Terror en estado puro: La tabla Ouija (TV)

"Dos colegialas usan la tabla ouija y contactan con una chica muerta que les explica que fue un profesor de la escuela quien la asesinó. Por ello, les pedirá ayuda para vengarse." Tú acabas de leer esto y piensas que esta vez sí que se puede ver algo digno (aunque sea que roce el aprobado, no pido más) pero no, 'Fear Itself' nos vuelve a traer más de lo mismo: tías buenas, tramas de mierda y escenas que asustan menos que el payaso de Micolor.

Son trece episodios y visto ya hasta el undécimo me sabría mal no acabar la serie la verdad pero vamos, quitando 'El sacrificio' (bastante currado), 'Hombre de familia' (el mejor) y 'Comunidad' (por la trama y Brandon Routh) el resto son una mierda pinchada en un palo. Lo mejor de todo como siempre es el "Lie Lie Lie" de Serj Tankian que aparece en los créditos iniciales.

Una característica que hace "grande" a Fear son esos giros tremendos de 180º en 2 minutos. Al fin y al cabo necesarios, pero siempre la cagan (explicación spoiler).

Hacía mucho tiempo que no escribía una crítica para Filmaffinity pero esto se lo merece.
Tampoco hay mucho que decir, eso es cierto.
Entre que, visualmente, parece un vídeo amateur.
Que el guión es, cuanto menos, ridículo.
Que la dirección alcanza un nivel de calidad tan bajo que no podría aceptarse viniéndo de alguien que es un profesional de la materia...
Podría centrarme en todas estas personas por realizar un trabajo tan, y lo diré sin rodeos, malo.
Pero creo que no debo culparles de todo y no me cebaré más con ellos.
Realmente, a quién hay que criticar por este capítulo no es a quienes lo han realizado. Evidentemente no son buenos en su trabajo.
Hay que criticar a unos productores que, después de ver este resultado, han actuado en contra de toda lógica y han permitido la emisión de este infame episodio que, obviamente, afectaría negativamente el prestigio de la serie (que nunca fué muy bueno).
A veces, decisiones como no desechar este producto defectuoso cuestan más que el producto en sí.
Un restaurante no debería servir comida en mal estado. Una cadena de televisión no debería emitir televisión que también lo está.

Lo que en principio parecía un pasaje de terror no llega más que a un capítulo de sobremesa aburrida. Es una producción mediocre y no lo oculta para nada, con algún momento de suspense que otro pero con una trama totalmente pueril. La verdad que es una pena que de temas tan interesantes hagan productos tan insulsos y que no se sostienen para nada.

Desde luego, hay que reconocer que la serie es bastante atractiva y aceptable.

Hoy en día, esta clase de historias independientes que conforman una serie, son bastante difíciles de llevar, ya que parece que los recursos se exprimieron en los 70 y los 80.

La duración, 40 minutos (en algún episodio llega hasta los 42), hace que no se hagan excesivamente largos, pero tampoco cortos, es decir, están a mitad de los 25 minutos de series como Historias de la Cripta y los 55 minutos de Masters of Horror, considerados casi como mini-películas.

Este episodio adolece de falta de originalidad y está bastante vacío de contenido.

Queda relegado al ostracismo.

“La tabla Güija” es un capítulo flojísimo a todos los niveles y del que únicamente se puede medio salvar esa pizca de intriga que tiene su historia. Así pues, poco o más bien nada hay que destacar de este episodio.

Sin embargo, si tengo que hablar de sus defectos entonces tendré que extenderme un poco más. Por ejemplo, el aspecto técnico es de lo más vulgar (huele a telefilme de sobremesa barato, vaya). Por desgracia no es lo único criticable de este episodio, ya que posee todo un reguero de trilladísimos clichés del género, salpicados a lo largo del metraje, que dan vergüenza ajena en numerosas ocasiones. Del guión solamente voy a decir que es tramposo como él solito, aunque eso sí, cualquier persona con más de cinco años de edad intuirá que la cosa no va a terminar como aparenta. Y por último, ni que decir tiene que miedo, lo que se dice miedo de verdad, no logra trasmitirlo al espectador en ningún momento.

Y por mi parte nada más. Espero que los próximos capítulos estén algo mejor porque con este me he llevado un buen fiasco (no me esperaba nada del otro mundo, pero tampoco este castañón tan insípido).