Haz click aquí para copiar la URL

El estudiante novato

Comedia Harold Lamb es un estudiante novato dispuesto a todo para hacerse popular en la universidad. (FILMAFFINITY)
Críticas 5
Críticas ordenadas por utilidad
6 de marzo de 2011
18 de 21 usuarios han encontrado esta crítica útil
Poco me importa que Harold Lloyd no haya sido un clown, lo que me importa y mucho es que ha sido el mayor creador de gags por minuto que haya existido. Un creador de gags inigualable y un personaje luchador que triunfó en la misma época que el mayor genio del siglo XX, y eso tiene mucho mérito. Un genio que nos demostró que todo es proponerselo en la vida; claro que primero hay que tener talento.
El estudiante novato es la cima de Lloyd si exceptuamos la mítica El hombre mosca y la película más hilarante del planeta tierra. En Marte están en ello y es posible que en un par de siglos la igualen. Lo demuestra cuando se rompe el traje en la fiesta y el partido de fútbol- que por cierto la defensa no eran la de los Green Bay Packers-. Ambas escenas serían lo que al tenis es Federer y Nadal.
Harold Lloyd siempre estarás en mi corazón y en mi videoteca.
RONNIE JAMES DIO (CUENTA BLOQUEADA)
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
5 de julio de 2010
15 de 18 usuarios han encontrado esta crítica útil
¡Ingresar a la universidad! El sueño de algunos que esperan hacer una carrera para servir a la humanidad mejorando su calidad de vida… pero también, la ambición de muchos que aspiran a sentirse importantes haciendo algo que les haga sobresalir de entre la gente del común. De este lado, está Harold Lamb el hijo único de una modesta familia, teniendo él que trabajar vendiendo lavadoras, para poder conseguir el dinero que le permita pagar su inscripción en el afamado College Tate.

Harold sueña con ser el más popular entre los alumnos, como lo fue Chet Trask, cuya imagen conserva en una de las paredes de su cuarto. Tambien sueña con ser un consagrado deportista, y por qué no, el galán de algunas chicas. Pero, cuando por fin ingresa a la institución, el joven Lamb comienza a ser víctima de los gozadores de primíparos y pronto lo enfrentan contra el mismísimo decano, el hombre que se siente tan alto que “no se casó para que su esposa no fuera a llamarlo por su nombre de pila”.

Broma viene y broma va, y el pobre Harold cae en cada trampa, teniendo sólo en muy pocas ocasiones, algunas salidas un tanto lustrosas. Ya tiene una enamorada llamada Peggy, pero él sigue empeñado en ser como sus compañeros de la U. esperan que sea.

Los directores Sam Taylor y Fred Newmeyer, ponen otro punto en alto la carrera del gran comediante Harold Lloyd, con esta ingeniosa comedia estudiantil que nos convida a ser auténticos, y que nunca fue superada por los demás comediantes que se introdujeron en el mismo tema. Rodada bellamente en película pancromática (de colores unitarios y alternos: ocre para interiores, blanco y negro para exteriores y azul para las escenas nocturnas), el filme fue cuidado hasta en los mismos intertítulos y las acrobacias de Lloyd complementan las acciones con eventual virtuosismo.

Inolvidables resultan, la escena del entrenamiento donde Harold es utilizado como muñeco derribable, la secuencia del baile con el traje que se descose de uno y otro lado, y el magnífico partido de fútbol donde, el denostado y manipulado chico, preserva su última esperanza.

“EL ESTUDIANTE NOVATO” es un filme encantador por donde se le mire y vuelve a dejar sentado que, las mejores comedias de la historia del arte cinematográfico, se hicieron en los años veinte del muy aventajado siglo XX.

Título para Latinoamérica: “EL PRIMÍPARO”
Luis Guillermo Cardona
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
22 de febrero de 2014
9 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
Lo mejor:
La película más taquillera de Harold Lloyd, la influencia de Harold Lloyd para los que vinieron por detrás, los mejores 30 minutos del género, el mejor partido de fútbol americano, el mejor sastre, la tercera película preferida de Harold Lloyd, mejor que cualquier comedia de Buster Keaton.
Lo peor:
La miopía de la crítica sobre el plagio que sufrió El estudiante novato por parte de Buster Keaton y El colegial.
LAURADURMIENTE
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
12 de mayo de 2014
6 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
Con The Freshman (El estudiante novato, 1925), el cine de Harold Lloyd alcanzaría la cúspide comercial de su carrera. El actor, uno de los pocos cómicos del cine mudo que vivió de manera holgada durante el resto de su vida (mucho tiempo después del advenimiento del cine sonoro) alcanzó con el estudiante novato, su mayor éxito de público, superando genios que hoy en día gozan de un mayor respeto popular, como pudiera ser el caso de Charles Chaplin.

El estudiante novato nos muestra un argumento que paradójicamente puede llevarnos a pensar en diversas películas actuales, que tratan el tema de estudiantes universitarios o de instituto. En este caso, nuestro protagonista interpretado obviamente por el propio Lloyd, se trata de un joven estudiante que está a punto de iniciar su carrera dentro del ámbito universitario. Sin embargo, Harold Lamb tiene unas expectativas que no se corresponden con la realidad. A Lamb no le interesa mínimamente los estudios, sino que lo que desea es triunfar de manera popular en la universidad, siendo el más exitoso del campus. La película muestra bien estas ansías del protagonistas, con los planos de su habitación que nos muestran que el personaje de Lloyd está fascinado por una película que precisamente nos habla del mundo universitario (tiene un póster suyo colgado en la habitación), así como el vestuario de nuestro protagonista (tiene todo el merchandaising de la universidad).

En realidad, el desarrollo de la película, entre gag y gag, es la típica película que se centra en un personaje underdog, al que todos toman el pelo durante casi todo el metraje, hasta que una vez enterado este de las burlas de sus compañeros, decide redimirse. Hablando claro, Lloyd interpreta un pardillo que dista mucho de ser el hombre más popular del campus. Tampoco le ayudan sus aptitudes físicas, pues Lloyd siempre fue un tipo físicamente más bien enclenque, y así es tal y como aparece representado en la película. Con sus presentaciones absurdas (realizando un pequeño bailecito antes de presentarse) y su personal estilo, el personaje de Lloyd responde al arquetípico del pringado universitario, que con tanta frecuencia aparecería en el cine de los ochenta (y en adelante), pero que tiene sus raíces ya en el cine mudo.

Al tratarse de una película totalmente popular, el Happy End está obviamente garantizado. Después de pasar por mil y una situaciones desesperadas, Lamb se enfrenta a un partido de fútbol americano, y aunque en principio no se cuenta con él, después de que medio equipo se lesione en el campo, Lamb gozará de una oportunidad (pensemos cuantas veces hemos visto situaciones similares en cualquier otro tipo de películas o series). Sin duda, el partido final es el mejor clímax posible de la película. La película consigue ahí su máximo grado de eficacia, con un irresistible Lloyd que pese a no tener ni remota idea del deporte que practica, consigue hacerse con la victoria. Memorables resultan algunos planos que nos muestran el jolgorio de las gradas (en parte riéndose de nuestro protagonista), pero sobretodo los del terreno de juego. Por otra parte, El estudiante novato nos muestra un magnífico travelling, con un punto de vista un tanto elevado, que se utiliza durante el touchdown de nuestro protagonista, que consigue escapar a los contrincantes gracias a su agilidad y buena suerte. Además de ganar el partido, Lloyd conseguirá obviamente hacerse con el amor de la muchacha.

Pero ciertamente la película adolece de ciertos defectos. La relación entre Lamb y esa muchacha aparece casi como un simple apéndice que acaba felizmente porque tiene que finalizar así, sin que exista una razón verdadera. Al tratarse de una película hecha por y para Lloyd, los protagonistas secundarios resultan totalmente prescindibles, incluyendo las figuras a las que teóricamente se les da más papel (quizá sólo podríamos destacar al entrenador del equipo de Rugby, que interpreta Pat Harmon). En la película sólo importa las habilidades cómicas de Lloyd (por eso quizá sólo existen primeros planos de su personaje), que afortunadamente están a la altura de las circunstancias, por lo menos en casi todo el metraje.

Míticas secuencias son el ya comentado partido final, así como el entrenamiento en que Lloyd hace de sparring de los demás jugadores del equipo,que golpean a Lloyd al no disponer de un muñeco al que atizar durante el entrenamiento, o la secuencia del baile en que Lloyd tiene que arreglárselas con un traje que se descose por momentos. Gags cómicos que funcionan adecuadamente, y más teniendo un actor con el nivel de Lloyd en el reparto. A Pesar de todo, seguramente no estemos ante la mejor película del actor.

http://neokunst.wordpress.com/2014/05/12/the-freshman-el-estudiante-novato-1925/
Kyrios
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
16 de mayo de 2018
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Una de las últimas películas que obtuvo mucho éxito en su día. Es una buena comedia, donde ya se nota muchísima madurez en lo que se refiera comedia, a lo que entendemos a día de hoy.

Curioso ver a Lloyd de estudiante, pero como tiene cara de niño, bien entra.

Hay bastante moraleja, pero bueno, podría ser una moraleja muy abierta, porque tampoco profundiza en "ser lo que uno es realmente" sin fingir lo que no es.

Entretiene a día de hoy, con lo que ya la valoro muy bien.
edugrn
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow