The Killing Room

Buscando pelis sobre "personas encerradas" me encontré con The Killing Room y me decidí a darle una oportunidad. Mis espectativas eran bajas, ya que no tiene un gran reparto, la sinopsis parece muy simple y la nota media de Filmaffinity era de 5,3.

Para empezar he de decir que la película comienza fuerte (con lo de la chica de la habitación me quedé blanco, no me lo esperaba) y los primeros 45 minutos te hacen estar en tensión e intrigado, pero a medida que vamos llegando al desenlace va perdiendo enteros. Llegando incluso a importarme un pepino lo que les sucediese a los protagonistas y que los estímulos a los que son expuestos no me aportasen más tensión.

Y con este panorama llegamos al final, en el que nos dan la explicación al experimento; me parece original pero casi que me quedé como estaba, puesto que hacía casi media hora que había perdido el interés en saberlo.

Lo mejor: Los primeros 45 minutos

Lo peor: El desplome que sufre la película y que es un tanto predecible algunos aspectos.

Si lo que pretendemos es ver un film donde la intriga y el suspense se impongan, en verdad estaremos dando con una pérdida de tiempo en una mezcla burda de The exam y Cube.
Un desarrollo de guión pobre (unos pocos minutos buenos al comienzo de la película), que además evoluciona de mala manera para intentar sostener un ambiente de tensión flojo y predecible.
No tiene el aprobado ni de lejos, ni en su género, donde hay películas de similar desarrollo con una trama más elaborada.
Cabe destacar que las actuaciones no son malas, haciendo creíble la escena en la mayoría de los momentos.

Empieza bien, parece que va a ser interesante pero decae pronto, no logra enganchar, no se logra la atmósfera esperada, es muy previsible, no hay ningún giro, tiene ritmo pero no logra convencer. Cinta regular, con buenas interpretaciones, sobre todo la de Stormare y Hutton, pero que no llega, se queda en el camino. Para olvidar pronto.

Liebesman vuelve a dejar en evidencia su irregularidad en una película del género escape-room propia de la explosión de Saw, solo que con menos sangre y también mucho menos interés.

Caras de telefilm, fotografía a la altura y todo lo que puedas esperar de una película por la que duele pagar ver, pero que podrá interesar, al menos durante algunos minutos, a los amantes de este tipo de películas entre los que, por mucho que mis notas se empeñen en decirme lo contrario, me hallo.

En mi opinión, esta película, está claro que no aspira a ser la gran obra maestra o la película de la década. Si eres de los que les gusta adentrarse en el submundo de la conspiración, que no nos cuentan nada de lo que realmente hacen con nosotros, etc, te va a mantener pegado a la silla. Si eres todo lo contrario, te vas a aburrir a los 15 minutos. Me recuerda a otras películas como The Exam, que todo transcurre en uno o dos escenarios y pone a prueba la fuerza mental de cada uno. Me parece interesante, pero no para tirar cohetes. Quizá dentro de querer sumergirte en ese barro de gobiernos y control mental, haya cierta verdad (soy de los que cree que no sabemos nada sobre como nos controlan) y por eso me ha parecido entretenida. Pero la catalogo como una película de domingo que te ameniza estupendamente la tarde, pero que la olvidarás al día siguiente.