Como en toda película dividida en episodios, el tono general varía. Personalmente me ha encantado el de Roma, con un Benigni expresivo y espléndido, con un diálogo consigo mismo majestuoso que recomiendo fervientemente, con su Zucca, su Peccorina y su cuñada Mónica incluidas.

El de Nueva York también es divertido, por la expresividad del americano y la inexpresividad del taxista de Europa del Este y los divertidos chascarrillos entre ellos.

En el de París, la protagonista es curiosa por lo insólito del personaje, pero lo mejor de ese episodio me parecen los dos clientes cameruneses.

El episodio de Winona Ryder me ha parecido bastante soso, aunque cuenta con un par de frases ingeniosas y el de Finlandia, muy frío, trata de llegar al espectador para enternecerlo, pero por lo menos en mi caso, no lo consigue.

De todas formas, la película es curiosa por su argumento, y aunque sencilla, bastante buena en lo que a recursos técnicos se refiere. No soy demasiado devoto de Jarmusch pero la película es bastante recomendable.

anto_laelastica