La piel fría

“La piel fría” tiene todos los elementos para que una película me encandile: ambientación de época, una extraña amenaza que acecha en la noche, misterio y un aura a cuento de terror gótico que inunda todo el relato. Pero no me encandiló. Su narración basada en la reiteración de ataques de las criaturas marinas, noche tras noche, deja poco tiempo para la evolución de la historia y de los personajes. Gran maquillaje y efectos en las criaturas, una localización de isla volcánica espectacular (el rodaje se realizó en la isla de Lanzarote) y unas buenas escenas de acción que quedan lastradas por su ritmo pausado y excesiva repetición. Se echan en falta algunos momentos de mayor épica y profundidad que hubieran hecho despegar al film. Le tenía muchas ganas y al final me decepcionó.

Más críticas de cine y series (y algún que otro monigote): https://unhombresinpiedad.com

Angustiosa, densa,. extraña, atrevida, reiterativa, correcta, acertada y diferente adaptación que presenta una correcta ambientación en una historia que se prolonga en exceso.
No me ha convencido por completo.
No esperaba mucho, pero es que me ha cansado.
Me deja frío.

La película es una caída en picado. Empieza bien, para luego convertirse en un dios-sabe-qué innecesariamente largo. Resulta perversa, repetitiva, y tan falta de sentido o mensaje como sus personajes. Una versión moral y argumentalmente bizarra de "Avatar", que si algo consigue despertar por momentos es una sincera y profunda repugnancia.

Realmente, no he comprendido la película.
No he leído la novela, que puede ser, sea algo mas clara.
Pero la verdad que la película, no me dice nada.
Es como que no termina de arrancar. Estas toda la película, visualizando unos hechos y esperando que pase algo que aclare todo y de repente, acaba la película. Y te quedas, como.... ¿Ya?

Escabrosa y manida fábula basada en una novela original de Sánchez Piñol, lo que ya de por sí es un poderoso repelente. Este escritor, hábil criatura de editorial y del régimen separato-etnicista catalán plagia por toda la cara (dura) a Lovecraft y coge prestado referentes de época populares o que le puedan granjear cierto reconocimiento por parte del público y crítica.
Así pues la primera Guerra mundial (que casualidad), un activista del IRA (como no) hombres lobos para el hombre y una esclava sexual pez que pasa de manos. Con estos mimbres Gens no hace nada más que poner a relucir el generoso presupuesto que le ha brindado la coproducción europea y los bellos parajes donde ha rodado. Nada más.
Tampoco ha sido capaz de hacer nada bueno en toda su carrera. Como para pedírselo ahora.
No duda ni un minuto en robar material de otras películas de un género ya bastante mediocre. Y aún tendríamos otra repugnancia lubrica con la oscarizada forma del agua.
Encima es aburrida. No sólo se pierde el tiempo al verla, sino algo más...