Vi esta película por primera vez hace muchos años, en Italia y, claro, en italiano, en ese dialecto romano tan peculiar y directo.
A lo largo de los años, la veo tres veces más. Y la última hoy, 14 de enero de 2023. La película tiene ya nada menos que 75 años y la factura, la emoción, el interés siguen vivos.
Además de ser un documento (no un documental) de la Roma de la época, en parte asolada por la reciente guerra, es un guión magnífico, en el que intervinieron siete de los mejores guionistas de la época, entre ellos quien trabajó luego para Visconti,
Todo llevado por la maestría de De Sica, que enseñaba a cada personaje, él, tan gran actor, cómo debía hacerse.
He leído algunas de las críticas y me dan pena las que ponen una nota muy baja. ¡Qué entenderán por cine y por humanidad!
Menos mal que el buen criterio de la casi totalidad componen una media de 8,3 que, para lo que se despacha en FA es muy notable.
La tragedia puede parecer mínima, una bicicleta.Pero con tan pocos elementos se compone algo tan grande como ese final, de lo más impactante que he visto en el cine.
Por no hablar de la relación padre-hijo (un niño de poca edad que tiene que trabajar, como tantos entonces), hecha de miradas, de silencios y de manos que se estrechan.

Me extraña que en FA no haya ni una crítica de esta serie que da mucho a conocer de Bergman y por la que pasan algunos de los más celebrados directores famosos: Scorsese, Áng Lee, Zhang Yimou, Lars von Trier, González Iñarritu, Haneke y actores y actrices de primera.
Pero lo que más me llama la atención es lo poco o nada profundos de la mayor parte de ellos. Unos están pirados, como von Trier; otros, raritos y a la vez superficiales, como Haneke. La mayoría demuestran que son buenos artesanos y, si llegan a ser artistas, es en sus películas, no en lo que tienen que decir sobre ellas. Las mejores entrevistas me parecen la de Woody Allen y la de Scorsese.
Lo bueno es que hay muchas escenas de películas que ya son clásicas. Es una especie de repaso a buena parte del cine desde los setenta hasta los primeros años del siglo XXI,
Todo agrupado en capítulos como comedia, muerte, silencio, alienación…, aunque tratado con cierta superficialidad. Muy sueco todo. De calidad media pero sin ir a fondo, algo así como los muebles de Ikea.

Reconozco desde el principio que mi valoración arranca de mi amor por los animales y en especial por los perros.
Es una película menor, sin duda. ChanningTatum cumple con soltura, en un papel que no tiene especial dificultad.
Quizá en algún momento se hace reiterativa, sí. Pero ver a esa perra, a veces furiosa, más tarde cariñosa, esa fidelidad, esa mirada.
Así que quienes no amen de esa manera a los adorables chuchos que no la vean. Quienes sí, disfrutarán e incluso se emocionarán.

Rodada con acierto, con un planteamiento interesante y una galería de personajes creíbles, además del mensaje en contra del antisemitismo, se empieza a ver con interés. Lo que pasa es que conforme avanza va perdiendo fuelle y se hace menos verosímil. Y, como sucede tantas veces, la resolución no está bien.
Es una pena porque tenía todos los mimbres para ser algo interesante.
Una sugerencia en spoiler.

Antes de comentar algo de esta notable película, quisiera proponer a los usuarios de FA que inicien una mora en lo de decir “me aburro” o zzzz, me duermo. Está tan visto y es tan tópico que eso sí que aburre.
Al grano. Los dirigentes soviéticos eran unos ilusos si pensaban que esta película era la réplica a 2001.Odisea en el espacio. Tarkovsky les dio liebre por gato. Aquí el espacio, la ciencia ficción es una simple excusa para, entre otras intimidades, una historia de amor y una reflexión sobre la conciencia y el pasado. Podía ambientarse en una nave espacial (que no se mueve nada, por cierto) como en un iglú o en un sanatorio psiquiátrico.
Sólo por el modo de usar la cámara, marca Tarkovsky, la película es notable. Y la poca música que hay, también. Y las citas. La del Quijote. La Trinidad de Rubliov, que lleva a otra de sus películas.
Con todo, no me parece a la altura de las demás de nuestro genio. Incluso diría que es la menos buena.
Estoy de acuerdo en que el metraje es excesivo y que con dos horas hubiera bastado. Pero me imagino que lo que se esperaba en 1972 era algo largo, contundente, Acortarlo sería como resumir “Guerra y paz” en un cuadernillo.
Otra cosa para los que la infravaloran. Si la película no valiera, no tendría aquí casi 150 críticas. Esta mía no servirá ya de mucho, pero es un desahogo, al verla por tercera vez, sí. Y me queda la cuarta.