¿De verdad alguien que va al cine buscando un guion espectacular, sin fallos y a la altura de los grandes clásicos se mete a ver Godzilla? Por favor, que es una película de MONSTRUOS GIGANTES QUE SE PELEAN. ¿Qué guion queréis? Si lo que uno busca es un buen guion, lo último que debería hacer es pagar una entrada para ver Godzilla. Hay decenas de películas para ello.

Cuando yo voy a ver Godzilla el guion es lo que menos me importa. Lo que busco es acción trepidante, entretenimiento y buenos efectos especiales. Y eso es exactamente lo que ofrece esta película. Por ello le doy un 9, ya que no decepciona en ningún momento. Esta secuela compensa con creces la falta de acción de la de 2014. En definitiva, ofrece todo lo que uno puede esperar de una película de estas características.

Apenas ayer por la noche regresé del cine y todavía tengo la imagen en mi cabeza de un Godzilla que es muy difícilmente olvidable. No sólo hablo del rey de los monstruos, que sin duda ha sido recreado de una manera sublime en esta nueva versión, con características impactantes como su brutal rugido, sino de la película en general.

El ritmo del film es muy bueno, con una perfecta introducción donde se deja todo claro, si bien es cierto que a veces se puede sentir que te cortan el rollo a punto de que se produzca algún momentazo. Sin embargo, Gareth Edwards se reserva esa intensidad que no nos deja vivir cien por cien a lo largo de la película para el final: TENSIÓN EN ESTADO PURO. Tanto así que probablemente recuerde los últimos mínutos de la película durante mucho mucho tiempo.

En cuanto a los efectos visuales, me animo a decir que han sido el plato más fuerte del largometraje. En varias escenas, me sentí abrumado ante la espectacularidad que apreciaban mis ojos. Es fácil meterte de lleno en los momentos de acción, tanto que quedarse sin palabras es poco. Y es que aunque quizá muchos critiquen que a la película le faltaba acción, en los momentos en los que la había, ésta era tan abrumadora que quedas totalmente satisfecho.

También es digno de mención la atmósferas un tanto siniestras en las que se desarrollan las escenas. Esto, unido a la forma en que se desarrolla la película, en la que muchas veces parece que la gran batalla final va a comenzar, pero no es así, crean una tensión constante que te hace vivir la película con una adrenalina impresionante.

En definitiva, me pareció una película bastante buena, con personajes casi perfectos. Con ese casi me refiero a los humanos, pues por más que pienso, me resulta imposible encontrar un fallo para la creación tanto de los MUTOS (es la primera vez que unos monstruos de película casi me dan miedo) como el protagonista: Godzilla.

Lo mejor: que aunque sea una película tan fantástica, está tan bien lograda que hace que te lo creas y que lo vivas con una tensión difícil de conseguir. Y, sobre todo, Godzilla, sin duda el Godzilla más auténtico de todos los tiempos.
Lo peor: en el spoiler

Érase una vez, unos buenos amigos, con una botella de tequila ya entre pecho y espalda, comenzaron a divagar:

+ Oye, he tenido una idea. ¿Por qué no hacemos un blockbuster para este verano? Y nos forramos.
- Guay, me encanta. ¿Has pensado en algo?
+ Sí, se me ha ocurrido hacer una peli sobre un edificio en llamas.
- No lo veo. Eso ya está muy visto y ese tipo de pelis suelen ser de serie B y si llegan a los cines no suelen tener éxito.
+ Ahí está la gracia: vamos a hacer algo ya muy visto pero con una vuelta de tuercas para que la gente salga flipando del cine. Por ejemplo, el edificio. Vamos a hacerlo mega futurista, cinco veces más alto que el Empire State, con una última planta que se hace invisible y parece que vueles y con un parque de treinta plantas.
- Dios, qué pasada. Un poco surrealista, pero bueno. ¿Y por qué se produciría el fuego? Porque la idea de un cortocircuito está ya muy trillada.
+ Eso da igual. Invéntate cualquier excusa de mierda y la pones en el guion, pero que se explique rapidito, si no se entiende muy bien no importa, que a la gente le da lo mismo por qué se incendie. La gente lo que quiere es verlo en llamas y mucha acción. Aquí solo importa la pasta.
- Perfecto. Luego cuando vaya al baño apunto la primera tontería que se me ocurra. Oye, ¿y si ponemos a Dwayne Johnson de protagonista? Ese hombre tira mucho y suele hacer muchas películas absurdas.
+ ¡¡Me encanta!! Pero vamos a meter ahí también cosas originales. Lo vamos a hacer cojo y lo vamos a poner a escalar el edificio, y eso lo metemos en el trailer, que eso vende.
- ¿No te parece demasiado eso? ¿Cómo justificamos ese disparate?
+ Pues igual que antes, con cualquier excusa de mierda. Te pierdes en los detalles. Recuerda: money money.
- Ok. También podemos meter a una mala muy mala que pegue mejor que un maestro de kung fu, que eso gusta también.
+ Guay, pon eso, copia también todos los clichés que encuentres y listo, ya tenemos película. Y la podemos llamar el rascacielos, como va de un rascacielos, no nos vamos a complicar mucho más, que ya hemos pensado mucho por hoy.
- Hecho. Habemus peli.

Y así es como se creó esta película. No le pongo menos nota porque sí tiene algo bueno: es corta.

No sabía muy bien qué esperar de "guardianes de la galaxia" antes de ir a verla. No me había hecho ninguna idea y ello llevó a sorprenderme gratamente.

No es una película más de superhéroes. Es una película de auténtica ciencia ficción, con unos personajes tan extraños como indescriptibles. El quinteto más singular alguna vez visto en la gran pantalla. Lo que tampoco esperaba era que una película de Marvel pudiera hacer reír tanto. Nunca había visto una película con un humor tan inteligente, y menos una de ciencia ficción. Incluso en los momentos de máxima tensión, se intercalan perfectamente unos toques de humor que, lejos de resultar incoherentes y absurdos (lo cual era muy fácil) te hace olvidar de la tensión de la escena y soltar una carcajada. Particularmente, Rocket y Groot los mejores para mí. No obstante, prácticamente todos los personajes son brillantes. Imposible no cogerles cariño a estos "simpáticos" guardianes y odio a los villanos.

Los efectos especiales, como nos tiene acostumbrado Marvel, muy muy buenos, así como el guión. Una historia bien cuidada, no demasiado original, pero nada absurda como sucede en muchas ocasiones.

En definitiva, para mí, lo mejor de la película, el humor. Si quieres ver buenos efectos especiales, reírte a carcajadas, ver unos personajes que se hacen de querer y si te gusta la ciencia ficción esta es tu película.

¡¡¡¡¡¡Y sobre todo, quedaos hasta el FINAL de los créditos!!!!!

He visionado esta cinta, desde aquel lejano 2005, cientos de veces y siempre la he disfrutado con la misma intensidad. La película dura tres horas y cada una supone una parte, todas magistralmente ejecutadas.

En la primera no hay acción, pero hay magia, suspense, temor. Se trabaja de una manera perfecta para que el espectador disfrute esta primera hora y a la vez esté ansioso e impaciente por saber qué acontecerá tras la llegada a la isla, la cual se envuelve de un misterio y un suspense que sobrecogen a cualquiera. En el fondo sabes qué pronto verás cosas espectaculares en este film, y así es.

La llegada a la isla y la aparición de King Kong es sencillamente perfecta. Suspense, terror, grandiosidad, acción. Son escenas que se graban en la retina de por vida.

La segunda hora es un derroche de efectos especiales también perfectos, como toda la cinta. Abrumadores, sobrecogedores, sublimes. En el spoiler añado algo más sobre esto.

Y finalmente la última hora tiene una magia muy especial. No tanta acción, pero una magia preciosa en New York, con escenas maravillosas y difícilmente olvidables.

Ahora bien, muchos critican fallos en el guión: cómo meten a King Kong en el barco, qué pasa con la tribu, etc. Estamos ante una cinta de aventuras, en las cuales es casi imposible no cometer fallos en el guión porque todo es mentira. No existen gorilas gigantes, ni dinosaurios; ¿Qué más dan entonces esos fallos si la película cumple sobradamente su objetivo? Hacer pasar al espectador tres horas que nunca olvidará, gracias a la majestuosidad y grandiosidad de toda la cinta, a la que no le falta nada. Puedes reir, llorar, abrumarte, sobrecogerte, sufrir, pasar miedo, etc. Todo ello en una misma cinta hace que ésta sea lo que adelanté en el título de esta crítica: una obra maestra indiscutible.

En definitiva, las tres horas de metraje pasan volando, Todas y cada una de las escenas son totalmente necesarias, así como el remake en sí. Es difícil que un remake de un gran clásico sea necesario, pero éste lo es y de sobra, tanto que si a otro director se le ocurre hacer otra versión del gorila en años venideros, es prácticamente seguro que estará condenada al fracaso. King Kong de Peter Jackson deja el listón muy alto. Y no solo alto, sino insuperable.