Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Antonio Blovk:
8
Drama Ambientada en 1953, narra el enfrentamiento real que, en defensa del periodismo independiente, mantuvieron el famoso periodista y presentador de la CBS Edward R. Murrow (David Strathairn) y su productor Fred Friendly (George Clooney) contra el poderoso senador anticomunista Joseph McCarthy, hecho que determinó el final de la "caza de brujas". (FILMAFFINITY)
2 de junio de 2006
24 de 26 usuarios han encontrado esta crítica útil
El director de cine es el máximo responsable de una película. Es la persona que tiene la última decisión sobre como deben hacerse las cosas, sobre que es lo que se pone y que es lo que se deja fuera. Se rodea de un equipo de colaboradores, pero en última instancia es él, según su propio gusto, quién convierte un material químico en magia. O al menos así ocurre en el llamado cine de autor, aquel que dota de libertad a los directores, y del que la obra que nos ocupa forma parte. El director de Buenas Noches y Buena Suerte es George Clooney, uno de las estrellas del firmamento hollywoodiense y uno de los hombres más deseados según revelan encuestas aparecidas en revistas dirigidas al público femenino. Pero con esta cinta ha logrado ser mucho más que todas esas nimiedades, y se ha convertido en uno de los realizadores más interesantes del actual panorama cinematográfico norteamericano.
Y es que si por algo destaca esta película es precisamente por su dirección, por esas elecciones de las que hablaba, que pueden hacer que algo sea arte en mayúsculas o simplemente un producto más. Como muestras, la elección del blanco y negro (que hace imposible imaginarse la película de otra forma) o el casting, lleno de rostros habitualmente alejados de los flashes pero con una experiencia y una entereza interpretativa admirables (atención al estelar protagonista David Strathairn). También es verdad que la película está invadida por una cierta frialdad, lo que impide que se convierta en obra maestra, pero son tantos los elementos a destacar que es difícil parar. Acertadísimos planos y movimientos de cámara, que recogen perfectamente el ambiente que se vive en la redacción de un informativo televisivo; excelente y elegante música de jazz, interpretada además de forma sincrónica (algo poco usual) y que sirve maravillosamente para situarnos en la época en que transcurre la acción.
Pero si hay algo destacable en Buenas Noches y Buena Suerte (mucho más que el hecho de que Clooney esté siguiendo los pasos de gente como Gibson, Costner o el maestro Eastwood) es que se están tratando temas de tremenda importancia, como puedan ser la falta de libertad o la injusticia. Eran asuntos palpables en aquellos tiempos de dirigentes nefastos en la tierra de la abundancia y de los sueños. Pero no debemos engañarnos. Se ha dicho que esta película sería recibida con frialdad en países como el nuestro porque digamos que “nos pilla lejos”. Pero una afirmación como esa debería estar muy alejada de la realidad y es que, no hemos aprendido la lección. Lo que hizo el periodista Edward Murrow no puede tomarse como algo lejano, debe servir de referencia.
Antonio Blovk
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow