No innova desde su idea, es cierto, pero tan solo alejaos del verosímil y todo irá sobre ruedas. Resacón mete mano en varios tipos de humor, varios registros tonales y, principalmente, en un guión que de tan disparatado termina por cerrar todos y cada uno de sus cabos sueltos. No termina de ser perfecta, pero por secuencias es deliciosa.

Despedida de solteros ha habido varias: se me ocurre Very Bad Things, por poner un título que se acerca a este espíritu gamberro y subversivo. En aquella la repulsión era total, en esta a lo sumo provoca alguna arcada pero para sintetizar...Resacón es incómoda cuando quiere, boba cuando se la racionaliza (algo que sólo se emplea para no dejar lagunas argumentales) y física, muy física. Todd nos tiene familiarizados en lo físico, un estilo slapstick pero más extremo que no ahorra en violencia física y visual, tan solo enumerar la cantidad de desnudos en clara alusión o bien a la humillación, o bien a la verguenza ajena.

Si estos tipos hacen todo eso sobrios, pues no sorprende lo que hayan hecho estando drogados, la verdad. Y la mirada peligrosa que la peli arriesga por ofrecernos vale más que todas esa comedias imbéciles norteamericanas.