.. y eso es todo, no hay más. Bueno sí, hay sangraza para dar y tomar pero sin mucha casquería (es como muy "líquido", mucha diarrea roja pero sin garbanzuelos), piruetas acrobáticas de karatekas repeinados (de esos que tienen una mano que cuando la mueven hace ruido, fushh, rushhh, shummm, guaka), zombies que mueren de manera aleatoria (a veces con un disparo y otras con 30), y muchas miradas..., la mitad de la peli se la pasan mirándose unos a otros ¿pero qué miráis tontos del culo?
En fin, si te gusta la mezcla Zombie + Kunfú + Tiros + Sangre, en un contexto Japo sin sentido, esta es tu peli. Yo no la he terminado de ver, es que pasaban los anuncios de Antenas3 y me han enganchado... ¡Menudo TRUÑO!

Bueno, está bien producida, la ambientación mola, tiene algunos momentos de tensión y un desenlace original que no tiene nada que ver con las pelis apocalípticas de zombis cansinos. No es una ensalada de vísceras, tampoco hay encéfalos pisoteados y no veremos arrancadas de bazo pero.., ¡Resulta cuando menos estimulante! Incluso es posible, en un momento dado, que adquieras una nueva perspectiva sobre el género (lo cual ya es difícil, teniendo en cuenta las toneladas de zombies que han animado nuestras vidas desde la más tierna infancia). Me parece un buen complemento para Extinction, peli con zombies de corte similar aunque con una orientación distinta.
Recomendable. No me arrepiento de haberla visto.

La película está bien, es bonita y trágica al mismo tiempo, con una banda sonora agradable, una película que se recrea en cada uno de los personajes y en el dramatismo de la situación (ocultar a la comunidad donde vives que eres caníbal, tiene que ser duro, sobre todo si eres un crío...), pues es precisamente ese "bien hacer" lo que no me ha gustado, quizá porque vi primero la versión original mexicana, que tiene mucho más ritmo y acción. En el remake todo fluye más despacio, con más detalle y eso me resulta lento, me aburre. Por tanto, es simplemente una cuestión de estilos y de gustos personales lo que valoro. Me gusta como interpretan las niñas su papel y la lucha del padre, anacrónico, por mantener a su familia " a salvo". Creo que es de esas pelis que te gustan más cuando la ves por segunda vez.

Primera película de una serie de tres, sobre los horrores que padecieron los habitantes del NO de China durante la invasión japonesa.
Tenía ganas de verla porque había leído críticas muy buenas en todos los sentidos, tanto como película como por sus enfermizos contenidos, y la verdad que me ha desilusionado en ambos aspectos. En el primero no me importa tanto, ya que no soy un amante del cine asiático, pero en lo que a contenidos macabros se refiere..., una de dos, o ya estoy demasiado curtido o es muy flojita. Sólo hay un par de congelaciones, dos o tres destripes y un despellejamiento. En fin, hay que verla.., y que cada cual juzgue, para mi es leeeenta. Lo que realmente genera repulsa es lo rudimentario de su puesta en escena. Quizá esa simplicidad sea su mejor aliada.

Una pandilla de activistas yanquis, defensores del derecho de los indígenas amazónicos a maquillarse como les salga del nabo, se van a la selva a detener el avance de una explotación maderera que pone en peligro las tribus del interior. Al volver, se pegan un chorrazo con la avioneta y son capturados por una tribu de caníbales.
Bueno, aquí el guión y todo eso nos da igual, porque lo único que queremos es ¡VER TRIPAS¡. El caso es que a pesar de que las arrancadas de brazos, frituras de escroto, adobo de riñones y rebozadas de culo están muy logradas, ni es tan desagradable y repulsiva como anunciaban, ni tan caústica y mordiente como sí lo fue su predecesora. Quizá porque en la de Roth, la calidad de la grabación y los fantásticos efectos, restan curiosamente autenticidad al eliminar ese tufo a cutrez de la original. A pesar de todo tiene repuntes interesantes, ¡jaja!, indígenas salpimentando costillas, la cagalera de una de las víctimas y unos cuantos detallazos más que al final consiguen que, la peli, se deje comer.