Siendo sincero, no me gusta el villano, creo que la idea de repetir un experimento mas grande, más peligroso, y con menos medios, solo impulsado por una especie de “ego”, deja mucho que desear.
Creo que la evolución de Mary Jane no solo resulta apresurada, sino también incoherente con la historia que se construyó en la anterior entrega; todavía recuerdo el escalofriante cierre de la anterior obra, una dulce afirmación que en boca de la propia MJ: “Solo hay un hombre que me ha dado el apoyo que necesito”, para que de forma esporádica, aquí se dirija al mismo como “una butaca vacía”. En esta entrega la idea de un amor prohibido debería haberse consolidado, pero no desde MJ, si no por el propio Parker. Esta decisión es una herramienta para clarear y convertir en una entidad más inocente a nuestro protagonista, si bien paradójicamente se le arrebata de ese sacrificio que perpetró en la escena anteriormente mencionada.

Pero, en este caso ¿Por qué no he arremetido contra la nota? Quien me conozca sabrá que no dudo en reducir mi nota media a un remarcable 3.9 como en su momento fue.

La respuesta radica en absolutamente todo lo demás.
¿En cuantas otras películas de superhéroes o para ese publico profundizan tanto en el doble conflicto en el que se ven envueltos Harry y Peter?

¿Cuántas otras películas saborean de forma tan amarga esa disociación entre la vida del héroe y el del hombre?
El papel de la libertad personal del héroe como “deber” de sacrificio, y no como oportunidad de hacerlo. Esto se explora no solo mediante el Tio Ben con su famosa frase: “Un gran poder conlleva una gran responsabilidad”; el papel de Octavius ejemplifica como la inteligencia también puede ser un bien a cultivar y a sacrificar en pos de la humanidad. ¿Hasta que punto Octavius debía sacrificar su libertad, su vida y su moral en pos de dar rienda suelta a la inteligencia que poseía y podía usar a fin de cambiar la historia indudablemente para bien? ¿Debe spider-man ser el juez-jurado y verdugo de Nueva York? ¿Debe su sacrificio anteponerse a la moral de los que lo rodean?

No es el peliculón que podría haber sido, pero para los más adultos esconde un trasfondo para nada despreciable.