Después de tantos años el profesor Henry Jones (Sean Connery), padre de Indiana Jones (Harrison Ford), conoce por fin a Willie (Kate Capshaw), la chica con la que en mi fantasía particular Indiana queda definitivamente. Bonita reunión familiar. Dicha esta tontería que no podía callar vayamos a por "Causa justa", thriller que empieza fuerte pero que va perdiendo fuelle a medida que pasan los minutos. Los últimos 20 minutos son hasta tontos. No está mal realizada la película pero carece de una intriga o un guión más elaborado o algo más de acción, siendo en conjunto todo demasiado sencillo, como en la concisa parte judicial, que te sabe a poco.

El filme se basa en una novela de John Katzenbach pero con la particularidad de que el final es distinto. De todos modos el gran acierto de Arne Glimcher, director que por el nombre bien podría ser hombre o mujer, es atreverse con una historia muy política incorrecta. Para no desvelar el misterio, que evidentemente lo tiene, sólo diré que es bastante inusual y puede que polémico. De los actores, además de un Sean Connery quizá demasiado mayor teniendo en cuenta que le saca 23 años a su mujer en la ficción, Kate Capshaw, destacan unos acertados Ed Harris y Laurence Fishburne, y una Scarlett Johansson que no sé si tendría diez años.