Las mariposas son libres

Lo cierto es que, esta película es mi favorita.

"Las mariposas son libres", es una película sencilla, sin apenas presupuesto, con menos de 10 personajes, pero te llega al corazón por su honestidad, en una palabra: es preciosa.

Como si estuviéramos metidos en un teatro vemos pasar a la gran mariposa, encarnada por una genial Goldie Hawn, una muchacha alegre, ingenua y divertida, con un peculiar estilo de vida y pensamiento, una chica de su tiempo. Edward Albert, su vecino, un muchacho ciego, bohemio, encantador, quien huye del agobio de la madre, Eileen Heckart, quien por cierto, también borda su papel de madre hipermega-preocupada por su hijo.

Estos tres personajes interactúan, a cada cual mejor, para hacernos ver que en la vida uno tiene que hacer lo que dicta su corazón, que hay que ser valiente a pesar de los obstáculos, que la libertad de una persona es muy importante y por encima de todo, está el amor, nos enseña a no tener miedo de encontrarlo ni a huir de él.

"La libertad es lo más importante del mundo para mi...después de comer".

Como ya he dicho, es sencilla, pero muy bonita. Película de diálogos y sentimientos.
Muy recomendable.

"No hay peor ciego, que el que no quiere ver".
Dirigida por Milton Katselas y escrita por Leonard Gershe, basada en su propia obra de teatro homónima, "Butterflies Are Free" es una expresión a la libertad en todos los sentidos.
Don Baker (Edward Albert) es un joven ciego de unos 22 años (edad real del actor al filmar la cinta), que acaba de independizarse y vive en un viejo apartamento en la ciudad de San Francisco, California (Estados Unidos). En la habitación contigua se muda Jill Tanner, una joven de 19 años, alegre y despreocuoada (Goldie Hawn), que anteriormente había sido hippie y había estado casada. Ambos empienzan a conocerse y a aprender el uno del otro, sin mencionar el mundo que descubren a través del punto de vista del otro.
El tercer personaje clave es la madre de Don, la señora Baker (Eileen Heckart), una mujer sobreprotectora, amorosa y autoritaria, que está totalmente en contra con la relación que han entablado Don y Jill.

La película fue candidata a la Mejor en Comedia o Musical en los Golden Globe y a 3 premios Oscar, ganando uno de ellos. Las actuaciones de los tres personajes es extraordinaria, todos cumplen a cabalidad con su objetivo de transmitir todas las emociones de sus personajes. Edward Albert fue candidato a dos Golden Globe, como Mejor Actor en Comedia o Musical y como "El Recién Llegado Más Prometedor" (Mejor Nueva Estrella), ganado este premio; Goldie Hawn en la categoría homónima femenina y Eileen Heckart, aunque no fue candidata a un Golden Globe, ganó el Oscar a la Mejor Actriz de Reparto que en mi opinión fue merecidísimo, pues su interpretación, desde cualquier punto de vista, fue inmaculada: cada disgusto, cada ironía, cada expresión de amor y preocupación hacia su hijo... ¡Excelente!

La película es preciosa, llena de sabiduría y de mensajes de autosuperación y aceptación. Aunque muy sencilla, es toda una joya. Recomendable para pasar un buen rato con los ánimos están por los suelos.

Obra de Broadway representada durante más de tres años, "Las mariposas son libres" puede que sea uno de los textos menos condescendiente con las discapacidades, en este caso, la ceguera. Nuestro protagonista es resuelto, abierto y no se lamenta. Recibe palos sentimentales y sobreprotección de su madre pero es de naturaleza optimista. Tampoco se enfrenta a situaciones desagradables porque tampoco las atrae.

Los primeros minutos se desarrollan como si de una comedia romántica se tratara pero es mucho más. Gana en intensidad en cuanto aparece en escena la gran, incombustible y carismática Eileen Heckart, la madre que antes nombramos, señora baqueteada por la vida y determinante en la actitud de sus hijo. Al fin y a cabo, nos parecemos más a nuestros ascendientes de lo que pensamos.

Esta peli no tiene nada de espectacular porque es una historia de amor entre un chico ciego y una chica divertida y liberal, pero es muy tierna. Lo más interesante es la lucha de "Donnie Oscuridad" por ser independiente y tener su propia vida. Hay cosillas que se han quedado desfasadas, sobretodo el diálogo inicial cuando se conocen y hablan sobre la ceguera como si fuera algo rarísimo y difícil de aceptar. Siempre hay que recordar que está rodada y ambientada en 1972 y que hasta hay un rollo hippy de fondo pero a veces cuesta más.

La historia es muy sencilla, pero precisamente esa es la mayor virtud de esta película. Tiene una puesta en escena casi teatral y unos actores perfectos en sus respectivos papeles. Goldie Hawn hace el mismo papel que hemos visto en tantas películas. No tiene un gran registro como actriz pero me parece que está estupenda casi siempre que la he visto. Aunque el papel de Eileen Heckart como la madre sobre protectora es la mejor sin duda. Sus escenas revisando el piso del hijo o charlando con Jill son impagables y solo por eso merece la pena ver la película.

Si te gustan las comedias románticas con un puntito de drama no te la pierdas.