Casados con hijos (Serie de TV)

Casados con Hijos el mejor paliativo en tiempos de Coronavirus. Maratones interminables nos ayudan a pasar los días de confinamiento.
Una adaptación magistral a la cual hay que entenderle el tono y ritmo que la buena dirección de Ferrari le imprime, muy Argentina pero sobre todo muy Latina muy nuestra que también tuvo buena aceptación en España, bien actuada, personajes bien estructurados donde Francella funge como denominador común y con una demostración de talento histriónico de Érica Rivas en el papel de María Elena Fuseneco digna de una mención aparte. No es un dechado de virtudes técnicas pero no pretende serlo.
Altamente recomendable para quien pueda despojarse de prejuicios y la vea como lo que es " una visión satírica del matrimonio con hijos.

Considero que es una muy buena serie cómica, si bien esta basada sobre la Famosa Comedia Matrimonio con Hijos de la familia Bundy, pero recreando situaciones desde la perspectiva de una familia latina. para mi gusto me he reído muchísimo por las ocurrencias del libretista y de los Actores, una gran Serie Cómica, Felicito a Guillermo Francella y a todos los Actores que lo acompañaron es esta exitosa Serie.

Adaptación de la serie norteamericana "Married with children". Si bien los guiones originales son del exterior, cosa que se ve en los créditos, hay que decir que Casados con hijos se adapta muy bien al gusto e idiosincracia locales. Eso se nota en las figuras famosas que eventuamente desfilan por la saga -por ejemplo hay un capítulo donde hay mucha referencia al mítico cantante Sandro-, en los giros idiomáticos y también en la contribución realizada por los actores. Francella desempeña muy bien su papel de padre de familia que responde al prototipo del "chanta", un hombre no muy serio que trata de obtener con recursos ramplones, ventajas de las distintas situaciones, muchas veces tratando de obtener más dinero u otros beneficios. Lo acompaña una mujer bastante superficial con quien tiene una relación marital no muy buena, donde ella aparece siempre con el rol de demandante sexual insatisfecha lo que genera constantes quejas de su marido, muchas veces hablándole directamente a ella o hacia sí mismo en voz alta. Sus hijos no tienen muchas virtudes. Su hija, es muy frívola, ignorante, y dedicada a cambiar constantemente de novio. No es muy culta -en un capítulo en que sus padres la presentan fraudulentamente como psicóloga, cuando su interlocutora le pregunta si freudiana, contesta secamente: No Ka-ri-na, remarcando las sílabas en tono de reproche. Coqui, por su parte, es un tarambana con muy poco éxito con el sexo opuesto. La comedia, en líneas generales, si bien los capítulos son numerosos con las obvias oscilaciones, mantiene en general un nivel bastan bueno de humor y es recomendable.

Casados con hijos es una serie apta para todas las clases sociales, todas las edades, y los niveles culturales.
Es una comedia que lleva a la risa fácil de un niño, pero también tiene un humor fino en el personaje de María Elena, la única que desentona con el resto, lo cual la hace única, con sus comentarios irónicos e inteligentes.

Aún después de varios años que la verla por tele, nunca entendí porque la miraba tanto, ¿me habrán cambiado?

Cuando pude repasarla para hacer esta crítica recordé varias cosas:

Lo odiosa que son las personas de esta serie. Todos los personajes, fuera de los Argento y Fuseneco y algunos personajes secundarios, son una basura de persona: antipáticos, mezquinos, estúpidos y para colmo con actores de mierda.

Recordé también lo mucho que detesto a Moni, a "Coqui" y a Paola Argento. ¿¡Pero cómo podrían no gustarme!? ¡Si son unos genios! Con la sobreactuación de Peña y los hermanos Lopilato me reí bastante, más que con sus pésimos chistes explicados y, carajo, como detesto que tengan que aclarar a cada momento porque el gag o la situación deberían ser graciosos, como si yo no pudiese llegar a entender esas escenas pedorras.

Otra cosa, ¿Por qué será que nunca tienen para comer? Capaz sea porque están pagando por cuotas la ropa, la mansión (esta debe tener algo, porque todas las personas parecen odiarla, quizás el color) y el chevy que tienen con tarjeta de crédito que obviamente todo zapatero mal pagado se puede permitir.

Fuera de esas falencias, es bastante entretenida, pero de ahí a ser la mejor serie de comedia de los últimos años, como muchos afirman, es…. Lamentable.

Lo bueno: la química Francella-Rivas, sus constantes mofas y sus momentos de locura.

Lo malo: todo lo que resta.