Death Note

En terminos generales esta película, basada en uno de mis animes preferidos, podriamos decir que es correcta, es más, viendo algunos homicidios que se hacen con otros espectáculos animados, la futura Dragon Ball da miedo, se puede decir que es más que correcta. Todo amante de la serie de anime no se sentirá defraudado, turbado tal vez, pero no defraudado, porque, inevitablemente, cuando acabeis de verla tendreis la sensación de que todo se podría haber hecho mejor: Yagami tendría que estar mejor caracterizado (no me ha gustado nada el pelo), Ryuk podria estar mejor hecho, vale que es normal que se noten las cosas realizadas por ordenador pero en este caso es demasiado y L no tendría ese maquillaje de «drag» en los ojos. La banda sonora, otro tirón de orejas para el director que no ha aprovechado la original.

El argumento es bastante fiel al de la serie, frase arriba frase abajo... leer Spoiler.

El primer live action de Death Note tenía la casi imposible tarea de plasmar todas las sensaciones que la serie anime despierta, misión que en ningún momento consigue.
La eleccion de los personajes ya es muy desafortunada, mostrando un Yagami Light totalmente desafortunado en su elección, interpretado por Tatsuya Fujiwara. En ningún momento se identifica con el inteligente, frio, egocéntrico, calculador, ambicioso y serio Yagami Light que podemos encontrar en la serie de animación. El shinigami Ryuk tampoco tiene excesivas coincidencias omitiendo muchos aspectos de su psicología que si podíamos ver en la serie de animación y que le daban gran personalidad. Nada de esto se transmite en la película.
Para sorpresa, el único que quizá se salva de todo este inadecuado reparto es L, el personaje que en un principio parecía más difícil de transportar a la realidad y que, si bien no es el mejor L posible tampoco es el peor, cosa que si que ocurre en el caso de Light.

La ausencia de una banda sonora a la altura del anime, el ritmo flojo durante toda la película en contraste con el vertiginoso que tiene la serie de animación y el ya mencionado fracasado reparto no consiguen compensar los interesantes cambios argumentales propuestos con respecto al anime.

Yo lo siento mucho por la gente que le guste la peli...pero yo la odio, en serio, cada vez que la veo me pena como los propios japoneses se han cargado su propia historia...
Para empezar parece una TV-movie con cambios de escenas luminosas a oscuras muy mal llevadas, parece que el director no conociera el significado de la palabra transición, y encima los actores son pésimos, exceptuando algunos y L un poco , son muy pésimos. El que mejor actúa en la peli es el shinigami Ryuk. Además está muy mal llevada la adaptación, para empezar hay pequeños detalles que me fastidian..como por ejemplo con lo cuidadoso y precavido que es Light en el anime y en la película es capaz de sacar la death note delante de medio Japón y el hecho de las caracterizaciones que no me gustan para nada.Light representa el orden y la justicia y en el anime viste formal y con corbata al contrario que la peli que parece una versión descafeinada de L y que decir también el mito erótico de Misa ,una japonesa rubia que en el film es morena, ese detalle lo dejo pasar pero para mi el pelo rubio de Misa significa la inocencia y la luz de un personaje sombrío que ayuda a un villano...

Bueno ya me he desahogado...buff...y...a todos los fans de la peli...lo siento mucho pero esta es mi opinión y que conste que el anime Death Note me encanta.

La primera adaptación del gran anime Death Note es bastante penosa y ridícula y deja mucho que desear. Lo primero es por la lamentable elección y actuación de los personages, vale que algunos se parecen físicamente o tienen un cierto aire a los personajes que representan respecto al anime, pero psicológicamente dejan todos mucho que desear. L, el que parecía mas difícil de plasmar en la película, debido a su frialdad y a eso vicios que le caracterizan tanto, es sin duda alguna el que lo hace mejor, no hace una gran actuación pero muchísimo mejor que Yagami Light. Yagami en cambio deja muchísimo que desear sobre todo aspectos típicos que le caracterizan tanto como su grandiosa inteligencia, que rara vez se plasma durante la película, su frialdad, la ambición que posee, la seriedad, lo egocéntrico calculador y precavido que llega a ser. Ryuk a pesar de estar hecho por ordenador podría haber quedado mejor, ya que se nota demasiado que esta hecho a por un programa informático, no se llega plasmar la autentica psicología de este, en ningún momento se ve esa carbonería que lleva dentro y que en el anime surge tantas veces, tampoco llega a verse ese ingenio que solo Ryuk tiene y que lo convierte en uno de los personajes mas divertidos y en la película rara vez se ve esa obsesión por comer manzanas. Respecto a Misa, que en el anime es rubia, un gran fallo es haber escogido a una actriz castaña, en no llega a plasmar el erotismo que plasma en el anime.

La segunda cosa que me ha decepcionado mucho es la gran tergiversación de datos que hay durante la película, la mayor parte de ellos son asesinatos que aun ser importantes y a la vez interesantes por la manera en que ocurren en el anime son cambiados para ahorrar tiempo y que daría lo mismo si no fuese porque algunos cambian bastante la historia. La banda sonora deja mucho que desear, podrían haber conservado la autentica pero la han cambiado y ha sido para peor. Se nota que esta película ha sido hecha mas bien para agrandar los bolsillos de los creadores que para los fans de Death Note ya que la mayoría se esperaban otra cosa de esta película, yo esperaba que fuese mala, pero no tanto.

Dos live-actions lanzados el mismo año de producción del anime Death Note, en pleno apogeo del mismo, a raíz de un exitoso manga. ¿Qué podía salir de aquí? Pues algo hecho rápido, para sacar pasta, sin apostar por un buen producto sino pensando únicamente en la pasta. Warner Bros. Japan, nada menos, produciendo y distribuyendo el film en tierras niponas -a España llega directa a DVD-, un considerable éxito en la taquilla del país y venga, dinerillo para los bolsillos.

El problema es que si bien hay gente que hace esto con cierto estilo, sin que la maniobra se note tanto (ahí tenemos al gran Akira Toriyama), otros no son capaces de ocultar las intenciones. Y la primera película de imagen real de Death Note es una muestra de cómo las prisas no son lo más apropiado, ni siquiera cuando la base de la que se dispone (un sublime manga/anime, de lo mejor hecho en las últimas décadas) no puede funcionar en el 'mundo real'. Irónico, sin duda, puesto que la mayor baza del anime es que la historia se desarrolla sin apenas elementos fantásticos, apostando por la intriga, siguiendo los pasos del thriller, adentrándose en la psicología de todos los personajes. Y claro, aquí tenemos una cinta de dos horas y media que tiene como objetivo resumir demasiados episodios. Y falla, pero además a lo bestia.

Tampoco ayuda que todo parezca un telefilm cutre del sábado por la tarde, con una dirección paupérrima, ni que el reparto sea tan lamentable. Lo único destacable -y a duras penas- es la recreación de Ryuk y, eso sí, pequeños destellos de grandeza que aparecen muy de vez en cuando, todos ellos originarios de la obra original, eso sí. Si sois fans del anime, más os valdría ahorraros esta gilipollez de película. Cuenta lo mismo pero mal, así que ni siquiera tiene el plus de interés que hacía que "L: Change the World" fuese una tontería olvidable pero, al menos, curiosa.