De nuevo tenemos de vuelta a Jig Saw y el juego da de nuevo comienzo con otro enrevesado puzzle a resolver. Nuevo reparto exceptuando a Tobin Bell que regresa como el temido asesino del puzzle con sus macabros juegos dispuestos nuevamente a hacer decidir a sus victimas que prefieren: vivir o morir.

Nuevamente nos encontraremos ante un grupo esta vez muy reducido de personas atrapadas en un lugar a merced de las terroríficas trampas mientras que por otro lado se desarrolla una trama policial de investigación para intentar resolver el origen de los cadáveres que comienzan a aparecer repartidos por la ciudad comenzando de esta manera un juego del gato y el ratón dónde todos son sospechosos.

El argumento esta bastante bien hilado, y sirve tanto de reinicio de la saga como de continuación de todo lo ya visto ya que encaja la historia a la perfección con las anteriores películas pero al mismo tiempo funciona por si sola como película independiente de las demás. En ese aspecto chapo. La película en su estructura quizás sea la que mas bebe del primer Saw, una trama repleta de giros argumentales, en concreto uno de ellos aún sabiendo que lo que veía era imposible que pasara me dejo con el culo torcido de lo sumamente inesperado y bien metido que esta. Pero no es el único, como bien digo la historia a pesar de contar solo con unos 90 minutos de duración es tremendamente enrevesada, un verdadero puzzle a resolver y cuando crees que ya tienes todas las piezas encajadas la película realiza otro nuevo giro de guión dándote un tremendo zas en toda la boca. Pero es en los últimos cinco minutos como siempre suele ser habitual en esta saga en el punto ideal en el que el espectador esta ya sumamente rallado y no sabe ya por dónde tirar cuando la película pone todas sus cartas boca arriba y es en esos últimos cinco minutos dónde como con cualquier buen puzzle todas las piezas encajan a la perfección y dónde el público se queda con la boca abierta con la resolución del mismo.

En cuanto a las trampas son originales, diferentes a las ya vistas, hay alguna verdaderamente bien currada, pero si en algo son llamativas es en que no son excesivamente gores como en algunas de las anteriores películas de la saga, son mortíferas si y acojonan lo suyo, pero los litros de sangre y vísceras derramadas son infinitamente menores, que ello no quita para que las consecuencias que originan sean igualmente mortales. Por decirlo de alguna manera, son trampas algo "mas elegantes y sutiles" de a lo que nos tienen acostumbrados.

En cuanto a Tobin Bell regresa en su papel repleto de sorpresas inesperadas para demostrar que aún tiene mucho que decir en esta saga a pesar de que todos ya sabemos cual fue su final en Saw 3... o a lo mejor no... bueno mejor no digo nada mas y lo descubrís por vosotros mismos jajaja. El resto del reparto cumple bastante bien aunque ninguno destaca por encima de otros.

En definitiva, Saw ha regresado con la que posiblemente es su mejor entrega junto a la primera película. Los giros de guión son buenísimos y os dejaran loquisimos en mas de una ocasión. Funciona perfectamente como reinicio pero al mismo tiempo como secuela y la resolución de la película es totalmente satisfactoria al encajar todo perfectamente. Mi nota final por tanto es de un 8.5 sobre 10.

¡¡¡Fin del Juego!!!

¿Fin del Juego?

No creo... ni quiero.