Casa de arena y niebla

Este dramón de tomo y lomo gana mucho en su segunda mitad. La primera me pareció estar viendo un interesante telefilme de sobremesa. Eso sí con la bellísima y estupenda actriz Jennifer Connelly.

La nebulosa es Ben Kingsley, que como siempre hace de... ¡Ben Kingsley! ¿No tiene otro registro este hombre? ¿Se puede interpretar al mismo personaje haciendo de Ghandi, judío en campo nazi, o coronel iraní? A mí siempre que sale este tipo en una peli me saca de ella, me parece una broma del estilo de dónde sale Hitchcock en sus películas.
Como curiosidad cuento algo en spoiler sobre este ¿actor?. ¡Ojo!, este spoiler no sólo no recomiendo ver a los que no han visto "Casa de arena y niebla", si no que tampoco lo miren quien no haya visto "El caso Slevin".

Bodrio con aroma telefilmero donde una furcia borracha, tras pasar olímpicamente de las facturas de la hipoteca de la casa, se la embargan. Es entonces cuando un poderoso coronel de oriente medio (Ben Kingsley) decide comprarla tras mudarse a los Estados Unidos. Por otra parte, tenemos a un policía que piensa más con la polla que con el cerebro, y que decide liarse con nuestra protagonista borracha y drogata, con lo que manda al cuerno a su esposa y a sus dos hijos pequeños, lo que finalmente le causa muchos problemas al madero.

La película es bastante aburrida y con ningún momento interesante, llega a ser incluso inverosimil.

Esa zorrilla lo que quería era vivir gratis, como muchos españolitos que no dan pie con bola.

Lo Mejor: Ver como la prota enseña sus carnes, jejeje (¡¡está muy buena coño!!!).