Haz click aquí para copiar la URL

Un final feliz

Drama La película gira en torno a una familia burguesa que posee una empresa en Calais, al lado de los campamentos donde viven miles de refugiados. (FILMAFFINITY)

<< 1 2 3 4 5 9 >>
Críticas 45
Críticas ordenadas por utilidad
11 de abril de 2020
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Mi tocayo Haneke sigue siendo Haneke. El mismo que hace tres años, que es el tiempo que he tardado en ver (¿tenía prevenciones? En verme Happy End. No voy a cometer spoiler y decir que es un verdadero happy end el que vemos en el último plano de la película. Aunque para gustos, las películas de Haneke. Película ésta, por otra parte, desgarradora, impenitente, reincidente y abrasadora. Frío como él solo, mi tocayo Haneke, no quiere dejar pasar la oportunidad de nuevo para despojar a unos cuantos títeres de su cerebro de trapo.

Haneke sigue siendo Haneke pero se lleva algún tironcillo de orejas por mi parte. Michael, tú ni eres Loach ni eres Von Trier. Atente a las consecuencias si me hacen bajar algún punto esas intromisiones casi ilegítimas en los senderos de tierra danesa o británica. La identidad tampoco la has perdido, por eso me sabe peor que salpimentes un plato tan deliciosamente sabroso como el que preparaste en Happy End. Ken-Lars, te llamaría si siguieras por ahí.

El final, el happy end, hemos quedado, y una niña twitera o instangramera (y cotilla) que va camino de ser influencer para suicide girls. No digo más, sino que esa niña es la que más miga tiene. La aliada perfecta para Haneke, que reverbera ecos de Benny’s Video o incluso el espíritu (pero no argumentalmente) de Funny Games. Y Trintignant y la Huppert (que ya me da miedo, ella, nuevo registro Huppert) y Kassovitz no hacen más que bailar en rondo que les marca ella. Y alguno lo aprovechará.

Y esas píldoras hanekianas, esos momentos aislados en sí mismos que te ocasionan incomodidades, morbos, mal cuerpo, hervores, entusiasmos, arrebatos y tembleques. Cámara fija, plano secuencia, la pantalla de un ordenador y cochinadas cocinadas en la mente de alguien que ha podido y sabido relatar la mente de Elfriede Jelinek.

Así que, tras años de silencio por el Oscar de Amor (repito y no me canso, Haneke tiene más de los dedos de una mano en forma de mejores películas que ella), el pulso particular de mi tocayo con el mundo (tiene mérito, él contra todo el mundo) ahí sigue: el mundo en su continua desfragmentación y Haneke… a lo suyo, cojonero como siempre y pendiente muy mucho de dejarnos a salvo con todo un Happy End.
cassavetes
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1 de marzo de 2018
3 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Haneke es de esos directores que te das cuenta que está presente en la película, eso tan difícil de explicar que puede nombrarse como su propio estilo, su particular elección a la hora de mostrar.
La crítica ataca esta película creo que sin razón, y algunos usuarios también lamentablemente caen en ese juego, que son historias inconexas, que es una película incompleta, etc. Yo no sé si no entendieron o si simplemente no les gustó, en el spoiler intentaré explicar cual es mi visión de la película.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
damiansete
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
8 de marzo de 2018
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Haneke, siempre espléndido y con una elegante puesta en escena desmenuza fríamente a una familia de la alta burguesía francesa residente en Callais.,
Fiel a sí mismo, Haneke pone en escena el horror y la crueldad pero siempre velada por la "buena educación"
Es como una segunda parte de Amour, con el resto que queda de la familia incorporando a una inquietante y helada nieta.
Muy recomendabla para aquellos a los que les interese el buen cine
Aliciux
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
5 de enero de 2019
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Pero es que no puedo evitar confesar que esta película me parece una muy mala película. Para empezar es una película lejana, parece que estemos viendo a robots en vez de a personas. No hay un ápice de sentimiento en la película. Que no tendría que ser bueno podría ser malo, pero es que no lo hay. Mezcla un montón de temas y no termina ninguno. Se emborrona el solo y nos cuenta todo como en sistema morse. Las secuencias se suceden y no tienen coherencia unas con otras. Hay secuencias que son largas y no cuentan nada, porque encima no se escuchan los diálogos de los actores. En realidad hace tal lio que no se sabe muy bien hacia dónde quiere ir. Solo me ha sacado un poco de empatía cuando he visto la dureza de un abuelo en no pensar en lo que podría provocar mentalmente a su nieta, pero es que se me ha pasado viendo que esa niña, que ya tiene trece años y sabe ciertas cosas, se pone a grabar con un móvil y ya está.

Veo un grupo de robots no veo actores, no se puede decir que estén mal, pero no me producen nada.

Es increíble, como se puede iluminar tan mal. Pretenden meterte en la película con una iluminación que no dice nada.

El director, fiel a sí mismo, hace una película, que no da ni frio ni calor. Que aburre más que otra cosa. Que hace planos infinitos e insulsos y feos. No es que no sepa narrar con la cámara, es que además es experto en sacarte de la película con planos mal hechos que no vienen al caso.

Si no quieres perder el tiempo, no la veas
Andres Camara
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
12 de agosto de 2018
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Desconozco si en el mundo del cine de autor también existen las películas de encargo, o los directores sienten la necesidad de cumplir una cuota temporal aunque realmente no tengan gran cosa que decir. En cualquiera de los casos, “Happy end” parece una película dirigida e interpretada con el piloto automático, con un Michael Haneke en horas bajas, que tiene poco que contar y al que tan solo se le atisban un par de ideas marca de la casa. Se empeña el director austríaco en narrar de forma críptica sin que ello nos lleve a nada especial. Supongo que disfruta de alguna manera torturando al espectador, que tiene que ir componiendo el rompecabezas a medida que se suceden las escenas, esperando alguna genialidad que la mayoría de las veces no acaba por concretarse. Es más, muchas de las escenas que componen esta inconexa película serían totalmente prescindibles, sin que ello pudiera afectar el global de la historia. De hecho solo hay un personaje interesante en esta historia. La pequeña Eve sobresale en medio de un grupo de personajes tediosos y hechos de retales de otros films. Los más obvios, Georges y Anne (por cierto, Isabelle Huppert no tiene a nadie que le recomiende descansar un poco?, está echando a perder su filmografía a fuerza de repetirse más que el ajo) salidos directamente de la anterior película de Haneke, “Amor”. Todo al final, para servir un cruel retrato de la decadente burguesía francesa que sabe a algo ya visto mil y una veces. Sin dejar por ello de tener razón, quizás Haneke resultaría ahora mismo mucho más radical y transgresor si apuntara su mala leche hacia el resto de clases sociales. Lo otro por obvio, empieza a resultar cansino.

Lo mejor: los (des)encuentros entre Eve y su padre.

Lo peor: la sensación de fórmula ya gastada.
AMQE
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 2 3 4 5 9 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow