Tuve la posibilidad de ver este film en una exposición cultural. Había leído muchas críticas positivas -incluso las citadas en este sitio-, así que le puse algo de expectativas a esta película rodada en la provincia de Río Negro (en El Bolsón, para ser exacto).

Dejando de lado el crudo inicio, sentí que la escacez argumentativa se hacía cada vez más notoria. Si bien el director se encargó de dejar en claro ciertos matices, que una y otra vez recalca, la ausencia de sentido en muchas escenas muestran que estamos frente a una idea que sólo se completó en la cabeza de su creador. Ya que cuesta bastante hilar de qué va esta historia.

La fotografía es regular. Quienes conocen la Patagonia saben de sobra que ese lugar cuenta con paraísos increíbles. Si bien la la trama exigía tonos grises, pudieron haberse aprovehado un poco más las locaciones.
También difiero mucho con ciertos estereotipos que propone "Tres Hermanos". Esas cuestiones de los años '90 en Argentina, que resumían a alguien que escuchara música pesada como violento, falopero, reventado. Tal vez exista cierto perjuicio implícito.

En definitiva, el film muestra escenas largas que intentan rellenar el tiempo, como si fuesen pinturas que el espectador debiera codificar. Los escasos diálogos muestran con clara intención la dificultad de los protagonistas en poner en palabras su mundo interior. Pero esa decisión termina siendo un saldo negativo, ya que jamás se termina de armar el rompecabezas propuesto.

No la recomiendo.

Alias (AKA) es un muy buen thriller de acción, que cuenta con muy buenas interpretaciones. Su guión no se reduce a la construcción de tramas incoherentes, sino que fue elababorado con detalle y precisión. Es por eso que este film atrapa y cautiva desde el inicio.
No es la típica película de hollywood donde tienen que explicar remarcadamente el porque de cada situación. Esto hace que la historia tenga un mayor atractivo, a pesar de su bien lograda complejidad.
La recomiendo a todos los amantes de films de Denzel Washington y a aquellos que gustan esperar buenos giros argumentales.

Me dispuse a ver esta película luego de leer que a Tarantino le había parecido una obra maestra. El nombre me pareció atractivo, pero poco tiene que ver con lo que el film nos muestra. La historia comienza bien; se va dejando ver, digamos. Pero enseguida surge una pregunda, que a ninguna persona cinéfila avesada se le pasará y, entonces, al no hallar respuesta -ni pronto, ni nunca- esa incomodidad te termina acompañando todo el rato. Todo parece apuntar a algún giro en la trama; algo que enganche al espectador, pero no... ni eso.
Bien actuada, algo insólita en ocaciones, y muy en la media como otras tantísimas películas que recurren a la violencia para sobresalir. Sin lograrlo, claro está.
No la recomiendo.

Esperaba encontrarme con más en esta película. Muy bien logrados los tonos, acordes a lo que nos están contando. Muy bien también la fotografía, que por instantes deleita. ¿El resto? Y... ¿qué se yo? Una grandilocuencia desmedida, diálogos exagerados, Muchas escenas sobre-actuadas. Tanto de todo eso, pero sinceramente la historia continúa inamovible, lisa, llana, predecible y aburrida. Alexander Skarsgård hizo bien su laburo, y festejo que haya sido él el elegido para este protagónico. Pero la señora Nicole Kidman no tenía nada que hacer aquí. Ethan Hawke y Willem Dafoe están de relleno, para engrosar el elenco, nada más. Le puse un 4 porque algo nuevo propone, en la estética, en la crudeza, pero hasta ahí. El film tiene una enorme cantidad de incoherencias que ni vale la pena spoilearlas. Si el guión se hubiese alejado de la pomposidad shakespiriana, supongo que hubiera sido algo más genuina.

Nadie puede decir que el director Michael Bay sea malo en lo que hace. Lo que sí se puede decir o, al menos, es lo que diré, es que en este film me resultó extremadamente exagerado. La historia comienza bien, engancha. Luego, sucede lo previsible y, desde entonces, comienzan a surgir una suma de incoherencias que nada bien le hacen a la narración. Siento que ha habido mucho que está de más: gritos, accidentes, hasta moralina. Prefiero a los malos, bien malos. Y no esta cosa ambigua que no sabe hacer pie, pues busca empatizar con el espectador... y no lo logra.
Sé que Jake Gyllenhaal no tiene que demostrar nada más. Aquí le tocó este flaco personaje, pero ha sabido sacarle brillo. Eiza González promete mucho. Seguro la veremos más seguido en la pantalla grande.
En fin... este film podría haber sido bastante más sobrio y a lo mejor la historia gustaba mucho más.