Es una REMAKE de un film homónimo francés.

Un policial con una producción aceptable, un reducido plantel actoral y un ambiente ficcional acotado que sirve bien como entretenimiento.

Las actuaciones justas y un guión que trata de salirse de lo común esconde para el último minuto final un giro insospechado. Aún así este último giro demasiado evidente malogra en algún sentido la sorpresa y por supuesto el film.
La historia escrita por un francés es buena y pero el guión en esta remake y que fuera escrito por un yankie no acierta en el "tempo" cinematográfico cosa que el el director no sabe remediar y lleva así a cansar en algunos momentos al espectador.

No está mal, pero tampoco es una gran película. La original francesa es mucho mejor.

Sin embargo es un buen intento de filmar algo distinto dentro que sobresalga -aunque sea un palmo- de la pobre producción que el cine contemporáneo yankie hoy día ofrece.

Lo que realmente sobresale de ésta película es la banda sonora y la fotografía que ha sido hecha por dos argentinos Federico Jusid y José David Montero probando de esa manera que si algo bueno tiene frecuentemente es debido por recurrir a manos extranjeras.