A mí es que siempre me ha encantado el estilo de Ritchie. A la vista está que es un director con una imaginación desbordante y una capacidad de inventiva estética que ya la quisieran profesores de Bellas Artes de todo el mundo.

Quizá por eso, porque me encanta su estilo, estoy dispuesto a perdonarle ciertas faltas tan flagrantes como las que se mencionan en otras críticas. Pero también, como aficionado acérrimo que me considero, no puedo por menos que puntuar esta película bajita, bajita. Algo así como cuando un profesor te suspende en septiembre y te dice "Porque sé que podrías hacerlo mejor".

Porque, no se engañen, señoras y señores, "Juego de sombras" es un blockbuster del montón. Tiene algunos puntazos de genio, pero es bastante floja.

Así pues, en resumen, que sí, que está entretenida, pero yo la entiendo como una película para abrir boca hasta que al muchacho le dé por continuar la saga de "Rocknrolla" ó volver al cine más independiente. Y manténgase alejado de Madonna.