US 
Canadá 
México 
España 
UK 
Irlanda 
Australia 
Argentina 
Chile 
Colombia 
Uruguay 
Paraguay 
Perú 
Ecuador 
Venezuela 
Costa Rica 
Honduras 
Guatemala 
Bolivia 
Rep. Dominicana 4 meses, 3 semanas, 2 días
20.156
Drama
Rumanía, 1987: el país se encuentra bajo el férreo régimen comunista de Ceaușescu. Otilia y Gabita son estudiantes y comparten habitación en una residencia. Gabita está embarazada, pero no quiere tenerlo. Las jóvenes acuerdan un encuentro con un tal Mr. Bebe para que le practique un aborto ilegal en la habitación de un hotel. (FILMAFFINITY)
12 de marzo de 2011
13 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
Por fin me decido a aportar mi interpretación crítica de la película que dio a conocer internacionalmente el tan aclamado nuevo cine rumano del que, por otra parte, nos ha llegado tan solo una pequeña proporción de lo que se ha venido haciendo. Es significativo el auge que está experimentando en la actualidad la cultura rumana a todos los niveles: artes dramáticas, ensayo, literatura y, por supuesto, cine. Si la a menudo caprichosa Academia Sueca acaba haciendo justicia a lo que ya es una realidad pronto tendremos el primer Premio Nobel de Literatura en lengua rumana, Mircea Cartarescu, a quien ya se puede leer en castellano gracias al trabajo de magníficas editoriales de segundo línea pero primera calidad.
Parece que últimamente se oyen rumores cada vez más insistentes de que se van a recortar las ayudas de la UE al cine europeo; de cualquier modo espero que los Puiu, Mungiu, Muntean, Porumboiu o Nemescu, por citar sólo a los más significativos directores de cine rumanos, puedan seguir contando de algún modo con los medios necesarios para seguir brindándonos su excelente contribución al cine social y que éste pueda seguir llevándose a cabo en Rumanía. Todos ellos han mostrado sobradamente su compromiso con la actualidad y el pasado de su país, convirtiéndose en la vanguardia de una élite intelectual destinada a pasar a la historia y a tener una voz decisiva en el futuro de Rumanía.
Tras este alegato en favor de la cultura rumana que se me imponía como algo necesario desde el punto de vista intelectual y sentimental puedo pasar a aportar mi personal visión del film en cuestión. No es una casualidad que fuera la obra de Mungiu la que diera a conocer el nuevo cine rumano, básicamente porque trata un tema de rabiosa actualidad e interés para la mayor parte del público occidental, el aborto. Pero además lo hace desde una perspectiva brillante con unos actores en estado de gracia - a destacar Vlad Ivanov, quien siempre raya a un gran nivel en sus actuaciones ("Historias de la edad de oro" o "Policía, adjetivo") - y una dirección excelente que, en conjunto, reflejan la gris cotidianeidad de una sociedad sin la opción de decidir cómo disfrutar y encaminar su propia existencia. Precisamente es esto lo que más desapercibido puede pasar al espectador no familiarizado con la historia rumana y el régimen de Ceaucescu y, en mi opinión, es aquí donde el film de Mungiu alcanza el valor histórico que lo convierte en un clásico del cine por derecho propio.
Parece que últimamente se oyen rumores cada vez más insistentes de que se van a recortar las ayudas de la UE al cine europeo; de cualquier modo espero que los Puiu, Mungiu, Muntean, Porumboiu o Nemescu, por citar sólo a los más significativos directores de cine rumanos, puedan seguir contando de algún modo con los medios necesarios para seguir brindándonos su excelente contribución al cine social y que éste pueda seguir llevándose a cabo en Rumanía. Todos ellos han mostrado sobradamente su compromiso con la actualidad y el pasado de su país, convirtiéndose en la vanguardia de una élite intelectual destinada a pasar a la historia y a tener una voz decisiva en el futuro de Rumanía.
Tras este alegato en favor de la cultura rumana que se me imponía como algo necesario desde el punto de vista intelectual y sentimental puedo pasar a aportar mi personal visión del film en cuestión. No es una casualidad que fuera la obra de Mungiu la que diera a conocer el nuevo cine rumano, básicamente porque trata un tema de rabiosa actualidad e interés para la mayor parte del público occidental, el aborto. Pero además lo hace desde una perspectiva brillante con unos actores en estado de gracia - a destacar Vlad Ivanov, quien siempre raya a un gran nivel en sus actuaciones ("Historias de la edad de oro" o "Policía, adjetivo") - y una dirección excelente que, en conjunto, reflejan la gris cotidianeidad de una sociedad sin la opción de decidir cómo disfrutar y encaminar su propia existencia. Precisamente es esto lo que más desapercibido puede pasar al espectador no familiarizado con la historia rumana y el régimen de Ceaucescu y, en mi opinión, es aquí donde el film de Mungiu alcanza el valor histórico que lo convierte en un clásico del cine por derecho propio.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
4 de junio de 2009
56 de 100 usuarios han encontrado esta crítica útil
La película me ha dejado helado.
O a lo mejor es como decía el Charlie Kaufman de "Adaptation": el problema debe de estar en mí. Sinapsis defectuosas. Un fallo bioquímico.
La historia me resulta fría, cerebral, desapasionada. Muy europea. Un film sin corazón.
El largo bloque desarrollado en la habitación de un hotel peca de teatral.
El realismo de la película no es más que eso. Realismo. No basta para crear un drama interesante. ¿Real? Sí. ¿Dramático (en el sentido más clásico/aristotélico de la expresión)? No.
La importancia del tema a tratar no hace que el film sea mejor. ¿Denuncia de situaciones en las que el aborto es ilegal y lleva a extremos horribles (como en "Vera Drake")? Sí. Pero... ¿y la historia? ¿Donde está? Tener una tesis que se quiere demostrar no da validez a una película de ningún modo. La cosa no funciona así.
¿Y el tempo de la historia? Lento. Moroso. Pesado. Lo que se cuenta se podría haber contado con el doble de velocidad y sin pérdidas narrativas de ninguna clase. Pero claro... los amantes del cine de arte y ensayo argumentarán que cada película requiere un tempo diferente.
Pues yo lo dudo. Sobre todo en el siglo XXI, época en la que estamos saturados de contenidos audiovisuales y nuestra atención está más cerca de la de la gente con T.D.A. que de la del público de hace cuarenta años.
Bueno. No importa. Es sólo mi opinión.
Vótenme negativamente si no les gusta mi crítica y positivamente si están de acuerdo.
O a lo mejor es como decía el Charlie Kaufman de "Adaptation": el problema debe de estar en mí. Sinapsis defectuosas. Un fallo bioquímico.
La historia me resulta fría, cerebral, desapasionada. Muy europea. Un film sin corazón.
El largo bloque desarrollado en la habitación de un hotel peca de teatral.
El realismo de la película no es más que eso. Realismo. No basta para crear un drama interesante. ¿Real? Sí. ¿Dramático (en el sentido más clásico/aristotélico de la expresión)? No.
La importancia del tema a tratar no hace que el film sea mejor. ¿Denuncia de situaciones en las que el aborto es ilegal y lleva a extremos horribles (como en "Vera Drake")? Sí. Pero... ¿y la historia? ¿Donde está? Tener una tesis que se quiere demostrar no da validez a una película de ningún modo. La cosa no funciona así.
¿Y el tempo de la historia? Lento. Moroso. Pesado. Lo que se cuenta se podría haber contado con el doble de velocidad y sin pérdidas narrativas de ninguna clase. Pero claro... los amantes del cine de arte y ensayo argumentarán que cada película requiere un tempo diferente.
Pues yo lo dudo. Sobre todo en el siglo XXI, época en la que estamos saturados de contenidos audiovisuales y nuestra atención está más cerca de la de la gente con T.D.A. que de la del público de hace cuarenta años.
Bueno. No importa. Es sólo mi opinión.
Vótenme negativamente si no les gusta mi crítica y positivamente si están de acuerdo.
¡Patos!
9 de agosto de 2008
16 de 20 usuarios han encontrado esta crítica útil
Es bastante complicado hacer una película con tan pocos medios pero Cristian Mungiu consiguió crear una franca y dura película con apenas 4 actores y 2 escenarios. El film cuenta escueta y fríamente como una joven con ayuda de su amiga, acude a un hotel para que un hombre le practique un aborto.
Los 4 acores, Otilia (Anamaria Marinca), Gabita (Laura Vasiliu), Mr.Bebe (Vlad Ivanov) y el novio de Otilia (Alexandru Potoceanu) realizan un gran trabajo, en especial la protagonista, Otilia, quien se desvive y sacrifica por su amiga para que el aborto salgo lo mejor posible.
"4 meses, tres semanas y 2 días" tiene dos escenarios principales, el primero de ellos es la residencia de estudiantes en la que nos presentan a Otilia y Gabita. El segundo es la habitación de hotel en la que le practican a Gabita el aborto, entre otras cosas.
Y es en este sencillo escenario donde sentimos la dureza del film. Desaliento, desesperanza y miseria. Sólo son tres sensaciones, pueden ser más, pero son tres sensaciones muy difíciles de transmitir, y una habitación de hotel con tres personas transmite esto y mucho más.
Los 4 acores, Otilia (Anamaria Marinca), Gabita (Laura Vasiliu), Mr.Bebe (Vlad Ivanov) y el novio de Otilia (Alexandru Potoceanu) realizan un gran trabajo, en especial la protagonista, Otilia, quien se desvive y sacrifica por su amiga para que el aborto salgo lo mejor posible.
"4 meses, tres semanas y 2 días" tiene dos escenarios principales, el primero de ellos es la residencia de estudiantes en la que nos presentan a Otilia y Gabita. El segundo es la habitación de hotel en la que le practican a Gabita el aborto, entre otras cosas.
Y es en este sencillo escenario donde sentimos la dureza del film. Desaliento, desesperanza y miseria. Sólo son tres sensaciones, pueden ser más, pero son tres sensaciones muy difíciles de transmitir, y una habitación de hotel con tres personas transmite esto y mucho más.
29 de diciembre de 2008
42 de 73 usuarios han encontrado esta crítica útil
Pues seguro que a los rumanos les conoceis por muchas cosas y ninguna buena. Como son pobres, tienen que hacerse pasar por sordomudos o discapacitados y cuando les vas a ayudar te roban la cartera, a mi amigo Joseba una vez le robó la cartera una niña rumana que decía que era sordomuda, lo decía con gestos claro. Pues hay un señor que en vez de tener que ganarse la vida así, tuvo una idea inventiva y dijo que iba a hacer una película, y ahora es rico.
Para saber algo más de la pelicula, pues en Rumanía habia un señor muy malo que se llamaba Caucescu que tenía muchos hombres preparados para la batalla siempre y si hacías algo malo te cogían y te llevaban a la guillotina, la guillotina te corta el cuello y te mata. Eso sí, en vez de tanques iban en caballos porque no tenían dinero y además era una antigua época. Por eso esta chica de la película que además tiene un muy sensual cuerpaco, no le dejan tener el hijo y tiene que sacárselo un hombre. Es normal que no haya escenas de acción si no tienen dinero, es más mejor hacer una película dramática sin presepuesto que tener que decirle a tu hija que se haga paralítica, eso es muy triste y deshumano.
Bueno es la película muy combativa en el sentido que los curas seguro que se quejan , porque los curas siempre dicen cosas en contra del aborto y se quejan de todo. La verdad es que nunca vi una pelicula así , espero que los rumanos sigan haciendo peliculas y dejen de hacer cosas malas.
HAY QUE VERLA
---EdOrTa---
Para saber algo más de la pelicula, pues en Rumanía habia un señor muy malo que se llamaba Caucescu que tenía muchos hombres preparados para la batalla siempre y si hacías algo malo te cogían y te llevaban a la guillotina, la guillotina te corta el cuello y te mata. Eso sí, en vez de tanques iban en caballos porque no tenían dinero y además era una antigua época. Por eso esta chica de la película que además tiene un muy sensual cuerpaco, no le dejan tener el hijo y tiene que sacárselo un hombre. Es normal que no haya escenas de acción si no tienen dinero, es más mejor hacer una película dramática sin presepuesto que tener que decirle a tu hija que se haga paralítica, eso es muy triste y deshumano.
Bueno es la película muy combativa en el sentido que los curas seguro que se quejan , porque los curas siempre dicen cosas en contra del aborto y se quejan de todo. La verdad es que nunca vi una pelicula así , espero que los rumanos sigan haciendo peliculas y dejen de hacer cosas malas.
HAY QUE VERLA
---EdOrTa---
25 de marzo de 2008
13 de 16 usuarios han encontrado esta crítica útil
Bajo el durísimo relato de supervivencia que muestra esta película se esconde una historia que trata fundamentalmente de la amistad llevada hasta sus últimas consecuencias. Es también el retrato desgarrado y auténtico de la odisea por la conquista de las libertades individuales en un régimen autoritario y decadente como el de Ceaucescu.
El director Cristian Mungiu ha logrado crear una pequeña joya del cine europeo apelando a la sensatez y a la amplitud de miras en un tema tan controvertido y difícil como es el aborto. Y si lo ha conseguido es gracias a una serie de elementos y circunstancias mezclados con maestría, a saber:
- Ausencia total de interés por el dramatismo.
- Lógica interna sin concesiones.
- Manejo perfecto del fuera de campo y de la elipsis temporal.
- Excelente uso de los silencios y de la expresividad de las miradas.
- Un guión consecuente y sólido.
- Inmejorable crítica subyacente e indirecta al contexto social de Rumanía.
- Notable capacidad de aislar personajes en la circunstancia de la escena.
A todo ello hay que añadir unas interpretaciones magníficas, en especial la del actor Vlad Ivanov que logra crear uno de los personajes más perversos que ha dado el cine en los últimos años.
No hay que valorar a "4 meses, 3 semanas y 2 días" desde la perspectiva sombría de la tragedia que narra sino más bien desde una óptica de libertad creativa libre de prejuicios y sin ningún tipo de concesión. La película interpela al espectador y le invita a unirse a las vivencias de sus protagnistas y buena prueba de ello es la inquietante mirada final a cámara de la protagonista de esta historia de amistad sin condiciones.
El director Cristian Mungiu ha logrado crear una pequeña joya del cine europeo apelando a la sensatez y a la amplitud de miras en un tema tan controvertido y difícil como es el aborto. Y si lo ha conseguido es gracias a una serie de elementos y circunstancias mezclados con maestría, a saber:
- Ausencia total de interés por el dramatismo.
- Lógica interna sin concesiones.
- Manejo perfecto del fuera de campo y de la elipsis temporal.
- Excelente uso de los silencios y de la expresividad de las miradas.
- Un guión consecuente y sólido.
- Inmejorable crítica subyacente e indirecta al contexto social de Rumanía.
- Notable capacidad de aislar personajes en la circunstancia de la escena.
A todo ello hay que añadir unas interpretaciones magníficas, en especial la del actor Vlad Ivanov que logra crear uno de los personajes más perversos que ha dado el cine en los últimos años.
No hay que valorar a "4 meses, 3 semanas y 2 días" desde la perspectiva sombría de la tragedia que narra sino más bien desde una óptica de libertad creativa libre de prejuicios y sin ningún tipo de concesión. La película interpela al espectador y le invita a unirse a las vivencias de sus protagnistas y buena prueba de ello es la inquietante mirada final a cámara de la protagonista de esta historia de amistad sin condiciones.
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here
