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Voto de Havezethario:
5
Animación. Aventuras. Comedia. Infantil Rayo McQueen y su amigo, la grúa Mate, viajan al extranjero para participar en el primer Campeonato Mundial en el que se decidirá cuál es el coche más rápido del planeta. La primera escala es Tokio (Japón), donde Mate tendrá que convertirse en un espía secreto al verse envuelto inesperadamente en un caso de espionaje internacional, que lo llevará a París y a Londres. También vivirán una aventura de proporciones épicas al viajar a Porto ... [+]
21 de diciembre de 2011
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Creo que Pixar acaba de lograrlo: hacer una película única y exclusivamente para niños.

En mi opinión, la primera de "Cars" no fue tan horrenda como muchos la pusieron. De hecho, me parece una película bastante mejor que la mayoría de las que nos trae Dreamworks año tras año, y no creo que le faltara emotividad. Lo que sí le faltaba era un poco más de chispa y un poco menos de infantilismo.

Y es que es triste, muy triste, que Pixar se tropiece hasta hacer una película que parece más digna de Dreamworks, una película que se limita a sumar, que no mejorar, una franquicia. Una película que prescinde de bandas sonoras (aún cuando en Pixar trabajan compositores como Randy Newman o Michael Giaccino) para tirar de publicidad discográfica. Una película que se limite a parodiar un género cinematográfico y no vaya más allá en nada, ni en ideas, ni en sorpresas, ni en intentar tocar la emoción del espectador... y encima, para colmo, no tenga especial gracia.

Sí, las de Dreamworks suelen ser más divertidas. Y es que aquí, Pixar ha obviado prácticamente todo aquello en lo que suele triunfar sobre otros estudios de animación.

Tengo que reconocer que ví esta película con ciertos prejuicios y no quisiera discriminarla por "separarse de un patrón". De hecho, mentiría si dijera que no es una película entretenida y que no tiene un comienzo estupendo (esa misión imposible realizada por Finn McMisil, doblado por Michael Caine, trepidante como pocas), y que además está magníficamente animada.
De hecho, Pixar tuvo mucho ingenio diseñando este enorme universo de coches, aviones y barcos vivientes, y en esta secuela se aprovecha al máximo.
Y yo ví esta película de forma interrumpida, a trozos, y aún así la terminé. Sólo por eso le doy cierto mérito, y porque más que una película con fallos concretos, es una película para la cual quizá yo nof uera un público adecuado, o la cosaión no fuera buena...

Si estos tipos han logrado hacer películas tan divertidas, trepidantes, emotivas y electrizantes con juguetes, peces, monstruos y casas con globos, ¿por qué no habrán podido ahcerlo con vehículos vivientes? Pues porque se tomaron un respiro con ésta. Tienen derecho. Ya hace mucho tiempo que Disney les presiona pidiéndoles que conviertan sus películas en franquicias aprovechables y quizá tengamos suerte de que ésto sólo se haya hecho, de momento, con su película menos apreciada.
Havezethario
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