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Voto de Elcinederamon:
8
Serie de TV. Drama Miniserie de TV (1989-1990). 10 episodios. Originalmente hecho para la televisión polaca, 'El decálogo' se centra en unos residentes de un complejo residencial, en la Polonia del comunismo tardío, cuyas vidas están sutilmente entrelazadas. Irán encontrando dilemas emocionales tan profundamente personales como universales. Son diez episodios y cada uno de ellos está basado en uno de los diez mandamientos.
6 de diciembre de 2014
1 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
El decálogo (TV) de Krzysztof Kieslowski es una miniserie de televisión dramática que toma como base los diez mandamientos. Dirigida con un ritmo solemne y con un estilo personal y profundo en sus múltiples mandamientos, es una obra magnífica en sus distintas historias que acaparan la total atención del espectador y lo absorbe dándole en qué pensar cuando exhibe los incumplimientos de estos mandamientos, enlazando además distintos capítulos a través de sus personajes de un modo que expondrá en futuros films, completando con ello una obra que te hace cavilar con cuestiones metafísicas de difícil comprensión. Realizada de manera inteligente tiene un resultado extraordinario digno de visión para cualquier cinéfilo ávido de buen cine.
La fotografía es evocadora al barrio en cuestión donde se desarrolla la serie y crea con sus imágenes sobrias y oscuras una atmósfera triste que es estéticamente sugerente y añade tristeza a los capítulos. La música es hipnótica y usada en pocas ocasiones, añadiendo detalles sentimentales, aunque sus silencios son los que más trasmiten la melancolía que quiere el director para sus capítulos. Los planos y movimientos de cámara consuman una excelente labor muy particular en la que los primeros y primerísimos planos juegan un papel determinante para mostrar la humanidad de cada uno de los personajes, pero emplea también la cámara en mano, subjetivos, seguimiento, avanti, detalles, plano-contraplanos y voyeur que sacan lo mejor de cada una de las interpretaciones y la acción.
Las actuaciones son austeras pero muy acertadas en cada uno de sus personajes. Como protagonistas interpretan en los diez capítulos Henryk Baranowski, Wojciech Klata, Krystyna Janda, Aleksander Bardini, Daniel Olbrychski, Maria Pakulnis, Adrianna Biedrzyńska, Janusz Gajos, Mirosław Baka, Jan Tesarz, Olaf Lubaszenko, Grażyna Szapołowska, Anna Polony, Maja Barełkowska, Teresa Marczewska, Maria Kosciałkowska, Ewa Błaszczyk, Piotr Machalica, Jerzy Stuhr, Zbigniew Zamachowski entre otros. La dirección artística emplea para estos unos vestuarios naturales y comunes a ciudadanos de clase media y unos decorados que son los mismos edificios en todos los capítulos, creando con ellos como un universo en común a cada una de las distintas historias.
El guion, escrito por el director junto con Krzysztof Piesiewicz, da una lección en cada uno de sus capítulos y expone un trabajo personal que crea gran interés, incitando al público en un admirable tarea que es excepcional en definición, ya que está repleto de mensajes con dobles sentidos de difícil comprensión y además enlaza algunos capítulos a través de sus personajes. Además, introduce en la mayoría de los capítulos a un enigmático personaje que no habla pero observa en determinadas escenas claves a los protagonistas. Esto se lleva a cabo con una narrativa recóndita y equilibrada que muestra con pesimismo y profundidad cada una de las historias que plasma en cierto sentido la difícil situación de transición que pasaba por aquel momento Polonia. Cabe destacar también, el notable montaje que comprime cada una de las historias en menos de una hora, sacando lo mejor de cada una de ellas en el limitado tiempo de cada uno de los capítulos.
Para finalizar, la considero una obra profunda en su modo de mostrar el incumplimiento de los 10 mandamientos y posiblemente sea la más conocida en la filmografía del director. Además, lo hace de un modo subjetivo que hace reflexionar al espectador y lo incita con sus provocadoras tramas de gran trascendencia espiritual, religiosa y ética, sacudiéndolo con historias íntimas que parecen salir de las propias vivencias del director. Muy recomendable por sus mensajes, dirección, guiones, fotografía, música, montaje, planos, movimientos de cámara y narrativa que vuelven a la serie de televisión El decálogo, una obra obligada de ver por todos aquellos cinéfilos que quieran descubrir cine profundo, personal y distinto, que ofrece algo nuevo y con un estilo que solo puede ofrecer su singular creador.
Elcinederamon
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