Creed en el hype. Creed lo que dicen. Creedme a mí. Expediente Warren logra asustar y dar miedo de principio a fin. Es la primera película de terror que realmente da miedo del bueno. Parte de la historia mil veces vista, nada original y predecible. Pero la tensión, la atmósfera, la cámara, todo es una auténtica lección. Pueden hacerse aún películas terroríficas sin que tengan que ser de los 80.
Poco se puede decir de la película, ya que repite el mismo esquema de fantasmas y familia sufrida, los especialistas que tratan de ayudar...
Pero sin destripar nada, porque tiene que ser vista sí o sí, creed lo que digo: la mejor del 2013, sino es la mejor está entre las tres mejores de terror.

Mucho se ha dicho de esta gran serie, prácticamente todo cierto. Es una serie magnética, muy bien hecha, con mayor calidad que muchas películas por momentos, con un argumentos con puntos fijos que se repiten en cada temporada (como si de una marca de la casa se tratase) que si bien hace correr el riesgo de que la serie parezca repetitiva, nunca termina de serlo gracias a los imprevistos giros que los guionistas imprimen a la taquicárdica historia.
Además de los aspectos técnicos de la serie, exquisitos y muy avanzados y aprovechados, no hay que apartar la mirada de su protagonista, su líder, el hombre que ha hecho que la serie sea lo que es y que ha perpetrado la leyenda sobre la cual ahora se sostiene esta serie: Kiefer Sutherland. O lo que es lo mismo: Jack Bauer.
La serie (sus ocho temporadas al completo) nos muestra su historia al completo. Nos habla de sus inicios, se nos muestra como padre de familia entregado (atención a los giros, no obstante) que acaba siendo condenado a dar la cara por su gobierno y país en cada amenaza que se cierne sobre todas las cabezas. Si bien es cierto que la serie es más realista en sus primeras cinco temporadas, su recta final no desmerece para nada, pues pese a que las tramas se vuelven algo más fantásticas, el tono sucio e hiperrealista jamás se despega de la historia (su realismo es una de las cosas por las cuales 24 funciona). Cada posible exageración de las historias, cada desafío improbable al que Bauer se enfrenta y que parece que sólo él puede resolver no es más que otro mensaje que la serie y su protagonista mandan a la audiencia: su héroe se ha desarrollado de tal manera que se ha acabado convirtiendo en una especie de superhéroe o justiciero, digno de la mejor novela gráfica, que lucha sin máscara contra todo tipo de amenazas y traidores dentro de su propio bando (que los hay y a granel) que amenazan con destruir sus endebles valores, debilitados por todas las tragedias que le ha tocado pasar, pero más sólidos al darse cuenta de que sgue con vida gracias a ellos.
Recuerdo una crítica que un experto hacía de la serie. Dijo que parecía una especie de Odisea, actualizada a los nuevos tiempos, con Jack Bauer como héroe trágico que se encargaba de salir de cada escollo que el destino le ponía por el medio. La serie no sólo es un entretenimiento puro y duro. No sólo es espectáculo del bueno. Contiene sus propias reflexiones y preocupaciones de relevancia para nosotros y que además se presentan en el mejor momento que nunca podrían haber escogido: hacia el final del viaje, en las últimas cuatro temporadas. ¿Cuántos golpes más podrá aguantar Jack?. ¿Hasta qué limites llegará para defender su persona y sus creencias?. ¿Se hartará y traicionará a todos, o seguirá protegiéndonos?. ¿Saldrá vivo o muerto?.
Todas esas preguntas son usadas como argumentos en las temporadas, haciéndonos ver como creíamos haberlo visto todo, y en realidad no vimos ni la mitad. Cómo creíamos que Jack sería siempre la cara fuerte e iluminada de la CTU, y lo equivocados que estábamos al ver que es un humano que sangra, sufre y llora y que es susceptible de caer a la oscuridad o a la venganza de un modo facilísimo. Cómo la bandera americana es lo primordial al inicio, y cómo resulta que en verdad es la propia vida y creencia lo que en realidad te define. Y es que 24 es una especie de crónica de la vida de un hombre, mostrada casi al completo. No sólo los cambios que sufre (le vemos evolucionar de manera espectacular), sino cómo su medio cambia. Cómo sus amigos son luego enemigos. Cómo esos enemigos pueden ser como robots, o tan humanos como él. Cómo cada traición tiene su explicación. Cómo todo aquello que dabas por salvado en realidad no lo está. Y cómo el paso del tiempo va debilitando todo.
Estoy muy interesado por la miniserie/secuela/nueva temporada que llegará en Mayo de 2014 y ver qué hacen y si de verdad es una especie de final definitivo, o si se aprovechan y hacen más al final. Pero lo primero de todo, espero que tenga la misma profundida y la misma adrenalina que la serie en su conjunto. Y espero que Bauer tenga algo interesante que hacer o que decir.

¿Hace falta decior que es mi serie preferida?.

Skyfall no sólo es una de las mejores entregas de la saga Bond (la mejor sigue siendo Casino Royale, amigos), es una de las mejores películas de acción y entretenimiento en tiempo gracias al sorprendente desarrollo y espíritu vivo de los protagonistas. Y es que esta película respeta al personaje y los gagas habituales de la saga, pero hace predominar las interpretaciones por encima de lo demás.
La película cuenta con un ritmo frenético en todo momento, desde su espectacular prólogo, pasando por su divertidísimo desarrollo y llegando a su tenso y dramático desenlace el cual (a diferencia de la mayoría, por lo visto) opino que es genial y que es el mejor final de la trilogía de Daniel Craig y el final más tenso de una entrega de Bond desde la ya clásica recta final de GoldenEye. Pero no sólo la acción, la música y la escenografía hacen esto posible. Si realmente la película tiene un excelente por mi parte y no "sólo" un notable o un muy bien es por las interpretaciones. Daniel Craig está inmenso. Él es Bond. Es un papel hecho para él, para sus rasgos, su cuerpo, su expresión, su ademán. No sé que vendrá después una vez él se despida, pero como me pasara con su Christian Bale y su Batman/Bruce Wayne, el Bond de Craig será insuperable y siempre recordado por mí al menos. Craig es quien nos conduce por la película, acompañado por la siempre excepcional Judi Dench, quien hace su mejor M aquí. Javier Bardem compone uno de los villanos más complejos y mejores de la saga. Durante la segunda mitad, roba varias escenas y sólo alguien como Craig puede estar a su altura.
Por lo demás, la película es un perfecto entretenimiento, que pone un punto y aparte en la franquicia y que resulta indispensable al desvelarnos cosas y motivos personalísimos sobre sus personajes.
Si Casino Royale es una gran película, y la mejor de Bond, y Quantum Of Solace descansaba más en la acción, pero seguía siendo un estupendo bombazo de acción (en mi opinión, admitidlo: no es tan mala), Skyfall completa el camino introductorio de Craig como Bond, formando casi una historia completa y dando un ciclo satisfactorio y completo.

¿Puede una película de superhéroes ser una gran película y cruzar límites para contar una historia compleja y adictiva, en vez de una fácil y un tanto predecible?. Esta grandiosa película nos ha demostrado que sí. No sólo es una entrega vibrante y furiosa de superhéroes. Es una película adulta que también gustará a los jóvenes, que no duda en ser violenta, dura, agresiva y oscura.

¿Puede una película de superhéroes tener su lugar en el mundo real?. Esa pregunta ya la contestaron otras adaptaciones como Batman Begins u otras de superhéroes (Spiderman 2, Iron Man...). Y es sí. De hecho, ahora está visto casi como una necesidad. Ello no conlleva violar la fantasía y el mundo propio que rodea al superhéroe. Pero nos es necesario que sea alguien tocable e identificable y que su mundo sea también parte del nuestro. Y eso El Caballero Oscuro lo lleva al extremo, sumergiéndote en la trama desde el principio.

¿Puede una película de superhéroes convertirse en una película criminal?. Sobre todo si hablamos del negro mundo de Batman, cuyos mayores enemigos siempre han estado vinculados a la mafia o al crimen desde las calles o la política en ocasiones, por supuesto que sí. Puede ser hasta un thriller por momentos, tratando de averiguar qué vendrá próximamente o tratar de anticiparte a sus giros.

¿Puede una película de superhéroes tener grandes interpretaciones?. Si la historia lo requiere y el director lo permite y lo fomenta, dalo por hecho. Todo elplantel está perfecto. No te imaginas otro Batman que no sea el excepcional Bale, otro Alfred que no sea Caine. Heath Ledger y su Joker componen el, áun imbatible, mejor personaje interpretado en la pantalla en años. Sencillamente inolvidable.

¿Puede una película de superhéroes convertirse en una de las mejores películas de todos los tiempos?. Si la película es indudablemente buena, da igual que sean vaqueros, hombres con máscaras, dramas carcelarios, mafiosos, juguetes... La audiencia manda. El hecho de que ninguna de superhéroes o de cómic lo hubiese logrado hasta la llegada del Caballero, no quiere decir quie todas las que vengan tengan que tener baja nota o no conseguirlo directamente. Si ya para todos es la mejor película de la década, para muchos más aún, la mejor de superhéroes y por regla general una de las mejores de la historia (sin bromear), es evidente que El Caballero Oscuro ha logrado su objetivo.

Si Batman Begins y La Leyenda Renace (ambas notables) siguen teniendo grandes puestos entre las mejores de su género, es El Caballero Oscuro la que sin duda constituye el punto de referencia a futuras adaptaciones y proyectos del cine. La entrega más independiente, perfecta y atractiva, pese a la oscuridad del argumento. Nunca deja de ser brillante y nunca te cansa verla una y otra vez.

Arrebatadora.