Hombres de negro 3

Muy grata mi sorpresa tras visionar la tercera entrega de los Hombres de Negro. Y digo grata porque tras su última y decepcionante secuela en 2002 y tras el anuncio de que gente como Justin Bieber o Lady Gaga aparecerían en esta película no sabía muy bien qué esperar. Sin embargo todas estas dudas se han ido disipando nada más avanzar el metraje.

En primer lugar ofrece lo que uno quiere ver, y eso es un punto muy a su favor. Will Smith es amo y señor de la película desde su inicio hasta el fin. Si bien no destaca por unas dotes interpretativas apabullantes, Smith sabe administrar perfectamente su carisma e histrionismo y eso (nos) hace caer en gracia. Por desgracia el gran Tommy Lee Jones apenas aparece en la película; algo lógico teniendo en cuenta que un K tan mayor (con todos mis respetos, señor Jones) no podría ser el mismo dentro de las oficinas del MIB ni combatiendo contra extraterrestres por todo Nueva York, por lo que es sabiamente reemplazado por un Josh Brolin ("No es país para viejos") que cumple con creces y que protagoniza algunos de los mejores momentos del filme. Inteligente es -no cabe duda- el viaje en el tiempo que nos propone el guión, ya que de otra manera no habría encajado la introducción del K Jones en escena, y éso constituye en mi opinión uno de los mayores aciertos de MIB III, poniendo al alcance del espectador la atmósfera que podríamos contemplar perfectamente en cualquier película de finales de los 90 o principios del 2000, recordando así en muchos momentos a la primera entrega de los Men In Black (la mejor hasta la fecha, sin lugar a dudas).

Sin embargo esto no supone un impedimento para seguir gozando de las habituales misiones de los MIB controlando la actividad extraterrestre ilegal, así como de los magníficos efectos especiales o CGI (aunque a veces recargados) que potencian y de qué manera la película como espectáculo visual. Tampoco nos olvidemos de la fenomenal banda sonora original de Danny Elfman; una música tan poco ligada a excesos como fácil de asociar. Eso sí, espero que me perdonen cuando diga que Pitbull ha interpretado un tema horrible para la ocasión. Sobre todo si tenemos en cuenta los temas de las dos anteriores entregas a cargo del propio Will Smith, que si bien no eran para ganar un Grammy sí eran pegadizos, y gozaban de unos videoclips realmente buenos. En fin, los años pasan para todos, y puede que el mismo Smith ya pidiera un relevo en ese sentido.

Continúo en "spoiler".

Esta película se sustenta casi en su totalidad (que no es poco) en el magistral espíritu cómico del tío Smith. La historia (aunque cogida por los pelos) tampoco desmerece ya que no podemos esperar un argumento de demasiada altura en una epopeya de la ciencia ficción cómica como esta. Los efectos especiales buenos, a la altura de lo esperado en estos días y ademas el desenlace nos regala una pequeña sorpresa muy agradecida. El conjunto es una buena película de acción scifi con sólidos toques cómicos que la hacen muy disfrutable. SI encima eres fan de la franquicia como yo... pues que mas decir. Te lo pasas pipa.

• Consideraciones NO alienígenas a tener en cuenta:

— El tema principal es de Pitbull.

— Confirman que Lady Gaga, Justin Bieber y Tim Burton no son de este mundo. ¡Ya sabíamos que venían de Raticulín!

— Esto no es ‘Men in Black’: el tono de las películas anteriores de Barry Sonnenfeld, que adaptan los cómics de Lowell Cunningham, era socarrón sin tomarse en serio a sí mismas.

— Es cierto que “Toy Story 3” ha hecho mucho daño a las terceras partes. Ahora hay que llevarse un paquete de kleenex si el título de la película (cuasi) acaba con un ‘3’. ¡Y encima Spielberg quiere celebrar el aniversario de “E.T., el extraterrestre”! ¿¡No se han dado cuenta que es un engorro secarse las lágrimas con las gafas en 3D y quedarse ciego!?

— Tommy Lee Jones está muy ‘viejuno’ y su cara es un poema: arrugas aglutinadas, palidez extrema y unos ojos extraños. Como si hubieran tenido quitar un kilo de carne de esa zona para que pudiera ver. No sé si será el motivo por el que se haya decidido a darle ‘carpetazo’ y dejar que el cuarentón de Josh Brolin (en el papel de un joven K que no llega a la treintena) se encargue de ser la pareja de Smith con carácter de perpetuar la franquicia si se reactiva en el futuro. Nadie quiere ver a Tommy Lee Jones con andador en “Men in Black 4” y pañales. Nadie.

— Tampoco que esperen mucho para rodarla porque la juventud actual ve a Will Smith como el candidato para los papeles de Morgan Freeman. En breve Jaden Smith empieza a birlarle sus papeles. Tiempo al tiempo.

— ¿¡Cómo va a salvar el mundo un negro en EEUU en 1969!?


• Una vez despejadas las reticencias:

Muchos guiños a las anteriores (en especial a Frank El Perro) en un triple órdago y desafío a los espectadores y seguidores de la hasta trilogía: un salto mortal al vacio, a vida o muerte, en el que se establezca un sentido global a todo lo vivido anteriormente. Un hombre sabio nos avisa: no hay que hacer preguntas cuando no quieres saber las respuestas. ¿O era aquello de no hay que hacer preguntas que no tienen respuesta?


• La considero una película digna de ver por tres motivos:

1) Me encanta cómo han mostrado el mundillo contracultural neoyorkino y el homenaje, en esos diseños metálicos de pasarela, a “Who Are You, Polly Maggoo?”.

2) Se reivindica el Cola Cao sin llamarlo Cola Cao. Y queda muy bien eso de escuchar ‘Empire State of Mind’ de Jay-Z con Alicia Keys mientras te comes una tarta

3) Por fin alguien en este universo explica por qué Andy Warhol fue un genio. Ya era hora que se dijeran todas las verdades sobre esas películas que la gente odia injustamente, ese arte pop que nunca ha pasado de moda y pensaba tanto en la dilatación temporal (y anal).

Si no tienes muy fresco que era lo que se sentía cuando ibas a ver entretenimiento sin pretensiones a finales de los noventa, la peli se deja ver.

Simplemente son esquemas repetidos y tópicos bien remozados que mal que bien, acaban funcionando y un par de curiosos detalles (lo de The Factory es un puntazo) que la hacen por lo menos, digna.

Su enternecedor propósito de contar incluso una historia articulada entre tanta pelea extraterrestre y el chocarrero humor de colegas que tan buenos réditos ha dado en el cine comercial americano la deja entrar por los pelos en la categoría de "potable".

En caso de huir al cine buscando un poco de aire acondicionado por lo menos echarás un buen rato.

Ese incontrolable deseo de estirar las franquicias no se ha ido. Habría que hacer un pequeño recuento de cuentas ideas "originales" se llevarán al cine este año. Todo es "inspirado, basado, o tomado" de alguna serie de TV, película antigua o del mundo del cómic (sin mencionar libros y otros menesteres).

Así que estamos saturados, sencillamente saturados. Por eso la propuesta de una tercera parte de MIB suena a refrito, a seguir la tendencia, en una palabra a hastiar.

Pero que sucede? bueno de vez en cuando aparece alguna de todas esas ideas gastadas con brillo propio. La crítica se siente al menos satisfecha y el público responde con su boleto del cine en la mano.

Algo parecido a lo anterior sucede con MIB 3, es un refrito, pero con los suficientes elementos y la mezcla justa para hacer algo "fresco" y entretenido.

El asunto de los viajes en el tiempo, un poco de la estética de los años 60`s y chistes que en general embonan muy bien.

No hay mucho más que decir, salvo que está me gusto más que la segunda y se queda cerca de la primera. Se pueden hacer productos de entretenimiento y vehículos de lucimiento que no generen decepción y se agradece.

En resumen, poco argumento, muchos efectos especiales, momentos graciosos y entretenimiento, sencillo y directo al punto. Pero luego de diez años el resultado vale la pena y no creo que decepcione a nadie que conozca de forma mínima el producto ya ofrecido dos veces antes.

7.