo de delincuentes que se reconvierten en defensores de la galaxia. Su líder es Peter Quill, más conocido como Star-Lord, un joven que en 1988 fue abducido tras morir su madre. Veintiséis años después, malvive como ladrón, buscando objetos de gran valor en planetas dispares. Después de ser arrestado y para lograr escapar de las manos de un villano que arremete contra toda forma de vida, se alía con un mapache experto en ingeniería armamentística, un árbol parlante -solo sabe decir una frase, pero para un árbol no está mal-, una asesina letal y un forzudo obnubilado por deseos de venganza. Su objetivo será impedir que el malvado Ronan -malvado a un nivel superlativo- emplee un orbe omnipotente para destruir media galaxia.
Dejando a un lado los achaques característicos del género -un guion simplón y con infinidad de licencias argumentales, unos personajes planos y creados en cadena y una apuesta desmesurada por los efectos especiales-, 'Guardianes de la galaxia' supone un golpe de aire fresco para el mundo de las películas de cómics que revientan las taquillas con cada nueva entrega. En este caso, la simplicidad narrativa, su humor zafio, soez y burdo, y los guiños a la década de los ochenta mientras en un 'walkman' suenan a todo trapo canciones de los setenta logran varios objetivos de una tacada: una puesta en escena sin reflexiones morales que hagan decaer el interés, unos personajes más carismáticos y un ritmo que impide que se aparte la mirada de la pantalla.
La trama salva el escollo de ser una película introductoria y de formar parte de la compleja guerra de fuerzas del universo Marvel. A pesar de que se eche en falta un relato más completo sobre el origen de cada uno de los personajes, estos presentan cierto nivel emotivo con el que enfatizar la camaradería y la transformación de criminales en héroes. Y el aspecto visual hace el resto, con tiroteos y luchas espectaculares, batallas aéreas trepidantes y duelos cara a cara impactantes.
En el reparto destaca Chris Pratt, que subraya el regusto pícaro del protagonista, aquel héroe incapaz de desterrar su carácter rebelde y sus ansias de riqueza y fama. Zoe Saldana, más serena, y Dave Bautista, más anquilosado, solo consiguen arroparlo y potenciar esos golpes de humor con los que el filme de Gunn se gana un hueco de lujo en el campo cinematográfico de los superhéroes.

Diario de Navarra / La séptima mirada