Arrebatadora. Te hechiza desde el minuto uno. Pocas películas existen como esta, tan bien contada ( no olvidemos que son tres horas de visionado), sin embargo, el tiempo transcurre de una forma rápida, armoniosa. A nivel personal, son pocas las películas que me han hecho tanto reflexionar y alcanzar ese pensamiento de paz y de entendimiento de muchas cosas. No hay nada más satisfactorio que sentir que con buena voluntad se puede lograr una convivencia pacífica y el respeto que de ahí se deriva. Extraordinaria.

Qué grandes momentos nos hace pasar la saga de Pixar ; de nuevo, Toy Story 3 no ha defraudado...Son grandes personajes que te llegan y te divierten de verdad. Sin duda, es la más adulta de toda la saga para mí. El film encierra un mensaje muy emotivo: el abandono de la infancia para dejar paso a la edad adulta. Ese final, cuando Andy se permite jugar y revivir los buenos momentos con toda la tropa de juguetes; esa despedida amarga de esa etapa de la vida donde los sueños reinan y la fantasía brilla por doquier...
Enternecedora.

Reconozco que la vi con cierto recelo porque mi favorita, no sé si es porque me recuerda a momentos de mi adolescencia, y eso le suma puntos, o porque en realidad es por la buena calidad del guion , o por las dos cosas, es la de Kevin Costner y Morgan Freeman. A pesar de partir de esta premisa me obligué a darle una oportunidad a esta película, más si la firma Ridley Scott y la protagonizan Russel Crowe y Cate Blanchet, pero no hubo manera de encandilarme. Reconozco que tiene un guion lineal, sin "estropicios" enormes o visibles pero carece de acción trepidante de esa que te hace pegarte al sillón de casa y no moverte. Es verdad que destila un aroma a las películas de antaño, de esas de Errol Flynn ( espero que puedan entender mi percepción) en la manera sencilla de cómo se cuentan las cosas..., la historia de Robin y Marian y todo el contexto político. Las interpretaciones excelentes, creo que engrandecen a la película. Y falta un ingrediente fundamental en toda producción que es una buena banda sonora.

Aunque yo me quedo con mi Robin Hood y el príncipe de los ladrones, una película casi perfecta sino poco le falta para serlo, y por supuesto, la banda sonora de Brian Adams; no le quito para nada mérito a esta nueva entrega del justiciero pero aviso a navegantes.

Una serie increíble. Aunque no te guste el género: está superproducción acabará convenciéndote de lo contrario. Sus tramas, los personajes,los diálogos, todo ello destila aroma del mejor cine. La serie te sumerge totalmente en la época de la fiebre del oro, de la diplomacia marcada a ritmo de balas en la temida ciudad sin ley llamada "Deadwood". Cada capítulo es una clase magistral de historia: cómo se conforman las leyes, la división del poder, los límites fronterizos de cada estado...

¿Qué es lo que falla? Un final no final. Parece ser que por falta de presupuesto no se pudo acabar y realmente es una pena porque a lo largo de las tres temporadas se pone mucho empeño profesional de hacer una serie redonda. Tanto esfuerzo y al final te quedas con las ganas. No obstante, no desmerece para nada, es más, a pesar de esto, será recordada como una de las mejores series debido ,entre otras cosas, por el inolvidable: Al.

Obra maestra. Pocas veces había experimentado una reacción tan exaltante al salir del cine. Es un film cuyo despliegue visual es portentoso hasta tal punto que crea en el espectador una sensación de absoluta insignificancia. Toda la trama personal me parece muy inteligente dado el tema que toca, que no es otro que el de apreciar la vida, y que por muy compicado y difícil que resulte continuar viviendo, siempre se acaba encontrando otra manera de seguir respirando. Por eso, creo que viene como anillo al dedo la historia personal de la protagonista ( que no lacrimógena) para hacernos entender que la vida nos pondrá en tesituras muy complicadas de superar, pero que aún así, el ser humano de adapta y sobrevive porque está hecho: de fuerza, de pasión.