Haz click aquí para copiar la URL
España España · MADRID
Voto de ELZIETE:
9
Western Western ambientado en la América pionera sobre las relaciones que se establecen entre Cole Harden, un vaquero honesto, y Roy Bean, un juez caprichoso y de singular moralidad. Notable duelo interpretativo que le valió el Óscar al gran Walter Brennan. (FILMAFFINITY)
12 de septiembre de 2012
8 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
Wyller estaba a sus 39 años en plena madurez profesional, no diremos que en su mejor momento porque no recuerdo un momento malo. Aquí vuelve a dar una lección magistral de cine, compendiando el genero del Western pasado, presente y futuro sobre la base de apenas unos apuntes sobre el personaje real del Juez Roy Bean que compró Goldwing y que Niven Bush supo convertir en una trama coherente alejada de la realidad histórica de famoso juez.

Cooper, ya estrella consagrada acepta compartir protagonismo con reticencias con su amigo de tiempos pasados Walter Brennan que al final se lo roba, componiendo un personaje entrañable y patético, odioso y querido a partes iguales.

Wyller mezcla de todo y lo hace con el ritmo y proporciones justas. Hay comedia de la buena con unos excelentes diálogos de Jo Swerling, propiciando una mano a mano entre Cooper y Brennan, donde se nota su compenetración más allá de la pantalla y que para mi es de lo mejor de la cinta. Pero también hay acción, drama, lirismo y recital de planos a la carta, cambios de ritmo, espectacularidad y tensión como para quitarse el sombrero. Desde esplendidas cabalgadas a infinidad de pequeños detalles sobre todo de comedia deliciosos (el enterrador, el aseo de Cooper, la graduación del whisky).

Sin olvidar el entramado de fondo donde la lucha perenne entre granjeros y ganaderos por un estilo y modelo de vida cobra su dramatismo en una tierra donde la justicia apenas era una caricatura representada por gentes que fueron mucho más arbitrarios, crueles y despiadados que el propio Roy Bean, apodado el "Juez de los ahorcados" cuando no hay constancia que Bean ahorcase a nadie.

Su pasión por la actriz Lilly Langtry a la que nunca llegó a conocer le confiere un aire de romanticismo ideal para la leyenda.

Por si todo ello fuera poco Greg Tolland se hace cargo de la fotografía aumentando su propia leyenda.

Y como anécdota final vemos a Doris Davenport, cuyo nombre en algunos carteles desaparece en favor de un Dana Andrews irrelevante en la cinta, interpretando una escena que nos remite a la Scarlett de "Lo que el viento se llevó", para cuyo papel quedó finalista y que pudo cambiar su destino. Al final no pasó del protagonismo femenino de esta cinta.

Brennan se llevó el Oscar (tercero de su carrera) arrebatandoselo a James Stephenson nominado por la otra película de Wyller ese año, "La carta" con nada menos que siete nominaciones. Y es que Wyller no paraba.
ELZIETE
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow