24 (Serie de TV)

Temporada 1: 8. El primer día largo de la vida del ahora legendario Jack Bauer será posiblemente el más famoso y el que haya sido más interesante para todos gracias principalmente a cómo contaba su propuesta. Siempre llena de sorpresas y tensión aprovechando a las mil maravillas su formato. Kiefer Sutherland era constante y en evolución y el resto de secundarios tenían su desarrollo y sus grandes momentos. Pese a esto, la temporada no terminó de ser perfecta (subtramas con la hija del protagonista y algunos trucos repetitivos de guión). Sin contar que se nota que la trama estaba calculada para 13 “horas” y no para 24, por lo que la segunda mitad de la temporada se siente como alargada. No obstante, ahí está un Dennis Hooper con un villano memorable y unos últimos 5 episodios brillantes, culminando en un último episodio (el 24) que bien puede ser el mejor de toda la serie.

Temporada 2: 8. Con la fórmula ya asentada y sus trucos inicialmente sorpresivos expuestos en la primera temporada, la segunda sólo podía magnificar y explotar más su trama narrativa dentro de las horas. Y se da fe que lo hicieron. Si bien nunca supera la sorpresa de la primera, está a su mismo nivel general gracias a un ritmo más trepidante y a una trama más evolucionada y más oscura si cabe que la anterior. Se dan de nuevo problemas con salidas de guión repetitivas y que el resolver una trama para dar lugar a otra se sigue notando como episodios un tanto distintos. No obstante, la serie siempre se propuso entretener notablemente y dar nervio como la que más (sin olvidar sus tintes dramáticos conseguidos, sino ver el episodio 15). Y ahí la segunda temporada siguió triunfando y cosechando tantos bienes como la anterior.

Temporada 3: 6 (alto). En una serie muy mal tiene que ir por lo general para que las dos primeras temporadas (su carta de presentación) no sean, por lo menos, “sólo buenas”. Una por la novedad y otra por la reafirmación (o casi repetición) de ese esquema nuevo. “24” ahí encontró su gallina de huevos de oro. Y en su tercer “día”, la jornada de Jack Bauer comienza a sentirse irregular. No por los múltiples cambios (el compañero de Jack, nuevos trabajadores, nuevas amenazas como la de un virus…) que puedan gustar o no, sino porque aquí las tramas y los personajes están introducidos de manera forzada y las sorpresas pretenden sorprender de forma cuasi atropellada y porque sí, buscando el shock tramposo, en lugar de potenciar el argumento y ayudar a su evolución. Aquí empezaron a exagerar y a cansar un tanto por las repeticiones de personajes y situaciones (el presidente acude, otra vez, a su malvada ex esposa…). Incluso la villana de la serie por excelencia aquí es totalmente desperdiciada limitándose a repetir la misma frase un millar de veces (“Él te traicionará”…) y tratando de volver a la gente en contra de otros de forma risible. Sin contar que en la segunda mitad se construye un clima de emoción puro gracias a un villano genial que pasa a perder todo ese atractivo en los dos episodios finales y, por tanto, priva a la temporada de ese final apoteósico que venía prometiendo. Aún con sus múltiples problemas, es una temporada entretenida, con una primera mitad justita pero con unos 10 episodios finales geniales en conjunto (destacando el imborrable episodio 18).

Temporada 4: 7. La primera “reinvención” de la serie consiguió ganar más fans y ser un soplo de aire ciertamente fresco, pero rechazando curiosamente a lo que a la serie se le había agradecido tanto: el realismo. En su cuarta temporada, “24” se creyó de verdad su estatus de blockbuster televisivo y dio justo lo que ese género prometía y promete. Entretenimiento apasionante, adictivo y siempre notable. Nuevos personajes y nuevas subtramas bastante más cuidadas y cuya energía y ritmo conseguían tapar esa falla de veracidad. Incluso aprendieron de sus errores en el pasado y los creadores/escritores dieron una misma amenaza para toda la temporada, sin apenas variaciones. Las salidas de guión repetitivas se siguen sucediendo pero no cansan y son usadas para dotar de mayor engranaje y desarrollo al villano. Y los 8 episodios finales son de lo mejor de la serie, culminando en un episodio final que es el mejor de todos y deja a la serie en un punto culminante. Lástima que la serie ya no sea tan sorprendente o creíble.

Temporada 5: 9. Hablar de la quinta temporada de “24” es hablar de oro puro televisivo. Esta temporada es aún a día de hoy una de las mejores temporadas que la televisión jamás haya dado. Sin contar que es la mejor temporada de la serie. En una sola temporada, “24” reafirmó su estatus de blockbuster, de historia única en la jornada y también recuperó esa vena conspiratoria y creíble de las primeras temporadas, potenciando ambos elementos (una trama magistralmente construida y una acción y estilo visual dignos de la pantalla grande) y dando lugar a 24 episodios de infarto. Sigue pecando de subtramas y de pocos elemente repetitivos, pero hay que agradecer el haber concentrado tanto material tan bueno, el saber interconectar los personajes de forma genial y dar un protagonismo inesperado a un villano sensacional. Las sorpresas volvían a tener su por qué y su sentido, la trama nos devolvía a los días dorados y exploraba las posibilidades de la serie en su mejor término. Una temporada histórica para la serie y una de las mejores de la televisión.

(Continua en "spoiler" sin spoilers, sólo crítica pura / Indispensable para saber qué se opina de la serie en su totalidad)

Serie de mecánica supuestamente hiperadictiva que se puso de moda hace ya sus buenos años y que acusa los estragos del tiempo y sobre todo los de las mil series cien veces mejores que se han hecho desde entonces.

Empiezo comentando lo de que el doblaje es bastante penoso, que los giros de guión son exageradísimos y que un plato de bacalao a la vizcaína tiene más vis dramática que toda la interpretación de Sutherland a lo largo del millón de temporadas que dura la cosa, increíble lo de que le dieran premios y todo desde luego como para fiarse.

Pero aún así eso no es lo peor, lo peor son los diálogos, te vuelven majara repitiendo las mismas frases una y otra vez de forma absolutamente demencial, da igual de qué vaya el capítulo o donde caiga el fast forward, todo es como una combinación random de:

- "...el presidente de los Estados Unidos"
- "...desactivar bomba terrorista"
- "...¡Jack, no queda tiempo!"
- "..si no me das x, mataré a tu hijo/tu marido/tu madre/a todos los..."
- "...ciudadanos inocentes de los Estados Unidos"
- "...el ejército de los Estados Unidos"
- "...enemigo de los Estados Unidos"

Es como si hubieran contratado al letrista de Manowar haciéndole sustituir el "true", "fire", "steel" y "metal" por conceptos patrióticos pro-norteamericanos y clichés de acción y el resultado es como una cadencia insoportable con el potencial desquiciante de cualquier objeto dotado de lente en manos de un lord inglés en un cuento de Lovecraft.

Más o menos todas las temporadas tratan de lo mismo, hay un megamalote, unos cuantos mini-malos, un secundario prescindible que muere y un montón de gente llamándose por teléfono para concertar complejas y aburridísimas operaciones de rescate o desarticulamientos de bombas.

Todas las historias estas tienen como muchas sorpresas y giros trepidantes constantes que al final ya los adivinas casi todos y se pierde el único poco estímulo que tenía el invento. No sé, si al menos variasen la cosa y metiesen yo que sé, un serial killer o una operación encubierta en el hampa neoyorkina...por variar, digo.

Me he tragado infinidad de películas que no valen un duro y llego a la conclusión de que mejor pasar un par de horas viendo 24 que ponerme otra cosa.

Antes de irme al videoclub a por una peli, elijo 24...si empiezas a verla no puedes parar. Ese es el único problema: si empiezas, necesitas más. Desde el primer capítulo. Tiene un ritmazo que ya quisieran muchas películas. Eso sí, ver un capítulo no sirve de nada. O ves los 24 o no veas nada.

La trama te introduce en situaciones de difícil solución moral, realmente te pone en tensión y te hace preguntarte hasta qué punto está justificado saltarse derechos fundamentales con el fin de evitar una catástrofe. Por eso a algún crítico no le gusta la serie, porque "los buenos" a veces se pasan de la raya con tal de lograr sus fines, tal y como hacen "los malos".

Personalmente no me afecta. Esto es una serie de entretenimiento y me alegro de poder disfrutarla por completo.


MUY MUY RECOMENDABLE

Con ésta frase se iniciaba la increíble primera temporada de esta gran serie, que tardé algo en descubrirla pero no me arrepiento para nada de haberlo hecho, pues es sencillamente genial.
Toda la serie en general, hasta ahora, no tiene desperdicio y es de lo mejorcito de la televisión.
Todo el reparto está muy bien y muy creíbles, pero el que de verdad se lleva todos los aplausos (y con razón) y es el protagonista de la serie es, sin dudas, Kiefer Sutherland que está magnífico con mayúsculas haciendo de Jack Bauer, personaje que además evoluciona conforme se suceden las temporadas, nunca haciendo lo mismo sino viéndole en situaciones diferentes y muy arriesgadas, cosa que agradezco muchísimo.

Con todo sólo me cabe comentar un poco cada temporada:
La 1ª, sencillamente increíble, muy adictiva y muy emocionante, aunque lo que fastidia un poco es que su segunda mitad, sin perder su buenísimo toque decaiga un poco frente a la primera mitad, aunque llegan unos dos últimos capítulos realmente sorprendentes y fascinantes que te demuestran cómo de lejos puede llegar la serie. Además, por los logros conseguidos, se la pueden pasar puntos muertos que además dejan respirar tras tanta tensión.
Con todo: Un 10.

La 2ª es una muy buena temporada, que además va de menos a más, solucionando el problema que sufrió la 1ª, pero tampoco sin sobrepasarla en ningún momento, debido también a algunos bajones de ritmo, pero siempre manteniéndose a una satisfactoria altura, y posee otro buen final, que te deja en vilo. Un 9,5.

La 3ª es una temporada muy entretenida y en la que pasa de todo, realmente resulta frenética y llena de acción, aunque a mi gusto le falta algo del dramatismo de las dos temporadas anteriores. Pero el entretenimiento y el nivel en el que se mantiene es más que digno. Un 9,75.

La 4ª, para mí, baja un poco con respecto a la tercera, pero es también otra muy buena temporada de la serie, repleta de tensión y con un final sencillamente de infarto. Aunque lo malo de esta temporadaes que se te hace algo repetitiva. Un 9,5.

La 5ª es la mejor temporada de todas; en todo momento resulta sorprendente y tensa, no hay ningún puento muerto y el final es comparable al de la mismísima 1ª temporada, sencillamente sobrecogedor. Un 10.

La 6ª es la peor temporada de todas, una auténtica decepción, sobre todo en una aburrida segunda mitad, totalmente predecible y sin la tensión ni la espectacularidad de las temporadas anteriores. Pero teniendo en cuenta que también tiene sus grandes momentos, la perdono un poco sus defectos. Un 7,5.

Y la 7ª es la otra mejor temporada de la serie, sorprendente, sin ningúna pausa y con una tensión increíble. Además es muy innovadora, pues presenta cosas nunca vistas antes en la serie. Sólo por eso ya merece otro 10.

Con todo, una grandiosa serie que espero seguir viendo durante mucho tiempo.

1ª Temporada: 10.
Aparentaba ser un nuevo fracaso en la televisión, pese a la gran recepción de las críticas, pero resultó ser un éxito rotundo y un bombazo televisivo.
La serie se iniciaba con una temporada, la más impactante de todas por la novedad más que nada, de lo más perfecta, cuyos giros inesperados eran realmente sorprendentes, adelantándose al espectador sin dejarle tregua (ver el último episodio de la temporada), y dejándole con ganas de ver más.
Los 24 episodios son de lo mejorcito de la televisión, todos y cada uno de ellos.
Kiefer Sutherland resulta soberbio y totalmente creíble en su papel protagonista, absolutamente redondo. Así sería, incluso algo mejor, en las seis temporadas siguientes.
2ª Temporada: 9,25.
Pese a que el final de la primera era cerrado, la serie prometía otra temporada más y finalmente llegó.
Aunque inferior a la 1ª por unos bajones de ritmo y una Kim Bauer algo pesadita, la 2ª se mantiene en un nivel más que bueno y muy digno para los fans de la serie, que volvieron a tener su ración de tensión, de adicción y de giros inesperados una vez más.
El final, pese a ser también inferior, te deja con grito ahogado y con ganas de ver la siguiente.
3ª Temporada: 9,5.
El tercer día más largo de Bauer es mejor que el anterior, y resulta un frenético entretenimiento, con las señas caracterísiticas de la serie, pero sin llegar a la altura de la primera.
4ª Temporada: 9,75.
El cuarto día es ampliamente mejor que los dos anteriores, repleta de cambios que marcarán la serie y con una trama realmente apasionante en cada episodio, llegando a un final que, por vez primera se coloca al mismo nivel que el impresionante final de la 1ª.

Por favor, me he visto los hasta ahora siete días de Jack Bauer, sigan leyendo el resto en spoiler por falta de espacio, no desvelo nada...