Haz click aquí para copiar la URL
Críticas de Vivoleyendo
Críticas 1.745
Críticas ordenadas por utilidad
4
6 de mayo de 2009
18 de 51 usuarios han encontrado esta crítica útil
Vamos a ver, qué trabajo me cuesta encontrar una película de terror que consiga que me la crea de verdad, o que me cause sensación de verdadera angustia, o que no me provoque más bien asco que miedo.
No es un género con el que yo suelo conectar, porque muchas películas englobadas en él me parecen muy desagradables y estomagantes, cuando no francamente tontas. Admito que soy demasiado sensible para ciertas escenas, o bien soy demasiado escéptica para otras.
Les tengo dicho a mis amigos que procuren recomendarme las mínimas películas de este género, porque ya saben que seguramente no darán con la tecla. Por supuesto, intento ver la mayor parte de lo que ellos, interesados en mi opinión, me piden que vea.
Para comenzar, y lo que creo que es más fundamental: No he pasado miedo alguno. Y no es algo muy positivo acerca de una película que se supone que es de miedo.
En segundo lugar: La veo desfasada, polvorienta. La moda de los anticristos y los antileches está bastante sobada ya. Y a mí no es que me llame la atención especialmente esa moda.
En tercer lugar: Me aburre.
En cuarto lugar: El cristianismo no es la única religión del mundo. A ver cuándo se deciden a hacer alguna película sobre un Antiotracosa, que ese Anticristo es más egocéntrico que la puñeta. Los que no sean cristianos, se pasarán al sujeto ése del diablo por el forro.
Ya me imagino el éxito que tendría este personaje. Recrearé la terrorífica escena:
Total, que llega al mundo este señor que huele a azufre (ya podía usar desodorante, el muy marrano), y se empeña en aterrorizar al personal. Aquí está, con sus cuernos, su rabo (el de atrás, el de atrás, mal pensados), su tridente... O como quiera que sea el bicho éste. Aparece en una calle de Nueva York (porque es una ciudad muy grande, con muchas almas, y además es yanqui). Empieza a lanzar sus berridos y sus llamaradas, muy sofocado él. Nadie le hace caso. Todo el mundo pasa por su lado sin mirarlo. Alguno incluso le echa unas monedas a los pies.
Lógico, en Nueva York la gente ha visto ya de todo. ¿Cómo se van a asustar de un pirado vestido de mamarracho?
Entonces el bicharraco se acerca a alguien, y le dice con su voz de ultratumba: "Ahhhhh, soy el Anticrissstoooo, temed, escoriaaaaa de la Tierraaaaa". Una ancianita se lo queda mirando como si fuese una abuelita preocupada por su nieto, y le ofrece un caramelo para la tos. Otra señora le pregunta que si trabaja para alguna compañía de teatro y si es alguna especie de representación callejera.
Un chico que pasa le dice: "perdón, yo soy ateo". Y otro: "soy judío. No creo en Cristo. No creo en tu Apocalipsis".
Al final del día, el Anticristo se ha largado con el rabo entre las piernas y con el propósito de buscarse un trabajo más satisfactorio.
FIN
En definitiva: Para mí es una película de terror sin terror. Como un reloj que hace de todo, pero que no da la hora. ¿De qué sirve?
Vivoleyendo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1
3 de mayo de 2009
36 de 88 usuarios han encontrado esta crítica útil
¿Qué fue de aquel humor brillante que criticaba y caricaturizaba con acierto las lacras del país, sin caer en lo grosero ni en lo vulgar?
Parece que se sumó a la moda esperpéntica y zafia. ¿Tanta necesidad tenía de arrastrarse por el fango, buscando cualquier medio para llamar la atención, aunque cayese muy bajo? ¿En qué estaban pensando Azcona y él cuando escribieron semejante guión?
Todo en esta comedieta patética es tan grotesco y busca tanto el ataque deprimente y el humor estúpido, que lo que hace es aburrirme y provocarme desprecio. La finalidad principal, la de divertir mediante la crítica, se vuelve en contra de los autores, como un arma que se les disparase en los morros.
En primer lugar, creo que sobraba lo de la colección de pelos de coño. Creo que no se les podía haber ocurrido nada más penoso.
En segundo lugar, si yo fuera actriz y no tuviera para elegir más papeles que los que las mujeres interpretan en esta gilipollez (los típicos prototipos: tontitas, beatas, putas, cornudas consentidas y brujas), mandaría a la porra lo de ser actriz.
En tercer lugar, todos me caen como una patada en el hígado. No hay ni un personaje que se salve.
En cuarto lugar, no creo que a los realizadores les costase tanto poner unos subtítulos. A mí nadie me ha enseñado catalán, entre otras cosas porque donde yo vivo no se habla. Y lo malo es que los protagonistas se pasan la mitad del metraje hablando en catalán y yo me aburro como una ostra. Si circula por ahí alguna versión con subtítulos, desde luego que no estoy enterada. Por mí, que Berlanga ponga a gente hablando en chino mandarín si quiere, pero que procure que todos los espectadores se enteren de lo que están diciendo. Tengo escacharrada la bola de cristal desde hace tiempo y no encuentro a ningún técnico que me la arregle. De ese modo, me resulta dificilillo entender ciertos idiomas que, por mi situación geográfica, no he podido aprender.
Que Berlanga critique todo lo que quiera a los gobiernos, a los ministros y a la madre del cordero si se le antoja. Al principio sabía hacerlo muy bien. Pero degeneró y se convirtió en una parodia de sí mismo.
Vivoleyendo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
2
8 de agosto de 2011
7 de 31 usuarios han encontrado esta crítica útil
Porque vamos, a elementos como esos dos no los llamaba yo ni aunque fueran los únicos en mil kilómetros. Para eso me haría las reformas yo, que me saldrían igual de mal pero por lo menos no me cobrarían mano de obra, no te jode...
Y no hay mucho más que añadir. Que Manolo y Benito (sobre todo el segundo, el primero todavía tiene un pase) son de los personajes más lastimosos que hayan asomado la jeta en una serie. Ahora la reponen en el Nova y cuando una zapea por la tele se encuentra esta maravilla de serie y, ya escaldada, cambia de canal como alma que lleva el diablo.
Vivoleyendo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7
3 de junio de 2007
10 de 38 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cosa curiosa. La primera no es que me pareciera una esplendidez precisamente (a lo mejor influye un poquito que no la vi en el cine, y ya se sabe que casi cualquier película parece engrandecerse en el cine), y la segunda aún no la he visto. ¿Que por qué he ido al cine a ver la tercera? Ni yo misma lo sé muy bien. Tal vez fuese simple curiosidad, pero el caso es que he ido. Y, ¿saben qué? Me ha gustado. Me ha dado una impresión de solidez y de consagración que no advertí en la primera.
Vale, que la cosa sigue la misma premisa: superproducción que huele a muchos millones de dólares, una prolongada duración (2 horas y 3 cuartos), mucho rollo de piratas, mucho código, mucha fantasía, mucho embrollo argumental, mucha pelea, mucha ambigüedad, mucha dualidad traición/alianza/egoísmo/altruismo/odio/amistad/amor, muchos efectos especiales, muchas piruetas coreografiadas, mucho romanticismo etc., etc., etc. Pero el caso es que en esta ocasión lo han combinado todo de alguna manera que, sí, de acuerdo, me ha interesado, me ha absorbido y hasta me ha removido alguna fibra por ahí dentro.
Pese a que decididamente prefiero otro tipo de películas y "Piratas del Caribe" nunca serán de mis favoritas, sin embargo a esta tercera parte debo reconocerle su calidad. A nivel técnico, casi impecable: fotografía, efectos especiales, sonido y banda sonora, maquillaje, vestuario... (el ambiente decadente, degradado, sucio y repugnante que prima en el mundillo pirata es muy convincente). A nivel interpretativo, todos en su línea tradicional, destacando como siempre un inspirado Johnny Depp, Geoffrey Rush (que tiene un no sé qué que le hace brillar) y una Keira Knightley deslumbrante. Los personajes, pese a que en el fondo siguen tan planos como siempre, al menos navegan en la ambigüedad, en los límites de la traición y de la lealtad, sin saber a veces a ciencia cierta de qué bando están (de hecho, yo ya no sabía muy bien qué demonios de bandos había, con tanto lío, ahí casi cualquiera vende a su abuela por un puñado de monedas, vete a saber... bueno, ya sabemos el dicho: "arrasa con lo que veas y generoso no seas").
Aunque su duración es excesiva para lo que en realidad supone esta película (puro y mero entretenimiento, sin más), si les entretuvo la primera parte (y supongo que la segunda), entonces no saldrán decepcionados (espero) con esta parte.
En definitiva, un guión en el fondo previsible y tradicional pero mostrado mediante muchos trucos efectistas que funcionan y enganchan.
Y, como era de esperar, ya se insinúa descaradamente la cuarta. Si la ven en el cine, quédense hasta el final de los créditos, hay una última escena. Previsible, pero ya que está ahí...
Vivoleyendo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
3
23 de agosto de 2008
50 de 122 usuarios han encontrado esta crítica útil
Uffff, menudo tostonazo... ¿Y esto es un icono del cine de aventuras? Pues prefiero a Indiana Jones, y eso que tampoco es que me entusiasme...
Basado en la historia de Kipling, narra las aventuras de dos masones con muchas ganas de meterse donde no les llaman, de aprovecharse de la ignorancia y de la superstición ajena, de autoproclamarse "reyes" de un territorio situado a la sombra del Himalaya, de creerse dioses, heróes supremos y mandamases superiores. Y por supuesto los tíos no tienen un pelo de tontos porque planifican echar las zarpas sobre algún botín suntuoso y, de paso, y por mucho que se las den de galantes, sobre alguna chavalota buenorra que se convierta en su esclava sexual.
Ja, qué emocionante. Qué tipos tan valientes. Se aburren mucho y se dedican a jugar a la guerrita y a querer jugar al ajedrez utilizando a personas como fichas. Vale que los pueblos que quieren conquistar son muy ignorantes, con costumbres a menudo bárbaras y salvajes. Pero los británicos no eran mucho mejores. Ni ninguna potencia que se haya autoconsiderado como "portadora de la verdad suprema" y que se haya dedicado a invadir y a dar por saco por el mundo, por la simple ambición de poseer más tierras, conquistar por la fuerza y mandar y disponer a su antojo.
Ningún pueblo se salva de la quema.
Así que no me vengan esos dos idiotas queriéndoselas dar de "aventureros" justicieros y "valientes".
Si se aburrían tanto en casita y tenían ganas de jugar a la guerra, yo gustosamente les habría regalado el "Risk" para que se entretuvieran. O, ya puestos, que se hubieran puesto a dispararse y a pincharse entre ellos con sus rifles y sus bayonetas.
No te fastidian los dos fantoches...
Esta película ni siquiera me ha servido como entretenimiento. He estado a punto de dar más de una cabezada. Aparte de alguna leve sonrisilla de vez en cuando, sólo me ha arrancado bostezos.
No necesito otra demostración más de la estupidez, la vanidad, la ambición, la crueldad, la ceguera, la hipocresía y demás virtudes humanas. Si había alguna pretensión de hacernos sentir vergüenza ajena a algunos de los espectadores, a fe que Huston ha dado en la diana conmigo.
Por mucho Kipling que sea (me encantó su "Libro de la selva"), y por mucho que refleje una época y una ideología concreta, la de la prepotencia británica.
Y que conste que me decidí a verla por lo bien considerada que está y he aguantado hasta el final para intentar comprobar si la cosa daba algún giro positivo y en tal caso podría haberle dado una oportunidad; no la he aguantado entera porque yo sea masoca. De hecho, otras películas no las he soportado ni hasta la mitad. Ésta ha sido afortunada.
Pero aquí me he quedado esperando a que me llegara la iluminación.
Menudo chasco.
Vivoleyendo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow