Ole, peliculón donde los haya de principio a fin y de fin a principio, Oh my god , que ritmo tan trepidante, las calles se desalojan para que los jóvenes bailen de forma desenfrenada para arreglar sus problemas. Y es que ¿que humano no arregla los problemas así? Que te dice el del banco que estas en números rojos le montas un pollo en plan Chayanne y se caga el tío, que tu mujer te la pega con otro marcate un bailoteo y veras que no debió inmiscuirse en tu vida.
Ya metiéndonos en la película cabe destacar esa bonita unión entre dos grupos enfrentados por subsistir en el duro mundo de los animadores/as. Lo mejor de la película es cuando combinan sus vestimentas para hacer una sola vestimenta, es algo significativo, me quedo con la frase que dice “Esta cañón, me comería sus abdominales “para que decir mas filosofía barata, resume esta genial película.
El director de esta película minimalista y de difícil clasificación,ha sido tachado junto a su compadre Lars Von Trier de provocador. Steve Rash famoso por otras películas mas transgresoras como “uff esta vez si compadre”, “Yo, yo mismo y Mamel el bobo”, y como no su opera prima “a por casi todas, alguna tendremos que perder” aunque su titulo original es “I can't more”, con un final sobrecogedor.
Hay que reseñar que este film cuenta con la interpretación de Michael Copon, que decir de este joven aunque prometedor actor, su apellido nos indica el grado interpretativo que tiene. El tiempo lo pondrá en lugar que le pertenece ( empleado del mes de burguer king)
También actuá el ahijado de Morgan Freeman, que si tiene la suerte de su padrino saldrá en todas las producciones norteamericanas de aquí al año 2079 ( a la baja)