Haz click aquí para copiar la URL
España España · Barcelona
Voto de El Criticón:
6
Thriller. Intriga Nico Albert es un adolescente de carácter muy peculiar, inteligencia excepcional y una única obsesión: el ajedrez. Sus padres, preocupados por la anómala actitud de su hijo, contratan al psicólogo infantil Julio Beltrán. A través de la terapia y de la afición común al ajedrez, Julio se adentrará en el inquietante mundo de Nico y en las complejas relaciones de esta familia aparentemente normal. (FILMAFFINITY)
23 de noviembre de 2013
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Para ser una película de un director novel, “Hijo de Caín” es sorprendentemente sólida en cuanto al lenguaje cinematográfico que utiliza y como lo utiliza para empujar al espectador. Es maniqueista, de acuerdo, pero cuando nos manipulan con gracia, nos dejamos. El sexo anal con vaselina duele menos. O al menos eso dicen. En “Hijo de Caín” hay mucha vaselina y eso hace que esta historia de “niño malo” que hemos visto muchas veces antes, ahora nos entre mejor y no duela lo más mínimo (e incluso creamos que estamos disfrutando). El único defecto de “Hijo de Caín” es un desenlace demasiado efectista y una concesión a aquello de lo que la película huye en su metraje (no deja de ser una traición al espíritu de la película) pero esta concesión no defraudará al espectador pues es lo suficientemente sorprendente para dejarle con un buen sabor de boca. Al fin y al cabo eso es lo que importa ¿no? Que salgamos del cine diciendo “no está mal”. “Hijo de Caín” contiene en su interior suficientes sorpresas (algunas buenas, otras no tanto) para enganchar al espectador y la solvencia de los actores consigue que la historia avance incluso cuando se queda parada. Jose Coronado vuelve a hacer lo de siempre, o ser encantador o ser un cabrón, no tiene más registros en su más que demostrada incapacidad actoral, pero aquí funciona porque es una historia donde las emociones se pintan en blanco y negro, no hay término medio. Julio Manrique y Maria Molins cumplen lo que se pide de ellos. Mención especial al joven David Solans sobre el que recae gran parte del peso de la película y resuelve sus escenas con sorprendente facilidad y una estupenda capacidad para transmitir mas frialdad que una nevera que lleva diez años sin descongelar. ¿Es buena “Hijo de Caín”? No es mala, que ya es mucho, y es mejor que muchas películas de hoy en día. Dadle una oportunidad, no os defraudará.
El Criticón
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow