A mí Nolan me sobrepasa. Juega tanto con el espectador, tanto quiere abarcar y tanto nos quiere enseñar de su indudable talento que me resulta como el clásico guaperas pedante al que sin abrir la boca ya le tienes cierta manía. Sin duda, un guión envolvente, muy inteligente, hace que toda la película gire en torno al interés de qué le va a pasar, qué le pasó y por qué y cuándo le ocurrió todo lo que creemos que le pasó a un protagonista al que interpreta un solvente Guy Pearce. Por lo demás, la confusión de la trama y la excesiva duración y reiteración de los momentos que se viven en cascada una y otra vez, acaban por cansar un tanto al espectador. Al menos a mí. Si DUNKERKE no es la mejor película bélica ni INTERSTELLAR la mejor película de ciencia ficción, amigo Nolan, esta película no es el mejor thriller de la historia tampoco.