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4
Terror Año 1838. En la ciudad de Wisborg viven felices el joven Hutter y su mujer Ellen, hasta que el oscuro agente inmobiliario Knock decide enviar a Hutter a Transilvania para cerrar un negocio con el conde Orlok. Se trata de la venta de una finca de Wisborg, que linda con la casa de Hutter. Durante el largo viaje, Hutter pernocta en una posada, donde ojea un viejo tratado sobre vampiros que encuentra en su habitación. Una vez en el ... [+]
26 de febrero de 2013
5 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
Me resulta muy difícil evaluar una película como "Nosferatu". La razón, es que faltan elementos clave de eso que llamamos cine. No sólo es que no hay diálogos, sino la puesta en escena, las interpretaciones, el maquillaje, todo es tan diferente a lo que diez años más tarde, incluso menos, se podía contemplar. Por ejemplo, "Tarzán de los Monos" es de 1932. Dicho esto, hice el esfuerzo de imaginarme que estaba en una sala de cine en el año 1922. Desde luego les impactaría bastante a nuestros bisabuelos y admitiría incluso notas elevadas para este filme. Para la época no estaba mal pero más de noventa años más tarde esta supuesta obra maestra sólo puede apreciarse como documento histórico. Cualquier película está mejor hecha que ésta, cosa lógica porque los que vienen detrás van aprendiendo de los que nos preceden. Se llama evolución. Es cierto que también existe la decadencia pero para que esta llegue, tiene que alcanzarse una especie de momento cumbre del que se desciende que desde luego no era éste.

Por destacar algo reconozcamos que la presencia del vampiro no está mal o que el vestuario de 1838 es bastante fidedigno, salvo la mujer de Harding, claramente de 1921, como los zapatos de ellas, que casi nunca caracterizan correctamente. Dicho lo cual, la moda de los 30 es una de las más feas de todo el siglo. Por lo demás, lo mejor de "Nosferatu" es la adaptación que realiza de la novela de Bram Stoker. Afortunadamente esta película ha inspirado sucesivos acercamientos al vampiro, oscilando entre la obra de Stoker y la de Murnau. En este sentido, las similitudes con "El Baile de los Vampiros" (1967) o "Drácula" (1992) son evidentes, por no hablar de esa especie de making off de esta película, "La sombra del vampiro" (2000). Sin embargo, la que es calcada es la versión de Walter Herzog, "Nosferatu, vampiro de la noche" (1979). Ahora bien, las comparaciones son odiosas pero cualquiera de estas, salvo la del 2000, es infinitamente superior a la original. Con todo, la mejor es sin duda "Drácula".
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