Como Motivos Personales y Círculo Rojo, El Internado es una de esas series con una supuesta trama compleja que, si nos atrevemos a desmadejarla, se queda en nada, ya que es mero artificio. Y es que "El Internado" es una serie que peca de una presunción totalmente desmedida. Es cierto que la serie destaca sobre las demásd e producción nacional, no porque sea buena, sino porque las demás son malas a rabiar. Pero aparte de su excelente factura técnica, hay que reconocerlo, no hay nada más. El argumento es absurdo y a cada capítulo se enrevesa más para alargarla como el culebrón en que se va a convertir. Ya tenemos fenómenos sobrenaturales, y no descarto que el monstruo del Lago Ness aparezca en el bosque, o que los asesinatos de los chicos sean obra de unos extraterestres esquizofrénicos. Los diálogos, pese al buen hacer de los actores, son ridículos en muchas ocasiones y ni siquiera las buenas interpretaciones pueden salvarlos. Por cierto, para tener 16 años, estos nenes y nenas están muy desarrolladitos.

Como ya se ha dicho, la serie está repleta de tópicos y tiene el tufillo habitual de las series españolas. Con esto no quiero decir que no me gusten las series españolas, pero todas suelen tener ese olor, como a correción política, mezclada con infantilismo y los mismos pseudo golpes de humor, que a fuerza de repetirlos, llegan a ser desagradables. La verdad es que me había hecho expectativas sobre esta serie, esperaba algo más serio, trascendente, adulto... no sé, será porque últimamente veo demasiadas series estadounidenses (no todas las americanas son así, pero las que veo sí) y no la memez que vi. Los actores no convencen, los decorados no son reales, las tramas son demasiado irreales, los personajes demasiado estereotipados... Una decepción en toda regla. Me da igual que dure 3 ó 4 episodios, pero dure lo que dure, será otro fracaso de la ficción española, y van... he perdido la cuenta.