Haz click aquí para copiar la URL
Cuba Cuba · Guanabacoa
Voto de Kingo:
10
Drama. Romance Años 40. A consecuencia de la Segunda Guerra Mundial, Casablanca era una ciudad a la que llegaban huyendo del nazismo gente de todas partes: llegar era fácil, pero salir era casi imposible, especialmente si el nombre del fugitivo figuraba en las listas de la Gestapo, que presionaba a la autoridades francesas al mando del corrupto inspector Renault. En este caso, el objetivo de la policía secreta alemana es el líder checo y héroe de la ... [+]
17 de julio de 2006
166 de 204 usuarios han encontrado esta crítica útil
Lamento estar en desacuerdo, una vez más, con señores como Txarly a los que me encanta leer por la falta de tapujos con la que se expresan. Si, señor: la sinceridad por delante.
Aunque comulgo completamente con su idea de que Humphrey y la Bergman se muestran más asco que amor, eso es precisamente lo que más me gusta de esta película. Para mí, se nos muestra a un tipo que se enamora de la persona equivocada y que, tras un desengaño de los que duelen, decide reinventar su vida tirando del lado duro-patético. Es un tipo que ya sabe que lo suyo no es el tener a su lado a la mujer a la que quiere, pero aún así es capaz de hacer el último sacrificio por ella... o quizás lo que hace, en realidad, es enterrar de una vez los fantasmas del pasado. Yo siempre me quedo con esa segunda opción.
Así que mi impresión es que es una peli del todo realista, sobre un personaje que se sabe solo, pero que en el fondo no quiere estarlo. Como tantos y tantos millones de personas hay y habrán en este mundo. Rick se sabe un perdedor, y ante la disyuntiva de irse con su amada -arriesgándose a que ella le vuelva a plantar por algún otro tipo carismático-, o borrarla de sus recuerdos sintiéndose, además, como un héroe por hacerlo, opta por lo segundo y se larga a vivir su vida de perdedor, sintiéndose bien al ayudar a otros perdedores -de los que se ha rodeado-, dejándose de ideologías y otras monsergas, y demostrándose a sí mismo que es más fuerte que el revolucionario, que está dispuesto a morír por una idea, mientras él es capaz de vivír sabiendo que su vida siempre estará vacía, lo cual es muchísimo más duro.
Una hermosa crónica del desamor, aliñada con frases célebres -aunque, según mi opinión, mal entendidas- una canción preciosa y una fotografía excelente, hacen lo que es -siempre según mi opinión- el retrato del fracasado con más amor propio que jamás haya inventado el cine.
Kingo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow